Núria Base es presidenta del Grupo Base, una multinacional de moda con larga tradición familiar que factura 70,5 millones de euros y ha llegado a vender 300.000 polos de Lacoste por año. Lo hemos encontrado este martes en la comida mensual de la Aijec en el hotel Grand Marina, donde ha explicado a los jóvenes empresarios su filosofía de vida y los ha aconsejado sobre la semilla del éxito para salir adelante un negocio. Firme defensora de las mujeres y del regreso social de las empresas, augura que "la época de Da Vinci ha desaparecido" y "el mejor todavía está para venir".
"Hablar de mí quizás es lo más difícil", confiesa. Base es la tercera generación "de una familia con fábrica" dedicada al textil. Lo trae a la sangre y reivindica haber nacido con la cultura del esfuerzo, la honestidad y la ética bajo la mano. De su padre, aprendió la ilusión y la pasión por el trabajo así como a "cargarse de razones."
Sin plan pero con metodología
Estudió Biología porque un profesor la deslumbró "", se dedicó a la investigación y, incluso, creó una empresa de servicios en la industria farmacéutica. "No hice nunca ningún plan de carrera, siempre he tenido un espíritu de querer aprender y hacer cosas", reconoce. El año 1998 hizo un tumbo a su vida para incorporarse al negocio familiar.
De la primera etapa de vida, guarda todavía la metodología de trabajo: "Orden, observación, rigorositat, trabajo de campo, en equipo, análisis de datos, conclusión de resultados y presentación allá donde haga falta". Insiste que la clave es sentirse cómodo con un mismo. Tanto por el que se llama como por el que se hace. "Es importante aplicar una gran dosis de lógica, sentido común y sentido del humor. Muy PowerPoint pero al final, esto qué significa?", se pregunta.
Procura infundir preparación y calma dentro de una plantilla formada por más de 450 personas: "El fuego está controlado". Tampoco se identifica como genio sino como empresaria que tiene "las armas preparadas" para tener "más posibilidades de ganar". Reconoce también tener siempre "el radar puesto" porque no quiere dejar nunca de aprender.
El regreso social
Antes de dedicarse a la moda estuvo trabajando un año en los Estados Unidos. Concretamente, en Kansas City. Allá aprendió dos lecciones de vida: el significante de la propiedad intelectual y el regreso social. "Todo el mundo del laboratorio dedicaba horas a hacer algo por la sociedad", recuerda.
Es la primera mujer a haber entrado a la junta de Fomento del Trabajo y al formar parte del consejo de administración de Feria Barcelona
Más allá de ejercer una profesión "de manera honesta" o crear puestos de trabajo, emplaza los empresarios a transferir conocimiento a través de patronales, oenegés, mentoring o incluso comunidades de vecinos. Defiende que "no somos conscientes que podemos ayudar pero siempre lo podemos hacer". Base asegura que la responsabilidad social existe mucho antes que le pusieran nombre.
La lucha de las mujeres
Una de sus principales causas de lucha es la consolidación de las mujeres en el mundo empresarial. A pesar de que admite que le da rabia, es la primera en muchas cosas. Por ejemplo, al haber entrado a la junta de Fomento del Trabajo o la única al formar parte del consejo de administración de la Feria de Barcelona. Quizás por eso tiene una lista de mujeres preparada a su despacho.
Confiesa que cuando la trucan para participar en un acto, siempre tiene un nombre a punto y si ve una fotografía de empresarios al diario donde no sale ninguna mujer, no duda al escribir una carta para quejarse. "Porque se nos conozca, tenemos que ser visibles", explica.
Ni verano ni invierno
Ahora mismo, no piensa en el relevo generacional y esto que en su caso "emprendida y familia van muy unidas" porque "conocer la filosofía es una ventaja". La crisis ha cambiado la mentalidad de los clientes de la moda, puesto que ahora están acostumbrados a "comprar con descuento continuo". Una cultura, a parecer suyo, difícil de cambiar y dónde simplemente queda adaptarse. "El Black Friday ha llegado para quedarse", explica.
La moda no se para y "todo se hace obsoleto rápido". Las temporadas por estaciones son un buen ejemplo. Según Base, "con el cambio climático y las climatizaciones, podemos ir vestidos prácticamente igual todo el año. Seguimos vendiendo polos de manga corta en invierno".
"El 'ecommerce' sólo funciona si inviertes al generar tráfico para conocer la marca"
Esto de los cambios también se aplica al ecommerce sobre el que concreta que "sólo funciona si inviertes al generar tráfico para conocer la marca". De no ser así, aconseja quedarse con la tienda de toda la vida. De hecho, defiende que el éxito se basa en la diferenciación: "En cualquier sector, hay sobreoferta de productos. Tienes que buscar algo diferente y mejor."
"La época de Leonardo da Vinci ha desaparecido", reitera. Núria Base, mujer y empresaria, tiene bastante con seguir su filosofía de vida, conocer su core businesss y confiar en su equipo.