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La tecnología sanitaria 'Made in Barcelona'

El Hospital Clínic y Leitat lideran el proyecto que opta a los Next Generation EU con una inversión de más de 50 millones

Hospital Clínic Barcelona CATE
Hospital Clínic Barcelona CATE
Barcelona
27 de Abril de 2021
Act. 27 de Abril de 2021

El Clinical Advanced Technologies Institute (CATI) no será un hub más al escenario de la innovación en Catalunya y de la tecnología sanitaria porque nace con vocación internacional y tiene unas sólidas bases entre sus impulsores, el Hospital Clínic de Barcelona y el centro tecnológico Leitat. Por lo tanto, el expertesa ya está. El que hace falta ahora porque el centro sea exitós es encajar el otra pieza clave del puzzle, las empresas.

Con algunos proyectos empresariales de R+D+Y ya detectados, lo CATI arrancará luego que lleguen los fondos europeos Next Generation EU, a los que opta con un esquema de infraestructuras y tareas que supone una inversión inicial de casi 54 millones de euros. Este coste incluye las instalaciones que ocuparán unos 8.000 metros cuadrados y equipar y dinamizar el centro por 21,7 millones más.

El edificio se construirá en la calle Urgell de Barcelona, en un espacio que actualmente ocupa la parroquia de Sant Isidor, gracias a la colaboración de la Arquebisbat de Barcelona que ha cedido el derecho de superficie por 75 años. Mientras la obra no esté terminada, puesto que el edificio se acabará el 2024, "las iniciativas empresariales se llevarán a cabo en espacios relacionados con Leitat –en sus 4 centros de investigación- y con la en torno a la ciudad de Barcelona donde hay bastantes institutos con infraestructuras preparadas", explica a VIA Empresa el doctor Luciera Donoso, director del Centro de Diagnóstico por la Imagen del Clínic y coordinador del proyecto.

Donoso: "Lo más importante es hacer valer el conocimiento y sobre todo la emprendeduría local"

El CATI, como centro de referencia internacional dedicado a la innovación, se centrará en la tecnología sanitaria. "En el campus del Clínic ya tenemos otras instituciones que alcanzan otros ámbitos de investigación médica y seguro que encontramos sinergias porque lo más importante es hacer valer el conocimiento y sobre todo la emprendeduría local", manifiesta Donoso y subraya que Leitat es un partner adecuado porque ya acoge centros de investigación e innovación de empresas referentes en diferentes áreas, que trabajan en desarrollos diversos en el entorno sanitario y el Digital Health, por ejemplo.

Los objetivos principales del CATI se pueden definir, en términos generales, al potenciar el conocimiento tecnológico y transferible en tecnología sanitaria, y vincularlo con el sector industrial. La iniciativa quiere ser también una fuente para generar puestos de trabajo cualificados, retener talento y aumentar la competitividad del sector de la salud. Es por eso que contará también con la participación de la Universitat de Barcelona (UB), el Hospital Sant Joan de Deu de Barcelona (HSJD) e Instituto de Investigaciones Biomédicas Augusto Pino y Sunyer (IDIBAPS), dependiendo del Clínic. Y tendrá otros partners institucionales cómo Barcelona Institute for Global Health, Barcelona Supercomputing Center, Barcelona ßeta Brain Research Center, Centro de Medicina Comparativa y Bioimatge de Catalunya (iGTP), Centro para la Integración de la Medicina y las Tecnologías Innovadoras CIMTI, Consorcio de Salud y Social de Cataluña, FAD Fomento de las Artes y del Diseño, Fundación Barcelona Mobile WorldCapital , Fundación Pasqual Maragall, IESE Business School, Universidad de Navarra y Unión Catalana de Hospitales.

En un primer testaje, el equipo impulsor del centro ha localizado ya unos seis proyectos empresariales que seguro podrían desarrollarse a través del CATI y está en conversaciones con las respectivas compañías, "pero seguro que hay muchos más, a pesar de que no es fácil encontrar pymes, pero sí grandes corporaciones –algunas internacionales- que hacen de empresas tractores". "Las áreas que hemos explorado dentro del hospital y con Leitat para focalizar el centro son la impresión 3D (en todas las vertientes), robots, el tema de la logística –estamos lejos de disponer de una avanzada gestión de todos los stocks de materiales, por ejemplo-, el tema de sensores y monitorización de los datos y el apartado Digital Health relacionado con soft y análisis de imagen médica, así como el desarrollo de dispositivos médicos", concreta el doctor. Unos desarrollos en los cuales ya se aplica la Inteligencia Artificial y en los que será una buena aportación las infraestructuras de despliegue del 5G.

Donoso: "Intentamos impulsar la innovación propia y conseguir que esta innovación tenga resultados en términos de transferencia tecnológica"

Donoso posa por ejemplo los trabajos de colaboración que el Clínic tiene la compañía iVascular de Sant Vicenç dels Horts, una de las dos únicas empresas que hay a Europa para el desarrollo de dispositivos médicos avanzados y terapias para el tratamiento de dolencias vasculares, para testar y validar sus productos y que, sin duda, estará vinculada al CATI.

En el tema de actividades, la prioridad del centro tiene que ser generar conocimiento transferible y tecnológico, con vinculación al sector industrial y generar estas relaciones e incorporar colaboraciones siendo un instituto el máximo de abierto posible a compañías nacionales e internacionales y no solo a otras instituciones sanitarias u otros ámbitos. Una tarea en la cual Leitat está muy experimentado, mientras que el Clínic tiene una larga tradición académica y de investigación y desde hace más de 10 años "intentamos impulsar la innovación propia y conseguir que esta innovación tenga resultados en términos de transferencia tecnológica".

La plantilla del CATI estará formada por varias especialidades profesionales, no solo médicas o sanitarias, y estará a disposición de los diferentes proyectos que se salgan adelante. Además, añade el doctor, "tenemos una cantera de gente muy muy formada y competitiva a escala europea, solo hay que observar cuál es la relación costes/nivel de preparación de los profesionales de todas las disciplinas -informática, matemáticas, ingeniería, biomédica, bioquímica, biología...", opina Donoso.

El modelo de gestión del CATI será "privado non provecho" y se sustentará previsiblemente –"a pesar de que todavía se tienen que concretar algunos aspectos", dice Donoso- en el modelo de Leitat, entidad privada sin ánimo de lucro, los recursos de la cual provienen en un 60 % de los contratos de cooperación con compañías privadas, otro porcentaje se obtiene a través de los fondos competitivos y una pequeña parte de subvenciones.

Cómo recordaba el doctor Josep M. Campistol, director general del Hospital Clínic, durante la presentación oficial del centro, "el impulso de CATI tiene que ser una gran oportunidad para coordinar proyectos entre multinacionales, empresas locales y emprendeduría para generar tecnología conjunta y nuevos modelo de negocio con financiación privada, que puedan apoyar también a startup y potenciar las pymes locales".

Campistol: "El impulso de CATI tiene que ser una gran oportunidad para coordinar proyectos entre multinacionales, empresas locales y emprendeduría"

El que hará lo CATI será básicamente buscar estas sinergias con el mundo sanitario/académico y con el de la industria biomédica. Esto es una parte, pero el Hospital Clínic también tiene mucho de interés (vinculado con las tareas que se llevan a cabo en su campus) con las iniciativas de innovación de acuerdo ambl concepto Technology-Readiness-Level (TRL), es decir, en función del nivel de maduración de las tecnologías en estado de desarrollo según la escala propuesta por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos. Es una escala que va de1 a 10, en qué el que está en el nivel 1 es "una idea brillante", y en el 10, una tecnología que ya está probada y que se quiere expandir. "El Hospital Clínic en su tarea de investigación e innovación tiene muchos proyectos de los niveles 1 a 4, algunos de entre el 5 y 6, y pocos a partir de 7, y el que nos interesa es trabajar en proyectos de las fases más avances", expone Donoso y concreta que es en esta fase de desarrollos a la que se enfocará lo CATI porque va dirigido a la transferencia de la tecnología a los mercados.

Por lo tanto, no se trata de constituir una nueva incubadora tecnológica, "no se trata de alquilar un espacio a las empresas dentro de uno en torno a innovación, sino cerrar acuerdos con compañías que contraten el espacio, e infraestructuras y personal de investigación y desarrollo para llevar a cabo sus proyectos con una confluencia de intereses: innovación tecnológica en el ámbito sanitario y crecimiento de las empresas involucradas".

De hecho, el centro ya cuenta con el apoyo de compañías tan diversas cómo Aidoc, AIS Channel, Better Care, CANON Medical Systems, Carl Zeiss Iberia, Cellnex, DRAGER, FC Barcelona- Barça Innovation Hub, Ficosa, Fresenius, GE Precision Healthcare LLC, HIPRA, iVascular, Medtronic Ibérica, Methinks AY, Predictheon, Seidor, SENER Diagnostics, Siemens Healthineers y Teladoc Health.

El equipo que lidera el doctor Donoso todavía está estudiando la definición del diseño jurídico final del instituto CATI y cómo instrumentalizar la cooperación publicoprivada que surja, sea determinándola proyecte a proyecto o estableciendo unas bases que, por ejemplo, se traduzcan en la participación accionarial parcial en el capital de las compañías resultantes de los respectivos desarrollos tecnológicos o vengan por la vía de los royalties.