"No tiene sentido penalizar a unas entidades por haber cumplido una norma", ha declarado el consejero delegado de Caixabank , Gonzalo Gortázar. Sabiendo con antelación que los resultados serían buenos -la noticia que su beneficio ha aumentado un 18,8% circula desde primera hora-, la presentación de resultados de la entidad que ha hecho este viernes en Valencia ha sido, como era de esperar, un cuestionario mediático sobre la polémica sentencia del Tribunal Supremo sobre las hipotecas. Es el tema que preocupa en la calle, a las entidades y a las Administraciones. Y por lo tanto, a los periodistas. Lo tema estrella de la economía semanal.
A razón de las numerosas preguntas, Gortázar ha sido más extenso en su respuesta, alegando que "adaptaremos nuestra práctica. Vamos a esperar, pero creo que es conveniente recordar que es una sentencia que dictamina que un reglamento que ha estado en vigor durante 23 años ahora no es válida y había sido confirmada por el Supremo e incluso por el Tribunal Constitucional. Y si no es válida, deja de serlo inmediatamente, pero el que sí que pensamos es que es difícil y no tiene sentido penalizar a unas entidades por haber cumplido una norma. Es el principio, creo, que de lógica".
Sobre las consecuencias económicas del hecho que finalmente los bancos tengan la obligación de abonar el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados en las escrituras públicas de préstamo con garantía hipotecaria, Gortázar ha asegurado que la oferta comercial de las hipotecas obviamente "se tendría que adaptar", pero a priori su expectativa es que "como las actuaciones han sido correctas, no hay ninguna provisión porque no creemos que tengamos que tener un perjuicio económico sobre esto. Esperaremos al 5 de noviembre".
En plena polémica, cuando incluso el presidente del TS ha reunido los jueces de la sentencia, el consejero delegado ha asumido que los bancos tienen que hacer un esfuerzo "de comunicación" porque la sociedad los vea dar un servicio de valor añadido, pero a pesar de que ha admitido errores cometidos por el sector –"algunos han cometido más que otros", ha matizado- ha insistido que Caixabank es un banco "especial y diferente. Me gustaría insistir que tenemos un compromiso con la sociedad".
Gortázar: "Como las actuaciones han sido correctas, no hay ninguna provisión porque no creemos que tengamos que tener un perjuicio económico"
En un escenario como este, la situación política es inevitable tenerla presente, sobre todo después de que Valencia sea suyo social de la entidad arran las decisiones políticas de ahora hace un año. Pero, la entidad quiere evitar posicionarse más allá de dejar claro que sólo quieren "continuar llamando al diálogo que nos permita pasar página para encontrar un acuerdo beneficioso para todos, en Cataluña y en el resto de España", ha puntualizado el máximo responsable ejecutivo de la entidad.
En cuanto a la retirada de depósitos masiva de los días posteriores al 1 de octubre de 2017, Gortázar no ha querido aclarar las procedencias de los movimientos de los clientes, pero ha asegurado que el polémico cambio de sede social se tomó "en base a un momento en que empezaba a agrietarse la confianza por el que estaba pasando en Cataluña. La decisión se tomó por unanimidad, con criterios profesionales y sin presiones de ningún tipo", ha cerrado.
"Crece el que tiene que crecer"
Ya en la parte de análisis puramente económico, Gortázar ha explicado que "crece que el que tiene que crecer y baja el que tiene que bajar, puesto que no sólo crece la cartera sana sino que se reduce la problemática". Pues ha aumentado la cartera de crédito total del grupo CaixaBank en un 0,8% llegando a los 223.465 millones de euros y la ratio de morosidad se ha reducido un 5,1%, -2.189 millones de euros. "Esperamos bajar del 5% para final de año. Mantenemos una solvencia fuera de todo duda".
El consejero delegado apunta que "no sólo crece la cartera sana sino que se reduce la problemática"
La digitalización también es un aspecto en que la entidad está reforzándose y de hecho es uno de los primeros temas que ha querido destacar el directivo. Un 58% de sus clientes ya son digitales, un porcentaje que contabiliza al menos una transacción electrónica en los últimos 12 meses.
En este proceso también tiene cabida la existencia de las nuevas oficinas Store, que ya suman 249 por todo el territorio, un modelo que quieren potenciar en 2019 y que se desarrollará con más detalle en el próximo plan estratégico. "Los clientes tienden a ir menos al banco, pero cuando van, quieren recibir un servicio de valor añadido. Nos permiten ganar en eficiencia, porque cuando el cliente anda 10 minutos recibe un servicio diferenciado. Una parte de la razón que nuestros costes crecen –han presentado un aumento del 3,7% de los gastos recurrentes- es porque destinamos recursos a estas nuevas oficinas", ha anotado. Aun así ha descartado cerrar oficinas todo y apuntado que es la entidad que mástiene abiertas con presencia en borde 2.000 municipios.