Un grupo de accionistas de Cementos Molins ha denunciado a la empresa por trasladar la sede social de Sant Vicenç dels Horts a Madrid en octubre de 2017, según publica el diario Ara. Unos siete accionistas, que son miembros de la familia Molins, han pedido que se declare ilegal y se anule el traslado porque consideran que la sede social en Madrid es un fraude de ley porque la compañía solo tiene un despacho en la capital.
También reclaman que se declare inconstitucional el decreto ley impulsado por el Gobierno del Partido Popular que facilitó el traslado de sedes de empresas fuera de Catalunya durante octubre de hace dos años. Y piden que se eleve el caso a los tribunales europeos porque consideran que la norma va en contra de tratados de la Unión Europea.
Cementos Molins ha declinado hacer declaraciones sobre la cuestión y fuentes conocedoras han informado de que la compañía recibió la denuncia presentada por los accionistas.