De anunciar el cierre a invertir 200 millones de euros a las fábricas de Cataluña. Covestro ha revivido y apuesta por sus plantas de Tarragona y Barcelona. Con una facturación global de 14.100 millones de euros, la filial de materiales de Bayer emplean su camino sola. Después de años arraigada a casa nuestra, esta compañía ha acontecido uno de los pilares de la industria química del país. Dirigida por Andrea Firenze desde el 2016, la alemana da trabajo a 360 personas.
Una espín off con 150 años de experiencia
Covestro es una espín off de Bayer. La empresa derivada nace como una startup con 150 años de experiencia de la matriz. Bayer se instaló en España en 1899 con la sociedad Federico Bayer y Cía por la comercialización des suyos colorantes.
El 1967 pone en marcha la factoría de la Zona franca de Bayer Hispania con la compra de la desaparecida Pesa, dedicada al cromo o el acid sulfúrico. Materiales muy exitosos en cierto momento pero con un fuerte impacto ambiental y a qué Bayer renunció para apostar por productos orgánicos. "En los 60 era un producto muy atractivo: vehículos, grifos, curtits, etc.", explica Firenze.
El 1971 se pone en marcha la fábrica de Bayer en el polígono industrial de La Canonja: "En Tarragona empezamos de cero y, con las fronteras cerradas, hacía falta producción local", relata. Esta era una planta pequeña por el mercado español que produia un material empleado en colchones y almohadas. Por qué Tarragona? Tenía potencial: agua, lejos de un gran centro como Barcelona, pero cerca de un puerto. Y tenían razón, ha acontecido un potente polo industrial químico.
Bayer cuenta en Tarragona con un parque industrial que incluye una planta de MDI, dedicada a la producción de isocianats (un producto previo por la fabricación de poliuretano) y, por otro lado, la Casa de Sistemas, la red mundial que aglutina los sistemas de poliuretanos de Covestro. También añadió la producción de ABS, un material empleado, por ejemplo, en las piezas de Lego y que después aconteció una empresa con entidad propia, Lanxess. En este parque también comparte instalaciones con la empresa logística suiza Bertschi y una planta del Grupo Kemira.
Del 2001 al 2010 Bayer prepara la celebración del centenario de la compañía que se tenía que celebrar el 2013. En este periodo reorganiza su estructura en tres pilares: Pharma, MaterialScience y Crops. Desde el 1 de septiembre del año 2015 la rama de materiales pasa a ser Covestro y se independiza de la matriz. Andrea Firenze llegó a Tarragona en 2008 como cabeza de la planta de MDI y el 2016 pasó a la gerencia general de España.
Justo en diciembre del 2015, la compañía anunció que cerraría la planta de MDI de Tarragona a finales del 2017, y más tarde se anunció que esta sustancia se produciría en Alemania. De este modo, en Tarragona se situaría un centro logístico especializado en ácido clorhídrico. La decisión de cerrar la planta de Tarragona vendía dada por la regulación de la Unión Europea que prohibía la producción de cloro con tecnología de mercurio. Esta situación dejaba en jaque la planta tarraconense y su relación con el principal proveedor de cloro, Ercros. Sin embargo, el crecimiento de la demanda y la apuesta por una nueva tecnología hicieron revertir la situación. A principios del 2017 la compañía anuncia que evita el cierre. En octubre estrenan un centro logístico y a finales de aquel mismo año anuncia una inversión de 200 millones de euros para multiplicar la capacidad de producción.
La planta de MDI tiene una capacidad de producción de 170.000 toneladas y con el proyecto de ampliación llegará hasta 220.000 toneladas de cara en 2022. La planta de cloro, que arrancará el 2020 y donde seinvierten unos 200 millones de euros, tendrá la capacidad necesaria para alcanzar la planta de MDI en su fase final. Así mismo, la planta de Barcelona tiene una capacidad de 30.000 toneladas
Actualmente, la planta de Tarragona concentra la mayor parte de la producción y emplea 210 personas. En Barcelonahacen trabajo 150 personas, entre plataforma administrativa, finanzas, compras, y departamento jurídico. El negocio de España representa, por pes, el tercer lugar en Europa por detrás de Alemania y Bélgica y a escala global es la quinta, aproximadamente. En la planta de Barcelona se exporta entre el 75% y el 80% y Tarragona exporta por encima del 90% de su producción.
La planta de Barcelona es de una medida reduida, comparada con otras que la multinacional tiene en Alemania o la China. Por eso competía con desventaja en los productos commodity. La especialización ha sido la vía para encontrar la competitividad de esta fábrica: "Productos que en Alemania necesitaban mucha capacidad, atención, que son complicados, se han traído a Barcelona. A la vez son productos que tienen margen, porque son pequeños pero tienen mucho valor y liberamos las plantas gordas para que tengan más capacidad", añade Firenze.
Poliuretano y policarbonato, materiales de éxito
Los productos de Covestro incluyen materias primeras para espumas de poliuretano de alta calidad que, en forma de espumas flexibles, se utilizan principalmente en mobiliario, colchones y asientos de automóviles, mientras que, en forma de espumas rígidas, sirven para aislar edificios y equipos de refrigeración. Este material representa el 50% de su facturación. La empresa también produce policarbonato plástico de alto rendimiento, un material muy versátil que se utiliza en componentes de automoción, estructuras de techo o dispositivos médicos, entre otras aplicaciones. La cartera de productos la completan los productos químicos especializados, incluyendo materias primeras por recubrimientos, pegatinas y películas.
Covestro trabaja casi con desarrollos ad hoc para cada cliente: "Si una industria quiere una espuma específica para hacer el asiento de un nuevo vehículo comprará material que casi hagamos a medida". Esto en cuanto al poliuretano, que se usa para producir espumas.
De la banda del policarbonato, Covestro proporciona "pèl·lets" que pueden ser transparentes o de color y que se usan en multitud de aplicaciones, como por ejemplo los faros de los coches, entre otros piezas. "En un futuro hará falta mucho poliuretano y policarbonato por el auge del coche eléctrico, porque necesita materiales ligeros con las mismas calidades que el metal", afirma.
El poliuretano baja el peso y da flexibilidad por la protección del conductor, el policarbonato es ligero y tiene buena apariencia -color, brillantez-, es llevar y ofrece posibilidades de trabajar en nivel de diseño, mejor que no el metal.
El policarbonato vuelve a estar de moda y puede representar un cuarto de la facturación de Covestro. Pero hace unos años esta industria preparaba su necrológica. El material se usaba sobre todo para la fabricación de CD y DVD. Con la digitalización y el declive de la música en álbum, este material se auguraba la muerte.
Hace unos años esta industria preparaba su necrológica. Su material se usaba sobre todo para la fabricación de CD y DVD
La tercera pata del negocio de covestro es Coatings and Adhesivas, que se hacen a la planta de Barcelona. Pinturas, barnices, materiales para pintar o cubrir textiles con impermeabilitat, básicamente. Cómo son materiales que están en contacto en producto final con los humanos, la cura del medio ambiente es "capital", según Firenze.
Planes de futuro de la empresa? Los tres productos que son el palo de pajar de la facturación de Covestro han sido inventados a por la misma empresa. Por eso desde la dirección de la compañía se preocupan para ver cuál será el próximo producto que lanzarán al mercado "que tenga la misma contribución a la sociedad que los que hacemos hoy". Y todo esto siempre intentando tener en cuenta la sostenibilidad.
"Actualmente trabajamos en un proceso que sustituye un material derivado del petróleo por CO2: estamos haciendo colchones en base del humo de la fábrica, es un éxito que tenemos el orgullo de explicar, pero hay que encontrar mercado", concluye Firenze.