Fira de Barcelona ha presentado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que afecta a toda la plantilla, de cerca de 400 trabajadores. La organización justifica la medida por la imposibilidad de llevar a cabo su actividad ferial por las restricciones decretadas para hacer frente al coronavirus.
Por eso, se ha acordado con el comité de empresa una reducción de jornada y de salarios hasta el 31 de diciembre pero con carácter variable, en función de la reactivación de los acontecimientos. La reducción afecta a aproximadamente el 40% de la jornada laboral, a pesar de que puede llegar al 55%, y la medida entra en vigor el 1 de mayo.
En un comunicado, Fira de Barcelona ha asegurado que trabaja en posibles nuevos formatos de ferias y congresos, que pueden combinar la parte presencial con la virtual, y que está reorganizando su calendario ferial con el objetivo de concentrarlo en el último cuatrimestre del año, tan pronto como las condiciones lo hagan posible. Esto implica repensar acontecimientos inicialmente previstos para los próximos meses como B-Travel, Valmont Barcelona Bridal Fashion Week (VBBFW) y Bizbarcelona.