09
de Diciembre
de
2016
Act.
12
de Diciembre
de
2016
Cuando tienes de todo es fácil no pensar que el jabón, el detergente o la pasta de dientes también son de primera necesidad. Es el que pensaron un grupo de personas solidarias que hace ahora 18 años decidieron constituirse como asociación cívica. "Intentamos recuperar cualquier excedente de empresa de productos de higiene personal, de productos del hogar, zapatos nuevos..., y ahora por la Navidad también juguetes. Es decir, todo el que necesita una familia en casa", apunta Emilia Català, portavoz de La Nave. El año pasado recogieron 2.100 toneladas de productos de higiene por el hogar, 800 toneladas de productos de higiene personal, 150.000 prendas de ropa y un total de 15.000 juguetes.
En diciembre quieren hacer un llamamiento a las empresas del territorio porque colaboren dando estos productos que, a pesar de estar en buen estado, no entran en su circuito de venta y distribución. Además, "pueden desgravarse estas donaciones", apunta la portavoz. Actualmente cuentan con 70 empresas pero nuncason suficientes, explica Catalán. "La mayoría prefieren estar al anonimato. Son grandes empresas que realmente tienen excedentes de todo tipos y con sus donaciones damos cobertura a unas 150 entidades cada mes. Damos cobertura a todo el que podemos pero necesitamos mucho material y no son productos baratos porque los pueda dar un particular", argumenta Catalán.
Cada mes una veintena de personas voluntarias trabajan a la asociación para repartir entre las entidades las numerosas donaciones. Durante el 2015 han sido beneficiarios de la suya ayuda entidades como la Obra Social Corazón de Maria, de Barcelona, en que han repartido productos de limpieza de la casa e higiene personal para unas 40 familias, aproximadamente. También han dado a la parroquia San Pedro del Masnou, a la de la Virgen María de l'Hospitalet de Llobregat o a la asociación Antisida Cataluña, entre otras. El perfil es muy variado pero la necesidad es la misma, en definitiva.
Bolsas especiales por Nadal
Ahora, con la celebración de Nadal, trabajan en la preparación de las donaciones preparando unas bolsas especiales, las de Autoestima, que hacen llegar en un embalaje especial a las familias y abuelos y abuelas, todos en situación de exclusión social. "Aquí es donde ponemos los productos algo más cuidados, como una colonia, por ejemplo. Un tipo de regalo". Este año calculan queharán unas 34.000 bolsas de Autoestima que ya están repartiendo para poder distribuirlas. En total, su trabajo acaba beneficiando unas 48.000 personas.
En cuanto al reparto, es La Nave la que se encarga del transporte de los palets desde las emprendidas donantes hasta sus almacenes y quienes, a posteriori, también lo hace llegar a las entidades sociales beneficiarias repartidas por la demarcación de Barcelona. Revisan el material, sacan etiquetas y se aseguran que los productos dados no acaben formando parte de ningún mercadet o establecimiento de venta ambulante. "Hace 18 años que estamos trabajando y nunca ha pasado nada ni ha salido nada a los mercadets. Como la distribución la hacemos mensualmente, nunca tienen suficiente stock para hacer nada inadecuado y cada donación se recoge con un certificado", apunta Catalán.
La Nave, el almacén de la cual se ubica en la Zona franca de Barcelona, cuenta con un presupuesto anual de entre 50.000 y 60.000 euros, recaudados mediante subvenciones, como la que reciben del Ayuntamiento de Barcelona, o donaciones particulares. Su dedicación permite que mensualmente unas 12.000 familias catalanas que lo están pasando muy mal reciben productos básicos, una donación diferente de la que pueden encontrar en el Banco de los Alimentos, donde la donación se centra en alimentación. Además, ahora también se esfuerzan a pedir a las emprendidas productos por el menaje del hogar, como toallas o sábanas que puedan ser de utilidad por estos usuarios en situación de pobreza. Todo es de utilidad.
En diciembre quieren hacer un llamamiento a las empresas del territorio porque colaboren dando estos productos que, a pesar de estar en buen estado, no entran en su circuito de venta y distribución. Además, "pueden desgravarse estas donaciones", apunta la portavoz. Actualmente cuentan con 70 empresas pero nuncason suficientes, explica Catalán. "La mayoría prefieren estar al anonimato. Son grandes empresas que realmente tienen excedentes de todo tipos y con sus donaciones damos cobertura a unas 150 entidades cada mes. Damos cobertura a todo el que podemos pero necesitamos mucho material y no son productos baratos porque los pueda dar un particular", argumenta Catalán.
Cada mes una veintena de personas voluntarias trabajan a la asociación para repartir entre las entidades las numerosas donaciones. Durante el 2015 han sido beneficiarios de la suya ayuda entidades como la Obra Social Corazón de Maria, de Barcelona, en que han repartido productos de limpieza de la casa e higiene personal para unas 40 familias, aproximadamente. También han dado a la parroquia San Pedro del Masnou, a la de la Virgen María de l'Hospitalet de Llobregat o a la asociación Antisida Cataluña, entre otras. El perfil es muy variado pero la necesidad es la misma, en definitiva.
Bolsas especiales por Nadal
Ahora, con la celebración de Nadal, trabajan en la preparación de las donaciones preparando unas bolsas especiales, las de Autoestima, que hacen llegar en un embalaje especial a las familias y abuelos y abuelas, todos en situación de exclusión social. "Aquí es donde ponemos los productos algo más cuidados, como una colonia, por ejemplo. Un tipo de regalo". Este año calculan queharán unas 34.000 bolsas de Autoestima que ya están repartiendo para poder distribuirlas. En total, su trabajo acaba beneficiando unas 48.000 personas.
Asociación Cívica La Nave. Nos movemos por las personas. from btcom donde Vimeo.
En cuanto al reparto, es La Nave la que se encarga del transporte de los palets desde las emprendidas donantes hasta sus almacenes y quienes, a posteriori, también lo hace llegar a las entidades sociales beneficiarias repartidas por la demarcación de Barcelona. Revisan el material, sacan etiquetas y se aseguran que los productos dados no acaben formando parte de ningún mercadet o establecimiento de venta ambulante. "Hace 18 años que estamos trabajando y nunca ha pasado nada ni ha salido nada a los mercadets. Como la distribución la hacemos mensualmente, nunca tienen suficiente stock para hacer nada inadecuado y cada donación se recoge con un certificado", apunta Catalán.
La Nave, el almacén de la cual se ubica en la Zona franca de Barcelona, cuenta con un presupuesto anual de entre 50.000 y 60.000 euros, recaudados mediante subvenciones, como la que reciben del Ayuntamiento de Barcelona, o donaciones particulares. Su dedicación permite que mensualmente unas 12.000 familias catalanas que lo están pasando muy mal reciben productos básicos, una donación diferente de la que pueden encontrar en el Banco de los Alimentos, donde la donación se centra en alimentación. Además, ahora también se esfuerzan a pedir a las emprendidas productos por el menaje del hogar, como toallas o sábanas que puedan ser de utilidad por estos usuarios en situación de pobreza. Todo es de utilidad.