Cuántas veces nos hemos pensado dos golpes si introducir nuestros datos para registrarnos en un web o para recibir un servicio? Cuántos golpes no hemos descargado o usado una aplicación porque no nos convence la reputación que aquella empresa tiene en cuanto a la gestión de los datos? Un uso responsable y ético de los datos que gestiona la empresa puede parecer cosa del departamento de RSC, pero a medida que los datos toman importancia, una buena gestión del petróleo del s. XXI es más que un tema de imagen. La consultoría Eticas Research & Consulting intenta dar un golpe de mano a empresas y entidades en este ámbito tan de actualidad.
Eticas Research & Consulting es una consultora y centro de investigación especializada en la ética de la tecnología y su impacto legal, social y ético. Su directora, Gemma Galdón, doctora en vigilancia, seguridad y políticas urbanas, explica en que se traduce el trabajo que hacen desde esta empresa: "Ayudamos empresas y organizaciones a entender el impacto de los datos en su estructura y como gestionarlas de manera ética".
Así, por ejemplo, Eticas trabaja con el Gobierno de Holanda pensando la policía en la era del Big Data, "en una época en que los datos hacen que la diferencia entre el hecho público y el privado quede difuso, el intercambio de datos es constante y las redes sociales son un ámbito de investigación"; trabajan en control biométrico de fronteras y la automatización de estas -como hacer que las máquinas respeten la legalidad, la intimidad y las expectativas de la sociedad y la gestión responsable de los datos que recogen-; también trabajan con institutos forenses para asegurar que la gestión de datos personales después de un incidente químico, biológico o nuclear es correcto "en un mundo donde los datos cada vez son más complejas". Eticas, en definitiva, da un golpe de mano a conformar una estrategia ética de datos a todo aquel ente quetenga contacto.
Entre el uso y el abuso
"Queremos hacer que los datos no se queden en una caja negra que nadie entiende sino que podamos empoderar quién usa el sistema y garantizar además que se respetan sus derechos fundamentales y el marco legal", afirma la doctora. Está claro que los datos son el nuevo petróleo y hace falta que "si se hace negocio, se tiene que hacer de manera responsable", apunta Galdón.
"Empresas con quienes trabajamos nos explican que empiezan a perder clientes porque la gente cada vez está más harta que se abuse de sus datos", por este motivo Eticas los ayuda a explicar que hacen las cosas "mejor y que no nos juzguen a todos cómo si fuéramos depredadores de datos". En este sentido esta consultoría hace una gran tarea de gestión de reputaciones de sus clientes.
"Muchos golpes hemos tenido que decir no a clientes porque hay empresas que sólo quieren una estrategia de comunicación, pero no podemos ayudarlos si no hacen las cosas bien precisamente", avisa.
Una empresa tecnológica sin tecnología
Galdón escribió su tesis doctoral sobre temas de sociología, policía y videovigilància, uno tema -tecnología y ciencias- poco tratado desde el punto de vista de las letras. Un golpe leída la tesis, Galdón recibió muchos proyectos de financiación y propuestas para incorporarse a investigaciones existentes, hasta el punto que contaba con más de un millón de euros de fondos de investigación propios. "La misma universidad me pidió que marchara", recuerda Galdón, que en aquella época era "demasiado joven porque me ofrecieran un lugar de trabajo a la universidad".
Eticas surgió de la necesidad de dar una casa a todos los proyectos de investigación que se habían interesado por su trabajo. A la vez, un golpe constituida la compañía, otros muchos clientes se interesaron por su trabajo. Y el crecimiento desde el 2014 hasta ahora ha sido exponencial. El equipo que trabaja a Eticas cerrará el año con 37 trabajadores expertos en ciencias de computación, informática, ingenieros y antropología, sociología y derecho. "A través de este encuentro de diferentes miradas podemos doner un servicio muy completo", explica la empresaria.
Las primeras oficinas eran en una antigua fábrica de bombillas hasta que se trasladaron a otras en la calle Ferlandina. Pero el desarrollo ha sido también internacional con equipos trabajando en 10 países y creciente: "El año que viene abrimos oficina en Amsterdam y Belgrado". Eticas ha crecido siempre "según demanda, nunca hemos ido a buscar clientes", explica la investigadora.
Eticas, que cerrará el año con una facturación cercana al millón de euros, basa la mayor parte de su volumen de negocio precisamente en el mercado exterior en un 98% y sobre todo en proyectos privados y público-privados. En España esta consultoría trabaja con la Policía de Valencia, Indra o el Ayuntamiento de Barcelona. "A Eticas no tenemos casi clientes locales y nos sabe bastante de grave que no se reconozca el buen trabajo que hacemos", lamenta Galdón, que apunta, quizás, a los prejuicios que muchas veces se tienen cuando un empresario se ha significado políticamente. Galdón ha tenido presencia a las filas de Podemos y, a pesar de que en febrero dejará de estar oficialmente vinculada al partido, encuentra que "este país no es muy maduro al separar profesionalidad de compromiso político, sobre todo si es de izquierdas".
Ir a buscar clientes
Galdón acepta que Eticas es "una empresa muy extraña, con un modelo de negocio que seguramente en el futuro será más común", pero que ahora de momento no tiene ningún competidor real. Eticas es una empresa que trabaja con tecnología pero sin tener una base tecnológica y es la más grande en este ámbito. "De cara al futuro tenemos que capitalizar este hecho y lo queremos hacer expandiéndonos", apunta Galdón, que participará en el programa de mentoring de Barcelona Activa. "Nos tenemos que dar a conocer para que entidades y empresas sepan que existe un espacio que los puede ayudar a entomar el impacto de los datos", explica, y por eso habrá que dejar de trabajar a demanda e ir a buscar clientes.
A la vez, de cara en marzo del año próximo se planea un relanzamiento de Eticas con las nuevas oficinas al extranjero y la inauguración de una fundación "para canalizar mucha información innovadora que producimos".