Josep González es el presidente de Pimec desde su fusión con Sefes en 1997, cargo que compaginó hasta 2007 con la dirección de la empresa de cableado Furas. En abril de 2019 fue distinguido con la Creu de Sant Jordi por su contribución al fortalecimiento del tejido empresarial catalán y es que, a pesar de su lucha en defensa de las pymes -que no en detrimento de las grandes empresas- durante décadas, considera que "los lobbies de las grandes empresas todavía son muy eficientes en detrimento de los que hacemos de lobby para las pymes". Precisamente por eso, no se cansa de denunciar que las pequeñas y medianas empresas todavía tienen una fiscalidad muy alta y el coste de la energía más alto de Europa, cosa que será difícil de solucionar si el Estado español no se pone las pilas y conforma un gobierno sólido. Porque, de momento, demuestran que "son incapaces de pensar en clave de Estado y piensan en clave de partido o de conveniencias". Y, mientras tanto, la gestión del Aeropuerto del Prat, del Puerto de Barcelona y del Corredor Mediterráneo continúan en manos de Madrid.
¿Repetiría una reunión como la de Iese en 2007 para reivindicar una mejor gestión al Aeropuerto del Prat?
Las circunstancias han cambiado mucho porque en aquel momento no teníamos el Ferrari que tenemos ahora. Barcelona tiene un Ferrari y ahora falta saberlo conducir, pero no podemos negar que el aeropuerto se hizo un señor aeropuerto. El Comité de Rutas Aéreas (CDRA) ha hecho un buen trabajo porque se han abierto muchas nuevas rutas internacionales con Norwegian, Level... Ha hecho un crecimiento espectacular.
¿Qué le falta?
Básicamente, descentralización y competencias. No tendríamos que estar supeditados a la sensación de que Madrid controla. Tendría que haber una cierta rivalidad porque esto estimula la actividad. También empezamos a tener a la vista una limitación en la capacidad de las pistas. Si queremos tener un aeropuerto a la altura del país, tienen que aterrizar y elevarse más aviones.
Aena descartó la cuarta pista.
Han hablado de invertir 360 millones de euros para conectar el AVE con Girona, pero lo que tenemos que hacer es tomar decisiones. ¿Qué protestaremos ahora con una reunión como la de Iese? En aquel momento teníamos una limitación dura, ahora se pueden mejorar cosas pero son menores. Creo que estamos aprendiendo a conducir este Ferrari.
Pasa igual con el Puerto de Barcelona que, además, aporta al Fondo de Compensación Interportuario 5,8 millones de euros y recibe 315.000 euros.
Se tendría que descentralizar porque depende demasiado de una gestión que quiere armonizar la gestión de todos los puertos. Si esto redundara en una mejora de las aportaciones para infraestructuras... Pero va fuera de Catalunya con una gestión muy dependiente de Madrid. Tiene que haber un espíritu menos centralista. A nivel de empresas, ya hemos visto que la competencia estimula.
"Tiene que haber un espíritu menos centralista porque, a nivel de empresas, ya hemos visto que la competencia estimula"
¿Y con el clásico de Corredor Mediterráneo, lo mismo?
Este ya va para nota. Es un despropósito total los años que lleva este Corredor teniendo en cuenta que las ventajas que tiene están estudiadas y reconocidas más por Europa que por España. Pero tenemos la realidad de Madrid y perdemos unos años magníficos con el eje ferroviario. Sería impulsar todos los puertos del Mediterráneo y hacer la competencia a puertos como el de Rotterdam o el de Ámsterdam, que son importantes y competidores nuestros. Aquí se ha perdido mucho negocio de Asia que vendría por los puertos españoles pero que no lo hace por eso. Y es muy lamentable que este tema continúe lento.
El ministro Ábalos dijo que esperaba poner en marcha la variante de Vandellòs a finales de año.
Las promesas han sido muchísimas y la realidad poca. Él y cualquier otro que gobierne tiene que entender que hay una desconfianza con lo que se dice importante. Nos podríamos preguntar que cómo es posible que la segunda y la tercera ciudad de España no estén conectadas por AVE y sí que lo estén otras con muy pocos pasajeros. Esto es difícil de entender.
De inversiones radiales se han hecho muchas.
La radialidad es un factor de poder, no un factor económico.
"Nuevas elecciones significa un fracaso muy fuerte de los políticos"
Mientras tanto, volvemos a nuevas elecciones. ¿Todo esto afecta a estas decisiones?
Sin duda, una buena parte de las decisiones que son importantes y urgentes quedan paradas. Nuevas elecciones significa un fracaso muy fuerte de los políticos. Estamos todavía con presupuestos del señor Montoro. Esto nos parece lamentable porque entendemos que para muchas cosas de la economía y genera inseguridad y esto puede alejar inversiones.
¿Vamos hacia una nueva crisis?
Vamos hacia una ralentización de la economía. La actividad se ha ido desacelerando, pero todavía hacemos previsiones del 2% por el año próximo. Desaceleración sí, pero nos preocupa la gente que mezcla esto con recesión. No creo que haya razones para plantearlo, a pesar de que la guerra entre los Estados Unidos y China puede tener un impacto, igual que el Brexit.
¿Cómo cree que afectará el Brexit a las empresas catalanas que tienen negocios allí?
Afectará porque tenemos un 6% de negocio con Inglaterra. Si se les devalúa la libra, les costaría más comprar productos españoles, pero también otros lugares. Esto puede representar una cierta caída de la actividad exportadora, pero para todo el mundo.
"No podemos estar de acuerdo con cualquier cosa que sea una campaña interna dentro de Catalunya"
¿Qué opina de la campaña de la ANC de consumo estratégico para potenciar las empresas favorables a la República catalana?
No se puede discriminar a las empresas porque también discriminas a consumidores y aquí ya hemos sufrido la campaña contra los productos catalanes en 2012. No podemos estar de acuerdo con cualquier cosa que sea una campaña interna dentro de Catalunya.
¿Cómo están las relaciones con Foment del Treball? Ahora ya hace más de medio año que firmaron la representatividad paritaria.
Se cumplió un objetivo después de haber estado 12 años luchando por la representatividad y esto ha quedado satisfactoriamente solucionado. A todos los efectos está funcionando.
¿Hay algo que no funcione?
Una parte de lo que acordamos, que era intentar tener un espíritu de unidad de acción. Y este tema lo tenemos que mejorar con Foment, como hacen los sindicatos. En todo no nos podremos poner de acuerdo porque representamos intereses diferentes, pero hay que optimizar la relación entre las dos entidades para ver si podemos coincidir en algunos aspectos.
¿Qué ayudas necesitan las pymes para ser más competitivas?
Todavía hay demasiada legislación y pensamiento pensando en pymes, pero actuando en favor de las grandes empresas. Los lobbies de las grandes todavía son muy eficientes en detrimento de los que hacemos de lobby para las pymes. Hemos hecho leyes importantes como la de contratación pública o morosidad, pero les falta una fiscalidad más adecuada porque hoy paga más una pyme que una gran empresa: las pymes pagan de media un 18% del impuesto de sociedades y las grandes un 7% o 8%. Lo que no puede pasar es que una pyme no sea competitiva en fiscalidad.
"No es lógico que por un condicionante político tengamos que competir con empresas del País Vasco porque una tiene unas condiciones más competitivas dentro del mismo territorio"
Tenemos el precio de la energía más alto de Europa.
El pequeño consumidor está más penalizado aquí que en cualquier país de Europa, mientras que los grandes consumidores de energía tienen tarifas especiales. Tenemos un agravio comparativo que hace que no podamos ser tan competitivas como lo tendríamos que ser, a parte de que el País Vasco, por razones políticas, tiene un precio del kilovatio más bajo que el resto de España. No tendría que ser lógico que por un condicionante político tengamos que competir con empresas del País Vasco porque una tiene unas condiciones más competitivas dentro del mismo territorio.
¿Por qué considera que es un error incentivar a las empresas que marcharon el 1-O?
No se tiene que primar unas empresas que desplazaron su domicilio social fuera de Catalunya, me parece de lo más absurdo porque es un agravio comparativo con las empresas que se han quedado aquí. Catalunya tiene una fiscalidad muy alta. No hablemos de Madrid porque es difícil de explicar las ventajas que tienen, pero el flujo de inversiones en Catalunya es muy elevado. Aquí tenemos una economía a la italiana: va bien a pesar de los políticos. Exportamos un 27% y lo hacemos en los países de Europa que también se están parando. Pero con un crecimiento del 2% todavía hay actividad y se puede mejorar el paro.
¿Se puede mejorar el paro, pero también la precariedad laboral?
Tenemos asignaturas pendientes y es un tema que hace años que no está arreglado. Hay excesiva temporalidad de los contratos y, dicho esto, lo que es difícil es arreglarlo porque hay una hipersensibilidad de tiempos anteriores donde tener contratos fijos hizo sufrir mucho cuando vino la crisis. Hay un exceso de oferta y no hay una valentía de gobiernos y agentes sociales para encontrar soluciones en este tema.
¿Cómo ven desde Pimec el futuro económico y empresarial?
Siempre somos positivos porque ser empresario es luchar continuamente. Yo no puedo evaluar qué consecuencias pueden tener estas macroluchas con la China y los EE.UU., el Brexit... que nos pueden influir. Y también qué política económica seguirá Alemania, que es muy prudente. Si adoptara una política de estímulo, ayudaría mucho.