"¿Pero cómo quieres que nos vayamos? Si tuviéramos que irnos, nos iríamos a los Estados Unidos, donde tenemos el 70% del negocio". Los presidentes y coconsejeros delegados de Grifols, Víctor Grífols, Raimon Grífols y Víctor Grífols Deu, han sido muy claros en una de entrevista concedida a raíz de la celebración de los 10 años del diario Ara, donde han querido dejar bien claro que "los que se han ido a Madrid lo han hecho porque allí no hay impuesto de patrimonio, y esto era una excusa", al mismo tiempo que se han reafirmado añadiendo que "si tuviéramos que irnos, sería por un tema de negocio, no político". Todo ello, después de la famosa filtración de Wikileaks que dio la vuelta al mundo.
Grifols tiene el 70% de su negocio en los Estados Unidos porque a los americanos los interesaba la inmunoglobulina, que ahora hace 10 años sólo se producía a la planta de la farmacéutica en Catalunya y en nueve instalaciones más de todo el mundo. En este sentido, Víctor Grífols hijo admite en el diario citado que "lo que me sorprendió más fue que en los EE.UU., a 6.000 kilómetros de distancia, hubieran identificado una cosa en un municipio llamado Parets del Vallès, mientras que en Catalunya y en España todavía no saben donde estamos".
De hecho, esta es la apuesta de la compañía contra la covid-19, la de la immuglobina, que es una proteína del plasma de la sangre que actúa como regeneradora del sistema inmunitario. De este modo, Grifols puso en marcha la inmunoglobulina hiperimmune anti-SARS-CoV-2 y participa en más de 25 proyectos de investigación de todo el mundo. Este octubre, la multinacional empezó un ensayo clínico con 500 pacientes de 18 países de todo el planeta. Y es que, a pesar de que con el ébola se volvieron a poner las pilas con la immuglobina, hoy, más que nunca, esta proteína del plasma, aseguran, "se ha puesto de moda".
"El plasma de la gente que se ha curado tiene anticuerpos contra la covid y nuestro medicamento también los tiene"
Y no sólo esto. Según señalan, "el plasma de la gente que se ha curado tiene anticuerpos contra la covid y nuestro medicamento también lo tiene", pero el problema es que "Europa es deficitaria en plasma; el 40% del que necesita lo importa". En este sentido, el presidente de la compañía recuerda que "llevo 40 años diciéndolo a los gobiernos, y mi padre antes de que yo, ¡pobre!", pero poco caso les han hecho.
Sea como sea, los Grífols avisan que "2021 será muy duro, puede haber países y pacientes que no tengan producto" y se cuestionan: "¿Qué pasará de aquí a cinco meses si les falta producto en los Estados Unidos? ¿Qué dirán los americanos? American plasma for American people. ¿Y quién se quedará sin? Los países que no se espabilen", sentencia el presidente de la compañía.