El dolor menstrual es cómo el dolor de cabeza, detrás pueden haber mil factores, desde una dolencia grave a problemas de alimentación o un día de estrés, dado que es multifactorial. La cuestión cultural es que hemos normalizado un dolor que no tendríamos que haber estandarizado. Cuando tienes dolor de cabeza muy a menudo buscas respuestas y soluciones, y esto es lo que no hacemos con el dolor menstrual. Estas son las principales conclusiones de Anna Salvia, psicóloga que ha publicado el libro Una nueva manera de menstruar (Bruguera), en que desmonta los tabúes sobre la regla y apuesta por una nueva cultura menstrual. Y de aquí la gran pregunta: ¿Tenemos en Catalunya un entorno laboral menstru-friendly?
Por ejemplo, hace unos meses publicamos em VIA Empresa que el Ajuntament de Girona consiguió un hito histórico y pionero en todo el Estado: un permiso menstrual de ocho horas al mes. Es una medida que pretende acabar con los tabúes y estigmas relacionados con la menstruación. "La regla no tiene que ser dolorosa, pero puede causar puntualmente molestias y es en referencia a estas molestias en lo que se centra este permiso, que nos puede llevar a necesitar unas horas en momentos concretos", aseguraban desde el consistorio del Ajuntament de Girona.
El autoconocimiento de las mujeres
El permiso menstrual ha abierto el debate a las empresas catalanas, cómo también lo ha hecho al resto del mundo. ¿Se tendría que aplicar y normalizar este permiso menstrual? ¿Es un tabú la menstruación en nuestro país? En primer lugar, hay que destacar que la mitad de la población del mundo tiene la menstruación cada mes durante aproximadamente 40 años de vida. Y, entre un 45% y un 95% de las mujeres que tienen la menstruación experimentan dolor, según varios estudios. Por ejemplo, Paloma Alma, autora de Cyclo (Montena), remarca que es muy importante "construir una relación de confianza entre empresa y trabajadoras, cómo por ejemplo "poder coger un día o dos sin dar muchas explicaciones, poder bajar el ritmo o marchar antes a casa". Y sobre todo el auge del teletrabajo durante la pandemia y con la "nueva normalidad", como gran solución.
Cuando tienes dolor de cabeza muy a menudo buscas respuestas y soluciones, y esto es lo que no hacemos con el dolor menstrual
El ciclo menstrual acostumbra a durar 28 días, a pesar de que según cada cuerpo y características, puede variar de los 21 a los 45 días. Las fases de la regla son las siguientes: el sangrado menstrual que puede durar entre dos y siete días. Después viene la preovulación, la ovulación y la postovulación, que finaliza con un nuevo ciclo menstrual. Y todas tienen unas características que las hacen únicas.
Por ejemplo, durante la semana que dura la menstruación la energía de las mujeres, a grandes rasgos, es más introspectiva y aconsejan "bajar el ritmo, ir a dormir más temprano o despertarse diez minutos antes para gestionar el día". En cambio, durante la semana preovulatoria, la energía aumenta de forma considerable y muy posiblemente "muchas mujeres se han sentido con ganas de iniciar más proyectos, defenderlos a fondo, más optimistas y con muchas ganas de socialización, de hacer equipo", continúa Alma.
Es muy importante poder construir una relación de confianza entre empresa y trabajadoras para abordar un entorno laboral menstru-friendly en Catalunya
En cuanto a la semana ovulatoria se caracteriza por la empatía y el uso de los soft skills, ideal para conectar con los compañeros, conseguir todo lo que nos proponemos o incluso, quien sabe, "discutir un aumento de sueldo más que merecido".
Finalmente, es importante contar con una auténtica educación menstrual desde muy pequeñas y poderlo vivir con más positividad y autoconocimiento. Un paso interesante puede ser el hecho de concienciarnos del ciclo completo y todas las ventajas que nos puede aportar, ya sea en la vida personal y en la profesional. Por una mejor salud laboral, porque deje de ser tabú en el trabajo y porque las empresas catalanas se impliquen de verdad. Para poder contar con un verdadero entorno laboral menstru-friendly en Catalunya. Y un buen paso: Girona.