"Ser empresaria es complicado. Te tienes que encargar de todo y como no facturas suficiente no puedes contratar otra persona, pero eres tu propia ninguno, eso sí. Ahora, pero, creo que se me complicará más y habrá cosas a las cuales no podré llegar". Habla Míriam Talavera, trabajadora, emprendedora y madre, un trinomio de roles que limitan su tiempo y hacen aumentar, día detrás día, su esfuerzo. Propietaria de una pequeña tienda de scrapbook –abierta hace un año y medio en Santa Coloma de Gramenet- y madre desde hace sólo un mes, Míriam es una de las 165.600 emprendedoras que hay en Cataluña y que representan el 11,5% de las mujeres ocupadas.
"Es el que siempre había querido hacer". Míriam se enroló en la emprendeduría por ilusión y convicción, "le estaba dando vueltas desde hacía tiempos. Siempre he sido diseñadora freelance pero ahora había llegado el momento de tener mi negocio", apunta. De este periodo la emprendedora hace balance y destaca las facilidades que se encuentra para gestionar su propio tiempo, a pesar de que este es cada vez más limitado. "Ahora con el niño se complica más. Cuando él se duerme, tienes que continuar trabajando, mirar facturas, gestionar las redes sociales...", reconoce.
A pesar de que siempre ha trabajado suela, la baja por maternidad la ha obligado a contratar a una persona a tiempo completo por los próximos dos meses. "Si pudiera permitírmelo estaría los cuatro meses enteros, pero hay que adaptarse". Y es que entre los dos perfiles de mujeres emprendedoras, empleadoras y autónomas, es el último donde se integran la mayoría de empresarias catalanas. Según el interesante estudio elaborado por Adecco IX Perfil Adecco sobre la Mujer Trabajadora, son 123.900 mujeres, un 8,6% de toda la ocupación femenina catalán.
Por su parte, las mujeres con empleados a cargo suman 41.600, sólo un 2,9%. Con todo, el de emprendedora es un perfil menor entre las mujeres catalanas, puesto que la gran mayoría son asalariadas de empresas privadas: vendedoras, trabajadoras de la cura personal, de los servicios de protección... También son maestros, oficinistas, administrativas, técnicas... De hecho, Anna Mercadé, directora del Observatorio Emprendida, Mujer y Economía, asegura que algunas compañías como HP y Schelinger encuentran dificultades para encontrar mujeres ingenieras. "Están súper preocupadas porque quieren contratar mujeres ingenieras y no hay. La feminización es un gran problema: en la Universidad hemos llegado tarde, por eso tenemos que orientar a las niñas a partir de los 10 años, de muy jovencitas, porque si no todas queremos ser Barbies", argumenta.
Y es que la gran mayoría pertenecen al sector servicios y este pasado domingo, celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, nos invita a poner negro sobre blanco las cifras del mercado laboral en femenino. Son (somos) la mitad de la población activa, pero aun así todavía se necesita una efeméride para recordar que la mujer también es trabajadora.
Escasas directivas al mercado laboral catalán
En Cataluña, hay 1.438.008 mujeres trabajadoras en activo del total de 3.804.600 trabajadores, según la última Encuesta de Población Activa (en lo referente al cuarto trimestre de 2014). Pero también hay otras mujeres trabajadoras que buscan una oportunidad: las cifras de paro del pasado febrero han dejado 581.124 parados en Cataluña. Y de esta cifra, 298.551 son mujeres, el 51,4%.
En el Y Woman in Business Congress, celebrado hace unos días en el marco del 4 Years From Now (4YFN), la ejecutiva Pilar Velàzquez apuntaba que las grandes compañías están incorporando el talento femenino porque, con él, "se asumen las emociones". Con todo, y según el estudio de Adecco, sólo el 3,5% de las mujeres catalanas ocupadas son directivas y gerentes. Y todo que es un porcentaje pequeño, en comparación con el resto de categorías profesionales donde las mujeres trabajan, en España la cifra es todavía más pequeña: sólo el 3,0% están en el alta dirección.
En opinión de Isabel Aguilera, ex directiva de multinacionales tecnológicas, nuestra economía pierde, matemáticamente, el 50% del talento para no dejar que el talento femenino llegue al alta dirección. "Por un tema genético, las mujeres vivimos más, por lo cual si las mujeres no dan todo el que pueden dar; cada vez habrá menos hombres, que a su vez tendrán que trabajar más, para más mujeres que viven más años, en un Estado del Bienestar más caro. La ecuación no sale! Es decir, o las mujeres nos incorporamos de pleno al mercado laboral o el Estado del Bienestar es insostenible".
La maternidad es, según Mercadé, una traba añadida a que se aumente la cuota femenina en el alta dirección. "Al mercado laboral hay la segregación horizontal, y también la vertical, donde a medida que subes hay un techo de vidrio que está construido de prejuicios y de estereotipos que hace que las chicas tengan muy vetada la carrera profesional. Cómo está la idea que las mujeres tendrán hijos y faltarán más a menudo al trabajo –cosa que es mentira porque las mujeres tienen cada vez menos hijos- pues, se los dificultan y hay muchos obstáculos para llegar", asegura en declaraciones a VIAempresa .
Arquette, un grito por la desigualdad salarial
"Es el momento que tengamos igualdad en el salario e igualdad en los derechos de la mujer en los Estados Unidos", dijo la actriz Patricia Arquette hace unas semanas en la celebèrrima gala de los Òscars de Hollywood. La reclamación unánime de los colectivos de mujeres (no sólo de los EE.UU., sino de todo el mundo) ha cogido protagonismo gracias al discurso sentido de la intérprete norteamericana y el vídeo, que ya es viral, es la pértiga que utilizaban Pilar Riaño y Cristina Mailan, de Modaes , para hablar de desigualdades salariales durante el Y Women in Business Congress. "La realidad es que las mujeres ganan de media entre un 10 y un 30% menos que los hombres", destacaban entre fotografías de líderes políticos como Angela Merkel, Christine Lagarde o la COO de Facebook, Sheryl Sandberg.
Pero, por qué? Aguilera considera que la desigualdad salarial es fruto de la desigualdad que muestra el mercado laboral. "Las mujeres, estadísticamente, cobramos entre el 16 y el 17% menos que los hombres, y además si la mujer entra al mercado laboral, afloran una serie de costes del hogar que antes no existían porque los asumía la mujer".
Por su parte, Nuria Chinchilla, profesora de la IESE y experta en organización de personas, va más allá y apunta que esta situación se produce, por un lado, "porque la mujer es menos combativa que el hombre a la hora negociar para sí misma". Por otro, "porque existe un sesgo inconsciente en la baja por parte de los hombres a la hora de valorar y negociar el salario de una mujer", matiza. En sus palabras, "las excedencias, bajas por maternidad, o tiempos parciales van tirando moza en las subidas de sueldo o en el cobro del variable y otros complementos que componen el salario total de las mujeres".
"Es el que siempre había querido hacer". Míriam se enroló en la emprendeduría por ilusión y convicción, "le estaba dando vueltas desde hacía tiempos. Siempre he sido diseñadora freelance pero ahora había llegado el momento de tener mi negocio", apunta. De este periodo la emprendedora hace balance y destaca las facilidades que se encuentra para gestionar su propio tiempo, a pesar de que este es cada vez más limitado. "Ahora con el niño se complica más. Cuando él se duerme, tienes que continuar trabajando, mirar facturas, gestionar las redes sociales...", reconoce.
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| Míriam Talavera, a la derecha de la imagen, en su tienda |
A pesar de que siempre ha trabajado suela, la baja por maternidad la ha obligado a contratar a una persona a tiempo completo por los próximos dos meses. "Si pudiera permitírmelo estaría los cuatro meses enteros, pero hay que adaptarse". Y es que entre los dos perfiles de mujeres emprendedoras, empleadoras y autónomas, es el último donde se integran la mayoría de empresarias catalanas. Según el interesante estudio elaborado por Adecco IX Perfil Adecco sobre la Mujer Trabajadora, son 123.900 mujeres, un 8,6% de toda la ocupación femenina catalán.
Por su parte, las mujeres con empleados a cargo suman 41.600, sólo un 2,9%. Con todo, el de emprendedora es un perfil menor entre las mujeres catalanas, puesto que la gran mayoría son asalariadas de empresas privadas: vendedoras, trabajadoras de la cura personal, de los servicios de protección... También son maestros, oficinistas, administrativas, técnicas... De hecho, Anna Mercadé, directora del Observatorio Emprendida, Mujer y Economía, asegura que algunas compañías como HP y Schelinger encuentran dificultades para encontrar mujeres ingenieras. "Están súper preocupadas porque quieren contratar mujeres ingenieras y no hay. La feminización es un gran problema: en la Universidad hemos llegado tarde, por eso tenemos que orientar a las niñas a partir de los 10 años, de muy jovencitas, porque si no todas queremos ser Barbies", argumenta.
Y es que la gran mayoría pertenecen al sector servicios y este pasado domingo, celebración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, nos invita a poner negro sobre blanco las cifras del mercado laboral en femenino. Son (somos) la mitad de la población activa, pero aun así todavía se necesita una efeméride para recordar que la mujer también es trabajadora.
Escasas directivas al mercado laboral catalán
En Cataluña, hay 1.438.008 mujeres trabajadoras en activo del total de 3.804.600 trabajadores, según la última Encuesta de Población Activa (en lo referente al cuarto trimestre de 2014). Pero también hay otras mujeres trabajadoras que buscan una oportunidad: las cifras de paro del pasado febrero han dejado 581.124 parados en Cataluña. Y de esta cifra, 298.551 son mujeres, el 51,4%.
En el Y Woman in Business Congress, celebrado hace unos días en el marco del 4 Years From Now (4YFN), la ejecutiva Pilar Velàzquez apuntaba que las grandes compañías están incorporando el talento femenino porque, con él, "se asumen las emociones". Con todo, y según el estudio de Adecco, sólo el 3,5% de las mujeres catalanas ocupadas son directivas y gerentes. Y todo que es un porcentaje pequeño, en comparación con el resto de categorías profesionales donde las mujeres trabajan, en España la cifra es todavía más pequeña: sólo el 3,0% están en el alta dirección.
En opinión de Isabel Aguilera, ex directiva de multinacionales tecnológicas, nuestra economía pierde, matemáticamente, el 50% del talento para no dejar que el talento femenino llegue al alta dirección. "Por un tema genético, las mujeres vivimos más, por lo cual si las mujeres no dan todo el que pueden dar; cada vez habrá menos hombres, que a su vez tendrán que trabajar más, para más mujeres que viven más años, en un Estado del Bienestar más caro. La ecuación no sale! Es decir, o las mujeres nos incorporamos de pleno al mercado laboral o el Estado del Bienestar es insostenible".
La maternidad es, según Mercadé, una traba añadida a que se aumente la cuota femenina en el alta dirección. "Al mercado laboral hay la segregación horizontal, y también la vertical, donde a medida que subes hay un techo de vidrio que está construido de prejuicios y de estereotipos que hace que las chicas tengan muy vetada la carrera profesional. Cómo está la idea que las mujeres tendrán hijos y faltarán más a menudo al trabajo –cosa que es mentira porque las mujeres tienen cada vez menos hijos- pues, se los dificultan y hay muchos obstáculos para llegar", asegura en declaraciones a VIAempresa .
Arquette, un grito por la desigualdad salarial
"Es el momento que tengamos igualdad en el salario e igualdad en los derechos de la mujer en los Estados Unidos", dijo la actriz Patricia Arquette hace unas semanas en la celebèrrima gala de los Òscars de Hollywood. La reclamación unánime de los colectivos de mujeres (no sólo de los EE.UU., sino de todo el mundo) ha cogido protagonismo gracias al discurso sentido de la intérprete norteamericana y el vídeo, que ya es viral, es la pértiga que utilizaban Pilar Riaño y Cristina Mailan, de Modaes , para hablar de desigualdades salariales durante el Y Women in Business Congress. "La realidad es que las mujeres ganan de media entre un 10 y un 30% menos que los hombres", destacaban entre fotografías de líderes políticos como Angela Merkel, Christine Lagarde o la COO de Facebook, Sheryl Sandberg.
Pero, por qué? Aguilera considera que la desigualdad salarial es fruto de la desigualdad que muestra el mercado laboral. "Las mujeres, estadísticamente, cobramos entre el 16 y el 17% menos que los hombres, y además si la mujer entra al mercado laboral, afloran una serie de costes del hogar que antes no existían porque los asumía la mujer".
Por su parte, Nuria Chinchilla, profesora de la IESE y experta en organización de personas, va más allá y apunta que esta situación se produce, por un lado, "porque la mujer es menos combativa que el hombre a la hora negociar para sí misma". Por otro, "porque existe un sesgo inconsciente en la baja por parte de los hombres a la hora de valorar y negociar el salario de una mujer", matiza. En sus palabras, "las excedencias, bajas por maternidad, o tiempos parciales van tirando moza en las subidas de sueldo o en el cobro del variable y otros complementos que componen el salario total de las mujeres".
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