La empresa catalana de servicios de limpieza y mantenimiento Ikiwi y el Centro de Ingeniería de Microsistemas para Instrumentación y Control de la Universitat de Barcelona (Cemic) han desarrollado conjuntamente un sistema que convierte las máquinas de limpieza industriales en robots autónomos, según informa el Departament d'Empresa en un comunicado. La solución permite automatizar la máquina convencional para hacerla inteligente y que funcione sin la intervención de un operario.
Para este proyecto de innovación, Ikiwi y el Cemic (centro con el sello Tecnio) han recibido una ayuda de 104.000 euros en el marco del programa Innotec de Acció. Esta línea de ayudas cubre hasta el 70% del coste de proyectos de I+D e innovación que se desarrollen entre pymes catalanas y grupos de investigación Tecnio.
Se trata de un dispositivo con componentes mecánicos y electrónicos que se instala en máquinas de limpieza industrial convencionales para incrementar la autonomía y minimizar la intervención humana. Por un lado, un sistema de sensores recoge información del entorno, al mismo tiempo que una placa base -que ha sido incorporada a la máquina de limpieza- procesa los estímulos recibidos utilizando algoritmos de inteligencia artificial basados en tecnología machine learning. De este modo, la máquina hace un reconocimiento del entorno y puede limpiar automáticamente con una autonomía de dos horas.
Un cambio en los puestos de trabajo
"El sistema será capaz de saber por dónde ha pasado, limpiar toda la zona evitando obstáculos y volver en su punto de partida", dice Manel López, líder del equipo del Cemic que desarrolla el proyecto. Además, se implementará una función de conexión a la nube "para extraer datos del funcionamiento y así poder optimizarlo y monitorizarlo", añade. De hecho, el prototipo desarrollado ofrece dos niveles de automatización: o bien la máquina puede funcionar de manera totalmente autónoma, o bien lo hace de manera parcial como sistema de asistencia para el técnico de limpieza. La empresa prevé que el dispositivo pueda adaptarse a diferentes modelos de maquinaria.
Según el director general de Ikiwi, Isaac Miller, esta solución permite "ofrecer un servicio de mucho más valor y más optimizado, puesto que mientras la máquina limpia de manera autónoma, la persona a cargo se puede ocupar de trabajos más minuciosos no susceptibles de automatizarse". Así mismo, el director de IKIWI destaca el impacto social del dispositivo: "Se crearían nuevos puestos de trabajo a nivel técnico, de personas que realicen la instalación y el mantenimiento de los sistemas".
El proyecto, que está en fase de desarrollo, servirá para automatizar las máquinas de Ikiwi y además la empresa contempla comercializar el dispositivo a través de acuerdos con los fabricantes de este tipo de maquinaria. Ikiwi, fundada en 2014, cuenta con 225 empleados. Por su parte, el equipo técnico del Cemic está formado por seis ingenieros del ámbito de la electrónica y la informática que actualmente están desarrollando el software de la solución de manera interdisciplinaria.