Si buscamos mujeres con experiencia directiva el nombre de Joana Sánchez es uno de los primeros que aparecen. La actual presidenta de Íncipy e Inesdi sigue con intensidad su tarea de sensibilización sobre la transformación digital de las empresas; pero lo hace con el bagaje de la experiencia como directiva al Grupo Planeta o el Deutsche Bank además de las diversas iniciativas empresariales que ha puesto en marcha. En esta primera entrega de una entrevista con VÍA Emprendida recuerda sus inicios en el liderazgo empresarial y cómo ha impactado la eclosión digital.
Puertas más de 25 años liderando equipos. Cómo recuerdas los inicios?
Empecé liderando personas desde muy joven, en mi primera etapa al Grupo Planeta. Al principio parece fácil porque tienes la teoría de la carrera sobre el liderazgo tradicional; pero cuando te enfrentas a trabajar con personas te das cuenta que no es tan sencillo. Ahora bien, cuando lideras un equipo al inicio del proyecto, al momento startup donde todo es guapo y crecimiento, se hace relativamente asequible. El más difícil es cuando consolidas las compañías y ya no hay la ilusión de los inicios. Es como el matrimonio! Tienes que pensar continuamente como desarrollas aquellas personas, como hacer que se encuentren bien en sus posiciones y conseguir equilibrar los objetivos de cada cual con la cuenta de resultados. Liderar personas es inspirarlas, hacerlas felices y pensar que vienen a contribuir. Cuando los objetivos de las personas coinciden con los empresariales es perfecto, pero es muy difícil.
Cuáles son los mejores equipos que has liderado?
Los que son cuanto más varios mejor. En sexo, edad, nacionalidad, todo. No me gustan los equipos monolíticos, sólo de corbata o sólo mujeres. Es más complejo, pero mucho mejor.
Cambia la manera de liderar con el paso de los años?
Está claro que varía, pero de todos los elementos de la gestión empresarial sigue siendo lo más difícil. Cada mañana me quito diciendo: a ver hoy como va. Gestionar personas continúa siendo lo más difícil y cada día aprendo. La experiencia es un elemento que tienes, pero que tienes que nutrir. Las personas vivimos un cambio continuo, los estilos de liderazgo y las tecnologías que te acompañan también lo hacen. Por eso no sé si la experiencia me sirve mucho... Me siento más segura, eso sí; y probablemente sabes el que no tienes que hacer. Pero sigues buscando a todo hora el que sí que tienes que hacer, buscando nuevas maneras de motivar e inspirar.
"No me gustan los equipos monolíticos, sólo de corbata o sólo mujeres"
Con todo ello, en que dirías que ha evolucionado tu manera de liderar?
Ha cambiado en un aspecto importante. Cuando eres más joven quieres las cosas mucho más rápidas, te desesperas antes. La madurez te da la tranquilidad y el elemento del tiempo. Yo soy muy rápida a querer aplicar la visión que tengo y he aprendido que una cosa es el que yo quiero y la otra que las personas lo puedan hacer.
Más allá del cambio en las herramientas que tenemos al alcance, cómo ha cambiado el liderazgo de equipos respeto hace 25 años?
Ha cambiado sobre todo el que las personas esperan del trabajo. Hace 25 años las personas iban a un entorno empresarial para quedarse muchos años. La carrera profesional coincidía con la carrera dentro de una empresa. Esto ha cambiado drásticamente, por los jóvenes las empresas son un elemento más para cubrir sus expectativas. La carrera la puerta un consigo mismo, se trabaja por un mismo. Nos vamos sumando a las organizaciones siempre y cuando los proyectos nos atraigan. Por lo tanto, sabes que podrás atraer el talento por proyectos y durante un tiempo determinado.
El momento del estallido de las puntcom te coge al Deutsche Bank. Es entonces que te das cuenta del potencial de la digitalización?
Totalmente! Los primeros proyectos que hago en Internet son los de banca. Empezamos a ver como digitalizando los accesos entramos en un mundo absolutamente nuevo. Cosas que costaban mucho en banca, la tecnología las favorece y da una mejor experiencia. En aquel momento visualizamos unas posibilidades infinitas de la aportación que la digitalización puede ofrecer a las personas.
Es un punto de inflexión a tu carrera?
Sin duda. Me digitalizo en aquel momento. Mi carrera vendía de un camino de marketing relacional y al Deutsche Bank entré como directora de marketing cuando la única inversión que se hacía era la esponsorització de un equipo ciclista. Cambiamos toda la estrategia a un marketing personalizado y segmentando. Hicimos los primeros correos electrónicos y a trabajar el email marketing. Aquí claramente cambio y entiendo que el marketing relacional con la digitalización puede ir mucho más rápido. Mi responsabilidad en el banco era la innovación, encontrar maneras diferentes de hacer banca cuando yo no era banquera. Desde entonces ya no me he separado de Internet.
"Cuando eres más joven quieres las cosas mucho más rápidas, te desesperas antes"
De esto ya hace unos cuántos años pero todavía hoy seguís haciendo desde Íncipy e Inesdi mucha tarea de divulgación sobre la digitalización. Cómo puede ser que todavía haga falta "vender" sus ventajas?
Ahora mismo soy en un foro de una cincuentena de empresarios hablando de nuevo de esto... Así que imagina! El que pasa es que Internet no ha dejado de avanzar y a los directivos a menudo los cuestan las innovaciones rápidas. En la fase de la Internet 1.0 se digitalizan los procesos, la informática de sistemas ya hacía tiempos que estaba. Las empresas estaban acostumbradas a que la parte digital tuviera mucho que ver con los procesos. Pero en una segunda fase la digitalización ha cambiado la comunicación entre las personas y ahora ya va en un paso más hacia la inteligencia artificial. Todo va a una velocidad que nunca habíamos tenido, las empresas por primera vez van por detrás de las personas. Los directivos entendieron que Internet digitalizaba procesos, pero costa de entender que Internet cambia los modelos de negocio. El que está tocando ahora es esta fase, que está costando mucho ver. Los departamentos de sistemas hicieron su trabajo, pero esta nueva tarea lo tienen que hacer los directivos.
Siempre insistís que tiene que ser el CEO quién lidere la transformación digital. No lo acaban de ver claro?
Sin CEO no hay transformación digital, pero el problema no es que ellos no lo vean sino la dificultad de cambiar la cultura de las personas. El principal freno de este cambio son las mismas personas de la organización. Tenemos que cambiar la manera de hacer las cosas, que se han hecho de una determinada manera durante muchos años. El que vemos son organizaciones postindustrials, venimos de un modelo que corresponde a esta época y ha cambiado relativamente poco la organización de las empresas y los estilos de liderazgo. Estudié hace 30 años, miro mis hijos o los de mis amigos que estudian Económicas y no ha cambiado mucho el que se enseña. Todos, tengamos la edad o la posición que sea, tenemos que cambiar. No queda ningún sector donde no haya impactado la digitalización.