Ecosistema de medios digitales y segmento juvenil: una perspectiva nacional

En el contexto de oligopolio de la industria audiovisual y la alta representación de los adolescentes como sus principales consumidores, ¿qué se debería hacer para aumentar la competencia en este mercado y proteger a un grupo altamente vulnerable?

El ecosistema de medios digitales en el estado español | iStock El ecosistema de medios digitales en el estado español | iStock

El gigante de las redes sociales Facebook vuelve a estar en el punto de mira y bajo un mayor escrutinio público después de que el testimonio de la denunciante Frances Haugen haya sido noticia a nivel internacional. Como informa el medio de comunicación británico The Guardian en un artículo publicado online el pasado 6 de octubre, la exempleada de Facebook “ha acusado a la compañía de medios sociales de engañar repetidamente a los inversores sobre su enfoque de la seguridad [infantil] y el tamaño de su audiencia”. Hace un par de semanas, el lunes 4 de octubre, un apagón mundial de casi seis horas inhabilitó el acceso de miles de millones de usuarios a sus cuentas de redes sociales en las plataformas de Facebook, incluidas Instagram y WhatsApp.

En otro orden de cosas, a principios de septiembre de 2021, WhatsApp Irlanda fue multada con 225 millones de euros por la Comisión de Protección de Datos (CEPD) por infracción de las normas de protección de datos, falta de transparencia, información inadecuada y falta de consentimiento válido en la personalización de anuncios.

Estos dos acontecimientos recientes llaman la atención en el debate en curso acerca del papel fundamental que desempeña el segmento de mercado de los jóvenes en el desarrollo de la economía digital mundial en la era de los nuevos modelos empresariales basados en los datos. Los jóvenes como trabajadores de los datos y las preocupaciones relativas a la protección de los datos online, la privacidad y las medidas de seguridad aplicadas por las grandes empresas tecnológicas, incluidas las de medios sociales (Facebook, Instagram o Snapchat), los servicios de vídeo en línea (YouTube, Netflix, Amazon Prime Video...) y los sistemas de mensajería instantánea (WhatsApp, Facebook Messenger o Skype), se encuentran entre las principales prioridades normativas y legislativas en la Unión Europea. Este tema es de crucial importancia, sobre todo porque las poderosas empresas tecnológicas son muy populares entre los jóvenes, según los recientes datos publicados por el Digital News Report 2021 de la Universidad de Oxford.

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El reto

En los últimos años, los avances en el ecosistema de los nuevos medios digitales en España han cambiado drásticamente la interacción, el compromiso, la creación de contenidos (actividades en las redes sociales, juegos interactivos, blogs en formato escrito o de vídeo, música, podcasting, etc.) y los hábitos y patrones de consumo de medios en general. Como señaló el director del CAC (Consell de l'Audiovisual de Catalunya), la principal tendencia del mercado es el creciente índice de consumo de medios audiovisuales en las plataformas para compartir vídeos (YouTube, Dailymotion, Vimeo, TikTok...) y en las redes sociales (Facebook, Instagram, Twitter...). Al mismo tiempo, surge la preocupación por la protección de los menores y los jóvenes que comparten datos personales en internet, la importancia de la privacidad digital y la seguridad en línea. El papel desdibujado del segmento juvenil como mercado/consumidores primarios de productos mediáticos y como usuarios/productores representa una cuestión crítica que requiere una profunda reflexión sobre el papel que desempeñan los jóvenes como creadores de contenido en los medios digitales.

La llegada de los jóvenes a las nuevas carreras digitales como trabajadores de la información, la exposición a los medios de comunicación, los efectos de los medios en las audiencias y el comportamiento de las empresas de medios de comunicación son objeto de seguimiento por parte de varias instituciones, como la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) del estado español, el Consell Audiovisual de Catalunya y el Consejo Audiovisual de Andalucía, junto con varias partes interesadas de ámbito nacional (organizaciones de la sociedad civil, ONG, el mundo académico, asociaciones de la industria y otros grupos de interés públicos o privados). A nivel internacional, juegan un papel importante el Observatorio Audiovisual Europeo, la Plataforma Europea de Autoridades Reguladoras y el Grupo Europeo de Reguladores de Servicios de Comunicación Audiovisual. 

Las nuevas obligaciones están destinadas a aumentar la competitividad de las pymes del sector audiovisual, ya que el tamaño y los intereses pueden constituir una desventaja para competir con Netflix y otros

En este contexto, cabe destacar los retos actuales para el sector del mercado audiovisual español en relación con las nuevas obligaciones para los prestadores de servicios de comunicación audiovisual televisiva, las pequeñas y medianas empresas y las plataformas de intercambio de vídeos derivadas de la Directiva de Servicios de Comunicación Audiovisual (digital single market, DSM). Esta directiva revisada introduce cambios en el Proyecto de Ley General de Medios Audiovisuales de España.

La solución

Durante el proceso de transposición marcado por la Directiva de Servicios de Medios Audiovisuales y traducido en legislación nacional, que se inició en diciembre de 2019, las autoridades españolas y diversas partes interesadas, públicas y privadas, adoptaron una serie de medidas destinadas a abordar las cuestiones mencionadas. La inclusión de la DSM en el ordenamiento jurídico español supone la derogación de la Ley 7/2010, de 31 de marzo, de la General de Medios Audiovisuales (LGCA). Se considera que el proyecto de ley tiene efectos positivos sobre la actividad de las pequeñas y medianas empresas españolas. Las nuevas obligaciones están destinadas a aumentar la competitividad de estas empresas, dado que su tamaño y sus ingresos podrían constituir una desventaja a la hora de competir con actores poderosos que invierten fuertemente en la adquisición y producción de contenidos (por ejemplo, Netflix).

Por un lado, las autoridades españolas iniciaron diversas consultas y audiencias públicas previas a la elaboración del Proyecto de la LGCA, recogiendo datos de la industria sobre las necesidades de los agentes del mercado audiovisual. Por ejemplo, la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) abrió una consulta pública sobre la aplicación de la regulación audiovisual a los prestadores de servicios de comunicación apoyados en plataformas de video sharing dirigida a empresas tecnológicas, organizaciones sociales, anunciantes, agencias de publicidad y entidades públicas. A partir de las aportaciones recogidas, el proyecto de ley contiene medidas que garantizan los derechos de los usuarios a recibir comunicaciones audiovisuales plurales, refuerza la protección de los menores y de los espectadores en general, protege los derechos a la diversidad cultural y lingüística y los derechos a la comunicación audiovisual transparente, y establece una regulación mínima para los servicios de las plataformas de intercambio de vídeos.

La campaña #AMiNoMenganyen del CAC quiere promover el pensamiento crítico y advertir sobre los peligros del ciberacoso, las noticias falsas y las amenazas de privacidad en línea

Por otro lado, diversas entidades públicas y privadas nacionales tomaron medidas y reclamaron una mayor protección de los menores y de las personas con discapacidad frente a los delitos de odio y la incitación al odio, la cobertura de los medios audiovisuales de los grupos sociales con discapacidad, medidas de accesibilidad a los contenidos de los medios audiovisuales, la garantía de la independencia de los reguladores de los medios y la priorización de los programas de alfabetización mediática.

En cuanto a la cuestión de la juventud, son relevantes para el debate las enmiendas de la Directiva de Medios Audiovisuales destinadas a reforzar la protección de los menores y de los espectadores en general frente a contenidos potencialmente nocivos y perjudiciales en los programas audiovisuales lineales, las plataformas de intercambio de vídeos y las redes sociales. Como demuestra un estudio reciente, el Consell Audiovisual de Catalunya adoptó una serie de medidas para abordar estas cuestiones. Entre las acciones del organismo de control de los medios de comunicación catalanes se encuentran el lanzamiento de la Plataforma de Educación en Medios de Comunicación con el objetivo de promover la alfabetización mediática digital; la firma de un acuerdo de cooperación con varias asociaciones y colegios de médicos catalanes con el objetivo de combatir las noticias falsas relacionadas con temas de salud y la promoción de la investigación sobre los efectos de los juegos de azar en línea y los anuncios de apuestas. Una iniciativa muy interesante es la campaña “#AMiNoMenganyen” lanzada por el CAC en colaboración con la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals y la Obra Social 'la Caixa'. El objetivo de esta campaña es promover el pensamiento crítico y advertir sobre los peligros del ciberacoso, las noticias falsas y las amenazas a la privacidad de los datos en línea.  El CAC publica interesantes informes sobre diversos aspectos relacionados con el panorama de los medios digitales, como las pautas de consumo de medios audiovisuales, los estereotipos de género en la publicidad, el cibercontrol en las citas de los adolescentes y la publicidad de los juegos de azar en internet.

Además, durante el procedimiento de transposición dictado por la Directiva de Servicios de Medios Audiovisuales, las organizaciones de la sociedad civil, las ONG, las asociaciones de la industria y otros grupos de interés participaron en varias iniciativas destinadas a mejorar la protección de los menores y de los niños expuestos a los juegos de azar en línea y a la publicidad subliminal.

La legislación en audiovisual es sólida y la implicación de varios organismos permite augurar buenos resultados a corto y medio plazo

En resumen, estos acontecimientos recientes revelan que España representa un caso interesante para la evaluación comparativa internacional en relación con la regulación del sector de los medios audiovisuales, principalmente durante la transposición de la Directiva de Servicios de Medios Audiovisuales. Una vez promulgada la ley, una evaluación de la eficacia de las nuevas medidas arrojaría luz sobre el impacto en las audiencias y las empresas de medios de comunicación. Sin embargo, aunque todavía queda mucho por hacer, la legislación es sólida y la implicación de los diversos organismos mediante acuerdos comunes permite augurar buenos resultados a corto y medio plazo.

Artículo basado en el artículo científico presentado en la Weizenbaum Conference 2021, organizada por The Weizenbaum Institute for the Networked Society:

Mutu, A. (2021). “Media Literacy and the Protection of Minors in the Digital Age: Intermediary initiatives during the transposition of the AVMS Directive in Spain”. In Proceedings of the Weizenbaum Conference 2021 (pp. 1-4). Berlin: Weizenbaum Institute for the Networked Society - The German Internet Institute. https://doi.org/10.34669/wi.cp/3.3

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