Isaac Hernández es el responsable de Google Cloud en España y Portugal. Invitado por Cornellà Creació, viaja de Madrid a Barcelona para hablar sobre la gestión del talento y la transformación digital, así como para contar cómo se vive todo esto dentro de una empresa que ya nació siendo tecnológica. Después de trabajar durante 20 años para Microsoft, que le permitió "entender bien el software" y cinco más en Vodafone, que le dio la posibilidad de "ver la explosión del móvil y entender las comunicaciones", Hernández ya lleva seis años a la cabeza de la nube del Dios tecnológico, una "combinación" de las dos cosas que ya había hecho. Confiesa que "a lo largo de mi carrera cada vez más me he ido dando cuenta de que las personas son lo importante". Sin embargo, a pesar de trabajar en la mejor empresa del mundo según Forbes, asegura que hoy en día no hay nada seguro y, por eso, Google "mira el futuro no desde una posición de confort, sino de inquietud y de cierta excitación de lo que el futuro depara".
Google ha firmado un acuerdo con Ascension para recoger y analizar datos personales de la salud de sus pacientes. ¿Qué representa esto para la compañía?
Quizás se ha malinterpretado, pero es un acuerdo en línea con muchas de las cosas que se están haciendo con Inteligencia Artificial (IA).
¿Como por ejemplo?
En IA, lo que necesitas son datos para poder entrenar a las máquinas y en el área de salud hay un montón de oportunidades que nos pueden ayudar a hacer las cosas de forma distinta y de mejor manera porque las máquinas no tienen prejuicios y son capaces de ver cosas que quizá los humanos no vemos.
"Las máquinas no tienen prejuicios y son capaces de ver cosas que quizá los humanos no vemos"
Son más objetivas.
Lo que vamos a tratar de aplicar juntamente con Ascension son algoritmos de IA para, teniendo elementos de esas personas, poder predecir mejor posibles enfermedades o entender mejor causas-raíz de determinados tipos de problemas.
¿Podremos ver en un futuro como esto pone remedio a enfermedades que hoy no tienen cura?
Seguro. Hace unos años, un motor de IA de Google que habíamos entrenado con datos, era capaz de detectar una enfermedad que se denomina retinopatía diabética. Tienes la foto de una retina y la máquina es capaz de identificar si está enferma o no. Enriquecimos con más datos la retina y nos dimos cuenta de que mirándola éramos capaces de identificar el sexo de la persona, su edad y, lo más importante, la propensión a determinado tipo de enfermedades cardiovasculares. Eso no hubiese ocurrido con modelos tradicionales de tratamiento médico porque en general la retina la suele mirar un experto en el ojo, no del corazón.
¿Cómo podemos explicar eso a la gente para que no piensen que viven en Black Mirror?
Google es una compañía que desde un punto de estándares éticos está al máximo nivel. La información que se usa se hace únicamente con la información que hay en los contratos y los acuerdos con las empresas y siempre en el máximo cumplimiento de la ley.
¿Y el objetivo final son las personas?
Tanto para Google como para todos, hay que encontrar un balance interesante entre los servicios y productos que las compañías son capaces de ofrecerte. Cuanta más información tengamos, mejores servicios podremos dar, pero siempre dejando muy claro cuál es el uso que se va a hacer de la información y dándote a ti la oportunidad de que en un momento determinado tu digas "pues ya no quiero compartir más esta información".
Hablando de personas, ¿cómo se gestiona el factor humano a través de la tecnología?
Nosotros tenemos una imagen de empresa tecnológica e innovadora y lo más relevante para mí es cómo detrás de todo esto lo que hay es un foco absoluto en la persona y en el talento. En la forma en cómo lo reclutas, lo haces y lo desarrollas y das transparencia y confianza organizativa. La tecnología es el resultado de tener a las personas adecuadas.
"La tecnología es el resultado de tener a las personas adecuadas"
¿Sumar fuerzas haciendo equipo es el futuro?
Si tu creas una cultura en la que atraes al mejor talento, este entorno te proporcionará mejores ideas y mejores innovaciones. Por eso hay que fomentar la inteligencia colectiva dentro de las empresas. Y en este entorno de diversidad es donde generalmente se producen las innovaciones más interesantes.
¿Cómo lo hacéis desde Google para captar este talento que va tan buscado?
Tenemos la suerte de que somos una empresa que, una vez más, hemos conseguido el reconocimiento por Forbes de mejor empresa del mundo para trabajar. Generas un entorno en que puedes atraer talento interesante y luego el talento atrae al talento. Sigue habiendo una guerra muy interesante por el talento y Barcelona es un magnífico ejemplo, donde tenéis un ecosistema vibrante de empresas nativas digitales y de innovación, pero el talento es escaso.
Casi todo el mundo quiere trabajar en Google.
Sí, pero también en otro tipo de grandes empresas y hay que seguir subiendo el listón para que las personas quieran trabajar para ti y eso no necesariamente significa dotarte de un buen sueldo, de comida gratis y de unas buenas oficinas, significa también permitir que las peronas puedan desarrollar sus sueños dentro de esa empresa.
Y dar libertad y margen para crear.
Justo. Además, estar muy atento a lo que las personas te están pidiendo. También decidimos sobre temas importantes como que, por ejemplo, Google lleva siendo neutral desde un punto de vista de emisiones de carbono desde 2007 y somos el mayor comprador de energía verde en el mundo.
Volviendo a la cuestión del talento, ¿cómo está representado el femenino en la compañía?
En determinadas áreas, no tenemos ningún tipo de problema en cuanto a la diversidad de género, pero es verdad que en las áreas tecnológicas seguimos teniendo un pequeño gap, no solo con las mujeres, sino también con algun tipo de etnias y tenemos muchos programas trabajando en la dirección de solucionarlo. Es un problema mundial y la diversidad es fundamental. Queremos que Google sea un reflejo de la población y eso significa que deberíamos de apostar por este 50% a 50%.
"Queremos que Google sea un reflejo de la población y eso significa que deberíamos de apostar por este 50% a 50%"
¿Qué papel tenemos las personas en la transformación digital?
Lo tienen todo. Esto de la transformación digital, que no acaba sino de empezar y los próximos años van a ser mucho más interesantes, requiere que todas las empresas innoven. E innovar significa tener las tecnologías adecuadas, pero sobretodo a las personas adecuadas y ponerlas en el centro.
¿Así fidelizáis al talento?
Si tu contratas a una persona que trae ideas y tiene ganas de contribuir, lo peor que puedes hacer es incorporarla y hacer micromanagment, dictarle tú lo que tiene que hacer. Esa capacidad de que sintamos que la compañía es nuestro proyecto es fundamental.
Muchos usuarios decimos que Google es Dios, pero en el terreno laboral igual también tendríamos que aprender de vuestro modelo.
Nuestro objetivo en este aspecto es inspirar, aunque nos pasemos la vida mejorando cosas. Igual que en el mundo de la tecnología haces un open source para ofrecerlo a la comunidad, como Android, en personas hacemos lo mismo. Tenemos muchos mecanismos para compartir la forma en cómo lo hacemos y nos enriquecemos también de lo que hacen otras empresas. Es una compañía en la que no te aburres, continuamente tienes retos. Cualquier empleado de Google tiene preaprobado el poder dedicar un 20% de su tiempo al proyecto que quiera. Esto hace que tu puedas sentir que puedes hacer realidad una idea que tengas o una pasión.
En este sentido, ¿el personal puede moverse dentro de la compañía?
Eso también te permite trabajar en el departamento de al lado y eso nos ayuda a tener movimientos laterales entre distintos equipos. Y esto te permite enriquecerte. Te das cuenta de que la tecnología la fabrican las personas y que si quieres tener la mejor, tienes que tener a las mejores personas.
"Con Gmail, podría romperse Europa entera y tú no perderías nunca tu correo electrónico"
¿Nos podemos fiar de tenerlo todo en la nube?
Este era el problema de hace unos años, pero la realidad es que precisamente por eso, si quieres tener confianza en que la información está segura, siempre está disponible y no se pierde, lo mejor que puedes hacer es tenerla en la nube. No porque Google sea más listo que otros, es porque simplemente invertimos mucho más dinero en que la información esté segura y disponible. Si usas Gmail, siempre funciona porque copia la información en siete datas distintos. Podría romperse Europa entera y tú no perderías nunca tu correo electrónico.
El cloud también te da la posibilidad de trabajar en red.
Cooperar y colaborar. El hecho de que tu tengas un documento en la red, permite que cooperemos en tiempo real y que nos podamos enriquecer. Es una especie de conversación que sucede alrededor del documento.
Y más ahora que el teletrabajo está cada vez más a la orden del día.
El teletrabajo, el poder trabajar desde cualquier dispositivo... eso enriquece. En 10 años todo el mundo personal estará en la nube. Pero en las empresas es dónde quizá van un poquito más retrasados. Muchas de las innovaciones se producen en el seno del hogar y de los consumidores y de allí pasan a las empresas. Las empresas van más lentas de lo que vamos los usuarios.
¿Cómo se convive y se trabaja con la tecnología?
Tenemos un reto en general en España y en Europa de entender mejor las capacidades de la tecnología porque los usuarios de las empresas son digitales y cuando interactúan contigo te comparan con el Amazon y el Google de turno en cuanto a experiencias digitales y el listón no para de subir. Hay que seguir apostando por la tecnología para asegurarnos que la experiencia con el cliente es redonda.
¿Cómo ve Google de aquí a 10 años?
Seguro que habremos cambiado. Aunque somos una compañía de éxito con más de 100.000 empleados y es una de las grandes compañías del mundo en capitalización bursátil, puede haber un estudiante que le esté dando vueltas a algun tipo de algoritmo y que haga que nuestra tecnología quede obsoleta en un momento determinado. Hay que seguir invirtiendo, estando en innovación y siendo un poco paranoico porque nadie tiene garantizada ninguna posición. En Google queremos ser protagonistas o actores más que espectadores de esta transformación digital.