El grupo Damm consiguió una facturación de 2.061 millones de euros en el año 2023, un 10% más que en el ejercicio anterior, a pesar del incremento de costes de la energía, los materiales y las materias primas que marcó el ejercicio. La compañía alcanza así, dos años antes de lo previsto, el objetivo de facturación fijado en el plan estratégico 2022-2025. El crecimiento ha sido impulsado por la "sólida demanda" de los productos y el control de costes, que han permitido obtener un beneficio neto de 130 millones, un 28,2% más que en el ejercicio anterior. El resultado bruto de explotación (ebitda) fue de 300 millones, un 24,6% más.
Los resultados han sido anunciados en la Junta General de Accionistas de la compañía, que se ha celebrado este lunes en la Antigua Fábrica Estrella Damm y en la que se han aprobado los resultados y el reparto de dividendos del año pasado.
El crecimiento ha sido impulsado por la "sólida demanda" de los productos y el control de costes, que han permitido obtener un beneficio neto de 130 millones
El presidente ejecutivo de Damm, Demetrio Carceller Arce, ha resaltado la solidez actual del grupo como punto de partida para continuar creciendo. "La fortaleza de la demanda interna de nuestros productos, las perspectivas positivas del turismo y el desarrollo internacional de nuestra distribución nos hacen confiar en que 2024 será también un año de crecimiento para Damm", ha destacado.
La compañía consolidó durante el último ejercicio los niveles de ventas de sus negocios de bebidas -cerveza, agua, refrescos y lácteos- y cerró el año con un volumen comercializado de 20,8 millones de hectolitros. Este avance positivo de sus operaciones ha permitido a la compañía incrementar su plantilla hasta las 5.765 personas.
Por otra parte, durante el acto se ha aprobado la nueva composición del consejo de administración que, con la salida de Raimundo Baroja y Ramón Armadás, ha pasado de 7 a 5 miembros.