El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, ha evitado pronunciarse sobre la sentencia del procés. "Como comprenderán, me debo a mis accionistas, a mis clientes y a mis empleados, y velamos por el bienestar financiero de los mismos", ha asegurado durante su intervención de este lunes en el X Encuentro del Sector Financiero en Madrid organizado por KPMG en colaboración con Expansión, American Express y Microsoft. De este modo, ha rechazado pronunciarse sobre cuestiones políticas y judiciales, coincidiendo con la publicación de la sentencia en la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.
Gual: "Como comprenderán, me debo a mis accionistas, a mis clientes y a mis empleados, y velamos por el bienestar financiero de los mismos"
Durante la ponencia Retos del nuevo modelo de negocio bancario, Gual ha reconocido que las fusiones bancarias permiten ganar escala y ser más eficientes en costes y comercialmente, pero también ha indicado que "no son un tema sencillo y distraen mucho". En este sentido, el president de CaixaBank ha explicado que una adquisición puede ser una vía a considerar por "algunas" entidades ante la presión que sufren por no tener la suficiente rentabilidad de manera estructural, por lo que cree que puede darse una nueva oleada de consolidación.
"Es un tema muy de moda", ha remarcado, aunque ha recordado que en España ya se produjo un "gran" proceso de reestructuración con la consecuente reducción de oficinas o de empleo. "Ha sido muy significativa en relación con otros países, aquí ya se ha hecho mucho", ha precisado. Asimismo, el presidente de CaixaBank ha asegurado que las fusiones a nivel paneuropeo son muy difíciles, a pesar de que a las autoridades supervisoras les gustaría verlas.
Las fusiones como tema de moda
"Es una manera de distribuir riesgos, pero existen grandes impedimentos, como en temas de legislación, mercantil, del consumidor, de insolvencias o en términos de capital y liquidez", ha añadido. Respecto al capital, Gual ha pedido no comparar puramente los niveles de CET1. "No es la manera más correcta ni adecuada", ha aseverado. En su opinión, lo que se debe tomar en cuenta es el diferencial del capital que tiene una entidad con el exigido de forma individual por el regulador.
Gual: "La estabilidad regulatoria es necesaria"
A su vez, también ha destacado que la banca europea y española se ha capitalizado "mucho" durante los últimos años, si bien ha reconocido que el coste del capital sigue estando al mismo nivel que hace seis o siete años."Esto se debe a que el mercado tampoco sabe muy bien cuándo va a terminar esta espiral de mayores requisitos regulatorios, sobre todo en términos de capital", ha criticado. "La estabilidad regulatoria es necesaria", ha recalcado.
Por último, el primer ejecutivo de CaixaBank ha criticado el contexto de bajos tipos de interés, al asegurar que les "complican la vida", aunque ha destacado que no les impide dar buenos resultados. "Creo que la evidencia es que la política monetaria ha llegado a unos extremos que empieza a poner en cuestión su utilidad ante los problemas que enfrenta la economía europea", ha asegurado.
Así pues, CaixaBank descarta modificar los objetivos de su plan estratégico, que busca alcanzar una rentabilidad ROTE del 12% para el final del periodo. Sin embargo, sí que ha reconocido que en caso de que este objetivo caiga en torno al 10%, activarán las palancas necesarias para conseguir la rentabilidad propuesta.