En un país prolífico en grandes festivales de música que sirven de escaparate internacional por su capital, todavía queda un rincón con carácter propio y capacidad para atraer a gran figuras mundiales. Lejos de los focos de Barcelona y a un ritmo más pausat que los frenéticos Primavera Sound y Sónar , persiste por decimotercero año el Festival de los Jardines de Ningún Roig. Esta es la segunda edición organizada por Clipper's Live, y su director, Juli Guiu, reconocía durante la presentación que la sensación al trabajar con un producto así es de "tranquilidad". Tranquilidad de empezar con el 80% de las entradas vendidas, en buena parte porque la calidad del producto está, como mínimo, al mismo nivel que el cartel.
Detrás del buen nombre cultural del acontecimiento, hay ahora Clipper's Live, creada el 2008. Es la división de producción de esveniments musicales de Ediciones Musicales Clipper's, presidida actualmente por Juli Guiu, pero que se remonta al 1952 y a la propia historia de la familia Guiu. Esta editora, con sede central en Barcelona, también cuenta con oficinas en Madrid y Lisboa, y con acuerdos comerciales en México, Latinoamérica, Asia, Europa y EE.UU..
La consolidación del festival de Ningún Roig es tal que no se inmuta ante noticias que harían tumbar cualquiera otro cartel. El plato fuerte de este año tenía que ser la inauguración a cargo de Elton John, que se canceló por la apendicitis que ha afectado al cantante británico. Los catalanes Manel han cogido el relevo, también con sold-out.
"Son géneros muy diferentes, pero nosotros intentamos que cada artista sea ninguno de cartel en su estilo", explicaba Guiu. Y es que Ningún Roig no es un festival de género, sino de artistas. Así se entienden los plenos ya garantizados de artistas tan distantes como Mark Knopfler, Diana Krall y Pablo Alborán.
Experiencia única
Atribuir el éxito de Ningún Roig únicamente al cartel de artistas, pero, sería reduccionista. Guiu sabe que el éxito y el buen nombre del festival también recae en el espacio único en que se organiza, y por eso apuesta para profundizar en esta experiencia. "La experiencia tiene que ser única desde el momento en que llegas hasta el final del concierto", declaraba en una entrevista reciente.
Y esta "experiencia única" está directamente relacionada con su entorno, no sólo con el espacio único de los jardines, sino también con el Baix Empordà y la Costa Brava. Sólo así se entiende la atención a aspectos que en otros festivales musicales son secundarios, como la gastronomía, a cargo de la Bodega de CanRoca .
El año pasado, también bajo las órdenes de Guiu, el festival sumó 41.000 espectadores y una ocupación del 88%.
Juli Guiu, la firmeza de Ninguna Roig
El director del festival apuesta para seguir haciendo de los conciertos una experiencia muy vinculada con la en torno a l'Empordà
05
de Agosto
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2013
Act.
07
de Abril
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2014