La gestora de fondos de inversión Ibercaja Gestión ha crecido un 6,9% entre enero y noviembre. El patrimonio es ahora de 14.950 millones de euros, 960 millones más que los que reunía a finales del año pasado. La entidad destaca que en el conjunto del sector ha habido un descenso, del 1,7%, debido a la incertidumbre que ha desplegado el coronavirus. Este aumento se ha producido "pese a la volatilidad y la incertidumbre vivida este año en los mercados financieros, en los que hemos podido ver caídas y rebotes de intensidad nunca vista anteriormente a corto plazo", según ha explicado Rodrigo Galán, director del Grupo Financiero de Ibercaja, en un encuentro virtual con medios de comunicación.
La mayor parte del crecimiento de Ibercaja Gestión se concentra en Madrid, el Arco Mediterráneo, Extremadura y Andalucía, con un 40% de las subidas. La entidad gestora ha obtenido 917 millones de aportaciones netas, un 50% más que en el mismo periodo del año pasado. Lili Corredor, directora general de Ibercaja Gestión, ha asegurado que la actividad de la gestora estos meses ha estado basada en la anticipación a las necesidades de los clientes, la gestión activa y diversificada, la amplia gama de fondos y el compromiso con la inversión sostenible.
"Disponer de una amplia gama de fondos ha sido fundamental, puesto que permite aportar soluciones para cualquier cojuntura de mercado y para cualquier perfil de inversor", ha añadido Corredor. "La marea de la inversión sostenible es imparable y, además de impulsar las mejores prácticas empresariales, está aportando notables rentabilidades a los partícipes, a la vez que se convierten en inversores de impacto con fondos de inversión que consideran criterios medioambientales, sociales y de gobernanza", ha dicho. La rentabilidad media de los fondos ha sido de un 1,1% hasta noviembre, mientras que en el conjunto del sector se ha situado en el 0,4%, según la directora general.
La coyuntura
Todo esto ha venido condicionado por el contexto mundial, que los directivos de Ibercaja Gestión han analizado. El resultado de las elecciones de EE.UU. han situado a los índices bursátiles globales en positivo, así como los avances en el desarrollo de varias vacunas contra la covid-19. En este sentido, consideran que las políticas fiscal y monetaria han impedido un impacto más alto en los mercados del coronavirus, pero que no evitarán cerrar el año con una contracción de un 4%.
Las perspectivas de cara a 2021 son optimistas, siempre y cuando se confirme una evolución de la pandemia que evite cierres de las economías mundiales tan severos como los de la primavera de 2020. Las políticas fiscal y monetaria se tendrán que mantener para conseguirlo, opinan.