Vestir los bebés con ropa elegante, pero estela de banda el concepto clásico del tejido de punto. Con este propósito, las hermanas Rosa Maria y Montse Jumet reorientaron hace ocho años el negocio textil tradicional y familiar, centrado en la fabricación de ropa de mujer, para impulsar la marca Copo Baby, dirigida a hacer de la moda una experiencia personalizada y con una producción de proximidad. Desde sus talleres de Artesa de Segre (La Noguera) e Igualada (la Anoia) salen todas las prendas de ropa para bebés de 0 a 2 años.
"Queremos reinterpretar el concepto clásico del género de punto para los bebés con materias primeras de calidad, como el algodón orgánico, la lana y la cachemira", comentan las germanas Jumet. Bajo la premisa de que los más pequeños se visten con un toque de punto e infantil que los hace diferentes, desde Copo Baby apuestan por el diseño propio de las colecciones, que se venden en sus tiendas o a través de los distribuidores.
Tiendas con espacio de lactancia
Copo Baby comercializa tejidos para bebés en diferentes tiendas multimarca del Estado español, los Estados Unidos y Rusia. A pesar de que la exportación supone el 30% de la producción, las germanas Jumet confían que con la puesta en marcha de la venta online "las operaciones al exterior se incrementen". Hace dos años, la compañía inauguró una tienda propia en Reos y seis meses atrás abrió otra en Girona. "Intentamos que sean lugares exclusivos, con calidad y especiales. Por eso, hemos instalado un espacio de lactancia porque las madres puedan amamantar sus bebés", apuntan.
Las germanas Jusmet de Copo Baby | Cedida
En sus tiendas, un 90% de los productos que se exponen son de la marca Copo Baby. El resto son complementos por los bebés "porque la visita acabe siendo toda una experiencia alrededor del mundo del niño". De hecho, la firma leridana está evolucionando con sus clientes: "Ahora ya fabricamos y distribuimos ropa para niños de 0 a 8 años". Inicialmente, sólo lo hacían para bebés de hasta 24 meses. El diseño europeo, especialmente el italiano, es el que buscan plasmar a sus colecciones.
Sin costuras y kilómetro 0
Gracias al proceso que ha iniciado Copo Baby para crecer y evolucionar con los clientes, "ahora el objetivo implica cubrir todas las necesidades de los bebés, desde que nacen hasta que tienen ocho años". En esta línea, la empresa trabaja para desarrollar una gama más casual y otro más sport. La personalización de sus tejidos ha hecho que las piezas de Copo Baby hayan llegado a mercados como el Reino Unido, Italia o Kuwait.
Las máquinas de coser con las que fabrica Copo Baby en Igualada no tienen costuras, hecho que permite revisar y realizar los acabados en Artesa de Segre. Desde allá también se inicia la distribución de la ropa. "Todo está hecho aquí", recuerdan las germanas Jusmet. Así explican otro de los factores diferenciales de la compañía: "La gente lo valora cada vez más. Saben que los tejidos, el diseño, la fabricación, los acabados y la distribución son de kilómetro 0". Es el punto añadido que Copo Baby ofrece a sus creaciones para la ropa de bebé.