"La Tierra es azul, qué maravilla". Estas fueron las palabras del primer humano en vencer la gravedad de la Tierra y contemplarla desde el espacio. Lo hizo en YuriGagarin en abril de 1961, seguramente sin saber que no solo harían falta ocho años para llegar a la luna, sino que, unas décadas más tarde, el exponencial crecimiento de la tecnología permitiría soñar a los habitantes de la Tierra con llegar a otros planetas. Y es que desde la década de los 60, la relación de los humanos con el espacio ha pasado por una transformación revolucionaria: desde ver cómo nuestro planeta deja de ser tan azul para acontecer más verde, según la NASA, debido a las consecuencias del cambioclimático, hasta llegar al concepto del NewSpace (o nueva economía del espacio), surgido a inicios de este siglo para hacer referencia a la democratización del acceso, exploración y uso del espacio. Así, la tecnología ha abierto un abanico de posibilidades que ha llevado a Catalunya a usar el potencial de las empresas del sector aeroespacial, de las universidades y de los centros de investigación para idear la Estrategia NewSpace. Pero, ¿qué estamos haciendo exactamente desde el espacio?
"Nos observamos y gestionamos mejor desde el espacio"
“Desde el espacio es mucho más fácil observar e interactuar con la Tierra. El hecho de que podamos vernos a nosotros mismos, nuestra capacidad de organizarnos como seres humanos es mucho mejor, porque vemos cómo nos movemos nosotros, o las mercancías, por ejemplo. Nos observamos y gestionamos mejor”, asegura a VIA EmpresaLluisJuncà, director general de Innovación, Economía Digital y Emprendimiento de la Generalitat de Catalunya.
En este sentido, hace décadas que Catalunya ha aumentado la actividad en el sector espacial a partir de varios ámbitos, como el público, el académico o el industrial. Se trata de una actividad “especialmente proactiva” en estos dos últimos, según explica a VIA EmpresaJosepColomé, director del Área de Promoción del Sector Espacial de Catalunya del Institut Estudis Espacials de Catalunya (IEEC), quien detalla que han estado implicados en misiones de la Agencia Espacial Europea (ESA). En este sentido, el ecosistema del NewSpace en Catalunya está compuesto por un total de 96 entidades, entre las que destacan el IEEC, la Fundació i2CAT y el Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya (ICGC) como principales impulsores.
La actividad del ecosistema espacial permite, por ejemplo, detectar cambios en la costa catalana como los provocados por la borrasca Nelson, que ha dejado playas sin arena y paseos marítimos catalanes bastante afectados en las últimas semanas. Sin embargo, “además de la actividad que se lleva a cabo con los satélites, que proporcionan datos de la Tierra o del universo, y datos climáticos o atmosféricos que se realizan desde el espacio, en el sector espacial también se encuentran las infraestructuras terrestres, que contribuyen a la construcción de estos sistemas”, añade Colomé.
?️El #Menut ayuda a detectar cambios a la costa catalana cómo los provocados por la borrasca Nelson y a entender mejor la dinámica litoral #EstrègiaNewSpace
— TIC Catalunya (@tic) May 3, 2024
? Playas de Fenals y Lloret de Mar
1️⃣ Imagen satélite Menut 13/4/24
2️⃣ Imagen aérea rectificada vigente ICGC (ortofoto) pic.twitter.com/3arnfpmooc
2025: una nueva misión satel·litària y el cuarto jinete catalán del espacio
Así, los últimos avances en tecnología están dando lugar, según Juncà, a un “cambio de paradigma”: “Ahora somos capaces de tener en el espacio satélites mucho más pequeños y mucho más baratos. Con menos presupuesto se puede estar en el espacio, ya que los microsatélites son más fáciles de fabricar, lanzar y mantener”. La cuarta misión satelitaria de la Estrategia NewSpace de Catalunya presentada el pasado mes de abril es un ejemplo, ya que la inversión de 3,4 millones de euros que llevará a cabo el Govern supondrá un paso adelante en cuanto a la actividad catalana en el espacio, con un cuarto microsatélite de unos 50 kilogramos de peso equipado con una cámara multiespectral y un sistema de comunicaciones IoT que en 2025 se añadirá al tridente actual formado por el Enxaneta, el Menut y el Minairó.
“La misión, adjudicada a OpenCosmos, está destinada a la recogida de datos de observación de la Tierra y se completará con el servicio de al menos dos satélites más de la compañía”, explica Colomé, quien detalla que el Menut, desarrollado y operado también por Open Cosmos, ya se encarga de esta actividad, pero las prestaciones son bastante limitadas en comparación con las del satélite que se lanzará el año que viene. “A diferencia de la segunda misión, esta es aún más ambiciosa, especialmente por las bandas espectrales de las imágenes que obtendremos, que nos proporcionan información sobre la vegetación o el estado de los acuíferos”, añade el director del Área de Promoción del Sector Espacial de Catalunya del IEEC, quien destaca que la actividad de este satélite también permitirá controlar y combatir los efectos de la crisis climática.
El cuarto microsatélite, además, permitirá un rastreo de todo el territorio catalán en un período de tiempo inferior: “Esta cuarta misión llevará a cabo una cobertura completa de toda Catalunya en una frecuencia menor de 20 días, ya que los dos satélites complementarios permitirán alcanzar tiempos de revisita inferiores”. Colomé también destaca que los tiempos de entrega de los datos por parte del microsatélite serán “más cortos”, y que a los 32.000 kilómetros cuadrados de superficie que tiene Catalunya, se añadirán 100.000 más que servirán para explorar y obtener información de otros territorios del planeta.
La Estrategia NewSpace: una oportunidad para la industria catalana
Aunque 2025 se presenta como un antes y un después para la actividad catalana en el espacio, el director general de Innovación, Economía Digital y Emprendimiento de la Generalitat de Catalunya recuerda que la Estrategia NewSpace no consiste únicamente en el lanzamiento de misiones: “La estrategia es una oportunidad para que la industria catalana entrene y perfeccione su tecnología hasta hacerla competitiva, para poder sacar pecho de tener empresas de primer nivel, y ayudarles a crecer para que creen empleo de calidad”, explica Juncà, quien, muy optimista, concluye que “Catalunya es una región líder que cuenta con el talento de nuestras universidades, especialmente la UPC, que está en una diáspora internacional de primer nivel y cuenta con estudiantes en la NASA. Hace poco que formamos parte de esta industria, pero hace 30 años que tenemos talento catalán en todo el mundo”.