Inspección de Trabajo ha avisado a Ryanair que la decisión de despedir todos los trabajadores que no aceptaron el cambio de contrato por uno fijo discontinuo "podría resultar contraria al ordenamiento jurídico". Así lo afirma un informe emitido por este organismo del Ministerio de Trabajo en que también acusa la aerolínea irlandesa de haber "reservado información" en las negociaciones sobre el cierre de la base, puesto que el cambio de contrato no se tendría que haber presentado "como una mera hipótesis" en los representantes de los trabajadores. Según el documento Ryanair no "habría adoptado una decisión clara" sobre transformar los contratos fijas a fijas discontinuos como una medida condicionando al cierre de la base gerundense.
El documento considera que la empresa no "habría adoptado una decisión clara, terminante e inequívoca" durante las negociaciones y habría planteado esta alternativa como "una mera hipótesis". De hecho, el informe culpa la empresa de haberse "dedicado a explorar" este cambio contractual, cosa que lo ve "legítimo" pero el hecho de no haberlo puesto sobre la mesa hasta la fecha tope del cierre "no es suficiente para poder ser considerado amparado en la legalidad".
Por otro lado, el organismo dependiente del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social avisa la empresa que ha "tenido conocimiento" de algunas "vulneraciones" en los cambios de contratos y por eso advierte la aerolínea que cumpla la normativa legal sobre conversiones contractuales.