¿Estamos ante el fin de las cajas de autopago? Sin lugar a dudas, la tecnología ha transformado el mundo y, en particular, ha revolucionado el sector de los supermercados. Los sistemas de autopago están expandiéndose cada vez más y son cada vez más populares entre los consumidores. Muchos clientes ya han integrado en su rutina el proceso de escanear y pagar sus productos ellos mismos en la caja. Es evidente que estos sistemas han llegado para quedarse. Las empresas han optado por implementar las cajas de autopago con la promesa de reducir las colas y proporcionar mayor rapidez a sus clientes. Sin embargo, también conllevan riesgos tanto para los comercios como para los consumidores.
Recientemente, un vídeo viral en TikTok de una abogada estadounidense ha destacado el peligro de las acusaciones de robo debido a errores en las máquinas de autopago. Según uno de los pocos estudios disponibles sobre el impacto de estos sistemas, realizado por la consultora ECR Retail Loss, las empresas que utilizan este método experimentan un aumento del 75% en pérdidas en comparación con las cajas tradicionales. El estudio analizó 140 millones de transacciones en cajas de autoservicio y detectó 486.000 artículos que no fueron escaneados correctamente.
Se trata del software de inteligencia artificial (IA) diseñado para mejorar el balance de resultados de las tiendas
Ante este escenario recurrente, y a veces desconcertante, surge Eassefy con el apoyo de Barcelona Activa para minimizar y prevenir la pérdida relacionada en las transacciones de las cajas de supermercado. Se trata del software de inteligencia artificial (IA) diseñado para mejorar el balance de resultados de las tiendas. "Nosotros lo que hacemos es identificar una parte de esa pérdida desconocida que se produce en las líneas de caja, especialmente las que se conocen como autopago o selfcheckout en inglés. A través de unas cámaras y utilizando la inteligencia artificial, identificamos incidencias que dan lugar a estas diferencias de inventario", señala Andreu Crous, cofundador y CEO de Eassefy, en VIA Empresa.
La IA, la aliada de las cajas de autopago
Para lograrlo, el equipo con sede en Barcelona tiene como objetivo no solo mejorar la rentabilidad de las tiendas, sino también aumentar la experiencia del usuario. Uno de los problemas destacados es que, al pasar muchos productos, a veces no se reconoce el peso, lo que obliga a avisar al personal de la tienda. Este personal, que tiene otras responsabilidades, a veces tarda en llegar, afectando negativamente la experiencia del usuario. Por eso, están decididos a abordar este problema. "El proyecto se inició hace dos años, cuando conocí a mis actuales socios, especializados en aplicaciones de inteligencia artificial", explica Andreu Crous, CEO del proyecto. Crous señala que se inspiraron en los Estados Unidos, donde el sector de los supermercados siempre ha sido un modelo a seguir para futuros desarrollos en Europa. Como ejemplo, menciona que "el gigante Walmart ha implementado sistemas de autopago con inteligencia artificial en todos sus establecimientos". "Pero nuestro objetivo es convertirnos en el referente en España y Europa", añade.
El emprendedor de Eassefy se lanzó a investigar cómo detectar de forma automática las incidencias. Su misión era clara: la identificación automática de incidencias mediante inteligencia artificial instalada en cada tienda. Esto les permitía ahorrar los altos costes que un sistema "no automático" incurriría al identificar y clasificar de manera continua todas las incidencias en todas las cajas. Esta nueva iniciativa presenta un enfoque de supermercado inteligente que revoluciona la forma en que las tiendas de alimentación gestionan y analizan sus pérdidas relacionadas en las transacciones de las cajas de autopago. "La inteligencia artificial, en particular el deep learning, es fundamental para nuestro trabajo en Eassefy. Sin el deep learning, no podríamos alcanzar nuestros objetivos de manera eficiente en términos de costes y alcance. Es gracias a esta tecnología avanzada que podemos lograr este objetivo de manera eficiente", señala Crous.
Crecimiento ambicioso y pruebas piloto prometedoras
"Anticipamos un fenómeno similar al experimentado en Estados Unidos, donde el número de cajas de autoservicio está en aumento. La razón principal es la escasez de mano de obra dispuesta a trabajar en los supermercados. Este sector requiere mucho sacrificio, con turnos que a menudo incluyen fines de semana y días festivos, lo que limita la disponibilidad de talento. Por lo tanto, los supermercados se ven obligados a aumentar el número de cajas de autoservicio, como ya ha sucedido en Estados Unidos", explica Crous. En este punto, el CEO confiesa que el producto aún no ha salido al mercado porque continúan realizando pruebas piloto en una cadena de supermercados catalana. La empresa, que por ahora no ha querido revelar el nombre de la cadena, se marca el objetivo de realizar crecimientos importantes hasta el año 2028. "Por ejemplo, esperamos llegar al año 2026 con 1.000 licencias y en el año 2027 duplicar ese número", asegura.
Con una tecnología disruptiva como la de Eassefy, Andreu prevé que el equipo crezca hasta 16 personas para el año 2026 y que cierren una ronda de inversión de 350.000 euros. Esto permitirá a la empresa abordar el problema de las pérdidas relacionadas con las transacciones en las cajas del supermercado. "Nuestro objetivo es finalizar las pruebas piloto a finales de este año o principios del 2025", explica el CEO, quien espera lanzar el producto al mercado en 2025.