Desigual ha propuesto a los trabajadores una jornada laboral de lunes a jueves, con la opción de teletrabajar uno de estos días. El nuevo formato implicará también una reducción salarial asociada al ajuste de horas. La compañía propone que esta reducción sea compartida y, por lo tanto, la empresa asuma un 50% de la diferencia. De este modo, el empleado percibiría una reducción del sueldo del 6,5%.
La implementación de esta jornada estará sometida a la votación de los empleados y tendrá que contar, como mínimo, con un 66% de los votos a favor. En total, 502 personas se podrían ver afectadas con una reducción de su jornada laboral en cinco horas, de las 39,5 horas actuales a 34,5 horas semanales. La empresa ha abierto un proceso de información y análisis para que los empleados puedan resolver todas las dudas antes de la votación, prevista para el próximo 7 de octubre. Durante estas semanas, los empleados podrán participar en una prueba piloto.
La empresa asegura que el objetivo de esta iniciativa es incrementar la "satisfacción" de los trabajadores, así como el bienestar y la salud. El fundador de la compañía, Thomas Meyer, anunció la propuesta en una presentación organizada este miércoles en las oficinas centrales de la compañía.
La iniciativa forma parte de un plan más amplio para ofrecer nuevos modelo de trabajo y conciliación y que también pasa por implementar mejoras en el resto de colectivos que no puedan acogerse a esta jornada por las especificidades de sus puestos de trabajo. La estrategia pasa también por fortalecer el servicio en tiendas y centros logísticos.