José Ignacio Goirigolzarri presentará este miércoles su renuncia voluntaria a la presidencia de CaixaBank. Así lo ha avanzado La Vanguardia, que apunta que la decisión del dirigente podría no tener efectos inmediatos y producirse definitivamente en un tiempo, aunque la entidad podría anunciar el nombre de su sustituto tan pronto como hoy, una vez se reúna el consejo de la firma.
A la espera de conocer su relevo y las causas de la decisión de Goirigolzarri, el mencionado diario destaca el debate sobre las presidencias ejecutivas de los bancos españoles como una de las discusiones de actualidad que podría haber condicionado el adiós del presidente de CaixaBank. Y es que en los últimos días, el Banco Central Europeo (BCE) publicó un borrador donde proponía una estricta separación de los presidentes de bancos de las funciones ejecutivas. Un hecho que afecta especialmente a entidades españolas como la misma CaixaBank, BBVA o Santander, donde los presidentes mantienen este rol ejecutivo.
A la espera de saber quién será su sustituto, CaixaBank podría seguir las directrices europeas y nombrar un presidente sin funciones ejecutivas
Así pues, una de las claves será saber si el banco apostará o no por una presidencia no ejecutiva y seguir así la propuesta del BCE. Según la información, los reguladores europeos ya están informados de las intenciones del directivo. Por eso, Goirigolzarri no será quien lidere esta nueva etapa, después de más de tres años al cargo. En concreto, llegó a la presidencia el marzo del 2021, una vez CaixaBank absorbió Bankia.
Ahora mismo, cabe recordar que el único vicepresidente de CaixaBank es Tomàs Muniesa, que es también el primer accionista del banco, con un 31,7%. Muniesa controla esta parte a través de Criteria Caixa, y es el representante dominical de la entidad. Sin embargo, de momento no hay ninguna noticia que relacione al directivo con un posible cambio de estructura interna de la compañía.