Holaluz ha anunciado que pretende despedir a 200 trabajadores por la caída del mercado de placas solares. La compañía energética impulsará un ERE que prevé que esté cerrado antes de fin de año y que afectará a un 27% de la plantilla, formada por 730 personas. Los trabajadores más directamente perjudicados por la medida serán los instaladores de placas solares y los equipos de ventas y roles de soporte de este segmento del mercado. Holaluz asegura que la instalación de placas solares se ha ralentizado de forma "temporal" por los tipos de interés elevados y la "falsa sensación" de moderación del precio de la electricidad, que hace que los clientes residenciales aparquen la decisión de instalar placas.
Según Holaluz, el mercado de las placas solares ha caído entre un 25% y un 50% respecto al pasado año, y la compañía espera cerrar el 2023 con el mismo número de instalaciones que entonces, unas 3.000. Esto contrasta con las previsiones iniciales, que apuntaban a un 2023 de récord en el mercado solar.
La presidenta ejecutiva y cofundadora de Holaluz, Carlota Pi, ha asegurado que siente "profundamente" la decisión de aplicar un ERE pero que cree que "con esta adaptación a la situación temporal del mercado" la compañía podrá mantener su "posición de fortaleza”.