16
de Junio
de
2014
Act.
10
de Noviembre
de
2015
Factor Energía hacía tiempo que se anunciaba como "la eléctrica sólo por empresas. De momento". Y el momento ha llegado. 15 años después de su fundación, el 1999, ya comercializa electricidad al mercado doméstico en una historia definida por la capacidad de saber encontrar la oportunidad adecuada en el momento preciso.
La liberalización esglaonada del sector eléctrico ha permitido a Factor Energía ir superando fases hasta enfrentarse este gran reto. Desde las tres personas que lo iniciaron, ahora ya superan el centenar y facturan 426 millones de euros con más de 40.000 clientes.
Detectar la oportunidad
Emili Rousaud, director general de Factor Energía, explica que hace 15 añosllevaba casi 10 trabajando en una multinacional "y detestaba el que estaba haciendo". Hasta que leyó que el sector eléctrico se liberalizaba. Sin experiencia en este campo, y después de estudiar minuciosamente los requisitos, con su hermano y un amigo crearon una Sociedad Limitada (SL) y la presentaron al Ministerio de Industria.
Se convertían así en la primera compañía independiente del sector acabado de liberalizar. "Después de ponernos el sello, nos pidieron que nos esperáramos y bajó un responsable del Ministerio a advertirnos que no tendríamos que estar haciendo esto", recuerda Rousaud. A la cabeza de poco tiempo se modificó la ley y los requisitos para entrar al sector se multiplicaron . "Con los nuevos requisitos nohabríamos podido entrar, pero ya teníamos la licencia ", asegura.
"En cualquier sector con muchas concesiones y dónde dependes de decisiones gubernamentales, se crean una serie de lobbies de influencia para mantener en marcha uno determinado negocio", explica Rousaud. Lejos de asustarse, y a pesar de ser consciente que son en una fiesta donde no los habían invitado, asegura que "esto nos motiva enormemente".
Poner en marcha el proyecto
Con la licencia bajo el brazo, Rousaud preparó un plan de negocio y empezó las visitas a potenciales inversores. "Tenía el inconveniente de la carencia de experiencia en el sector, pero la gran ventaja de tener la licencia", destaca. Finalmente, consiguió convencer la constructora Copcisa que apostara por Factor Energía.
"Ellos ponían el dinero y me dijeron: tú quepones? Y los traje mi renta comprometiéndome a cobrar la mitad hasta que la empresa ganara dinero", explica un Emili Rousaud que tardó cinco años a recuperar la totalidad del sueldo. "Más que el dinero, el que me importaba era el proyecto. La gente se piensa que el empresario mira el dinero; pero el que mira es la ilusión que le hace poner el proyecto en marcha", defiende convencido.
a paso
"Ahora hay más, pero cuando empezamos fuimos los primeros a trabajar sólo por empresas", destaca Rousaud. La ley liberalizó el sector eléctrico de forma esglaonada, y el primer escalón liberado era el suministro a las grandes empresas industriales, que fueron sus primeros clientes.
"Una directiva transposada europea decía que el mercado doméstico lo tenías que abrir a final del año 2012 como mucho tarde. Al 1999 aquello era cómo si ahora me hables del 2030", recuerda el director general de Factor Energía. Con el tiempo el gobierno fue rebajándolo, y el 2009 se abrió el segmento de las pymes. "Hace un mes y medio que han abierto el doméstico y noshemos metido. Somos picapedreros, vamos persiguiendo las oportunidades", destaca Rousaud.
El reto doméstico
La entrada al mercado doméstico ha requerido potenciar la estructura de la empresa. "Hemos alquilado 280 metros cuadrados más de oficina que hemos llenado de mesas y sillas para poder dar todo el apoyo que hace falta", explica su dirigente. "Somos una empresa que da un buen servicio, esto es esencial. Y pondremos todos los recursos necesarios para darlo", quiere dejar claro.
Según Emili Rousaud, el aspecto diferencial de Factor Energía es "un precio más económico de media que las grandes empresas del sector, pero la base es que damos un buen servicio". Tiene claro que este servicio es el que los ha permitido hacer camino en el mundo de la empresa y "haber fidelitzat tanto los clientes".
Incluso, dice, "nos va bien que de vez en cuando alguno de nuestros clientes tenga un problema porque ve todo el servicio que podemos dar". El 2013 optimizaron la potencia de 32.000 clientes sin pedirlo, "y esto hace que la gente comprenda que nos preocupamos por ellos".
Los valores
Y es que si en algo insiste Emili Rousaud es a defender la ética y los valores a la empresa. "Las personas son lo más importante, nuestra misión nunca ha sido crear más valor al accionista", explica. Afirma que "queremos una relación honesta y transparente con el cliente".
Un compromiso con el cliente, pero también con la sostenibilidad. Factor Energía representa además 2.500 productores de energías renovables independientes en el mercado eléctrico. "Promovemos el consumo de energía verde y garantizamos su origen renovable", concluye.
La liberalización esglaonada del sector eléctrico ha permitido a Factor Energía ir superando fases hasta enfrentarse este gran reto. Desde las tres personas que lo iniciaron, ahora ya superan el centenar y facturan 426 millones de euros con más de 40.000 clientes.
Detectar la oportunidad
Emili Rousaud, director general de Factor Energía, explica que hace 15 añosllevaba casi 10 trabajando en una multinacional "y detestaba el que estaba haciendo". Hasta que leyó que el sector eléctrico se liberalizaba. Sin experiencia en este campo, y después de estudiar minuciosamente los requisitos, con su hermano y un amigo crearon una Sociedad Limitada (SL) y la presentaron al Ministerio de Industria.
Se convertían así en la primera compañía independiente del sector acabado de liberalizar. "Después de ponernos el sello, nos pidieron que nos esperáramos y bajó un responsable del Ministerio a advertirnos que no tendríamos que estar haciendo esto", recuerda Rousaud. A la cabeza de poco tiempo se modificó la ley y los requisitos para entrar al sector se multiplicaron . "Con los nuevos requisitos nohabríamos podido entrar, pero ya teníamos la licencia ", asegura.
"En cualquier sector con muchas concesiones y dónde dependes de decisiones gubernamentales, se crean una serie de lobbies de influencia para mantener en marcha uno determinado negocio", explica Rousaud. Lejos de asustarse, y a pesar de ser consciente que son en una fiesta donde no los habían invitado, asegura que "esto nos motiva enormemente".
Poner en marcha el proyecto
Con la licencia bajo el brazo, Rousaud preparó un plan de negocio y empezó las visitas a potenciales inversores. "Tenía el inconveniente de la carencia de experiencia en el sector, pero la gran ventaja de tener la licencia", destaca. Finalmente, consiguió convencer la constructora Copcisa que apostara por Factor Energía.
"Ellos ponían el dinero y me dijeron: tú quepones? Y los traje mi renta comprometiéndome a cobrar la mitad hasta que la empresa ganara dinero", explica un Emili Rousaud que tardó cinco años a recuperar la totalidad del sueldo. "Más que el dinero, el que me importaba era el proyecto. La gente se piensa que el empresario mira el dinero; pero el que mira es la ilusión que le hace poner el proyecto en marcha", defiende convencido.
a paso
"Ahora hay más, pero cuando empezamos fuimos los primeros a trabajar sólo por empresas", destaca Rousaud. La ley liberalizó el sector eléctrico de forma esglaonada, y el primer escalón liberado era el suministro a las grandes empresas industriales, que fueron sus primeros clientes.
"Una directiva transposada europea decía que el mercado doméstico lo tenías que abrir a final del año 2012 como mucho tarde. Al 1999 aquello era cómo si ahora me hables del 2030", recuerda el director general de Factor Energía. Con el tiempo el gobierno fue rebajándolo, y el 2009 se abrió el segmento de las pymes. "Hace un mes y medio que han abierto el doméstico y noshemos metido. Somos picapedreros, vamos persiguiendo las oportunidades", destaca Rousaud.
El reto doméstico
La entrada al mercado doméstico ha requerido potenciar la estructura de la empresa. "Hemos alquilado 280 metros cuadrados más de oficina que hemos llenado de mesas y sillas para poder dar todo el apoyo que hace falta", explica su dirigente. "Somos una empresa que da un buen servicio, esto es esencial. Y pondremos todos los recursos necesarios para darlo", quiere dejar claro.
Según Emili Rousaud, el aspecto diferencial de Factor Energía es "un precio más económico de media que las grandes empresas del sector, pero la base es que damos un buen servicio". Tiene claro que este servicio es el que los ha permitido hacer camino en el mundo de la empresa y "haber fidelitzat tanto los clientes".
Incluso, dice, "nos va bien que de vez en cuando alguno de nuestros clientes tenga un problema porque ve todo el servicio que podemos dar". El 2013 optimizaron la potencia de 32.000 clientes sin pedirlo, "y esto hace que la gente comprenda que nos preocupamos por ellos".
Los valores
Y es que si en algo insiste Emili Rousaud es a defender la ética y los valores a la empresa. "Las personas son lo más importante, nuestra misión nunca ha sido crear más valor al accionista", explica. Afirma que "queremos una relación honesta y transparente con el cliente".
Un compromiso con el cliente, pero también con la sostenibilidad. Factor Energía representa además 2.500 productores de energías renovables independientes en el mercado eléctrico. "Promovemos el consumo de energía verde y garantizamos su origen renovable", concluye.