Lluís Soldevila (Barcelona, 1970) es profesor de Operaciones, Innovación y Data Sciences en Esade. De formación ingeniero informático, también es consultor y formador de habilidades directivas de alto rendimiento. Ha trabajado durante 15 años en Deutsche Bank en más de siete países diferentes. Entre la banca, la informática y la tecnología, vivió la caída de Lehman Brothers desde Nueva York. Tiene dos libros: Éxito se escribe cono A y Morder el Hielo (Editorial Profit). Y un tercero sobre liderazgo digital que saldrá muy pronto del horno... VIA Empresa le entrevista entre whatsapps de su editor para hablar de cómo ser un sherpa digital, el liderazgo, la triple A (Acción, Actitud y Autoconocimiento), SAPOs en un mundo VUCA o el tándem líquido formato por Zygmunt Bauman y BruceLee... "La transformación digital es como el sexo en la adolescencia. Todo el mundo habla de ello, mucha gente no sabe lo que es y pocos lo han hecho", asegura.
Te autodefines como Sherpa.
Se habla mucho de acelerar empresas, pero yo acelero la formación, la actitud o la motivación de las personas. Quiero que saquen su mejor versión personal y profesional. Todo muy concreto y objetivo con teorías, herramientas y fórmulas. Si aceleras personas, aceleras equipos y también empresas. No soy coach porque dicto direcciones y no utilizo ni su marco ni sus técnicas. El sherpa no es protagonista y está en un segundo plano, pero ayuda y dice si se sube hoy o no a la montaña.
Cuáles son tus referentes?
Cuando se critican los jefes, me pregunto: hay algún equipo de fútbol sin entrenador? Claro que hacen falta jefes porque el liderazgo es necesario. Yo he tenido una gran suerte y es tener muy buenos jefes. Te diré dos nombres. El primero es Miquel Montes que me fichó con 25 años, creyó en mí, tenía una gran actitud y visión. A la hora de promocionarme, me dijo: "Te saldrá bien, pero si no te sale bien tienes que pensar que es culpa mía porque soy yo quien me he equivocado". Y el segundo es Jim Horth que es de las mejores personas que hay en este mundo. En el Deutsche Bank todo el mundo lo quería tener de jefe porque es un fuera de serie con una gran personalidad. De hecho, nos penalizaba si nos quedábamos más tarde de las 19 de la tarde.
Viviste la crisis de Lehman Brothers desde Nueva York.
Es cómo si hubiera estado en 10 empresas diferentes. La mentalidad de consultor es cambio, rapidez y urgencia. Todos los consultores vamos acelerados por la vida. Fui a Nueva York a abrir la oficina de GFT, la filial tecnológica de Deutsche Bank durante el 2008. Tenía mi pareja aquí, pero la apuesta profesional era potente. Fue muy duro. Momento y lugar inadecuado. El 2010 decidí que quería ser formador de personas.
"A menudo no cambiamos porque tenemos miedo de 'morder el polvo', pero tenemos que morder el hielo"
La triple A: Acción, actitud y autoconocimiento.
A menudo no cambiamos porque tenemos miedo de morder el polvo, pero tenemos que morder el hielo que es más atractivo. El cambio en mayúsculas es el cambio digital. Estamos en la época de la transformación digital, pero las empresas se focalizan en tecnología y se olvidan de la actitud, el mindset y de la cabeza.
Cómo es el líder digital?
Tú eres un líder digital y yo también. Las 10 características del líder digital son: digitabetización (alfabeto digital), visión, intraprenedoria (camino difícil), autoconocimiento (DAFO personal), agilidad, presencia, comunicación, formación a lo largo de la vida, equipo y red. Ahora bien, mi generación no es capaz de digerir qué quiere decir digital. Digital no es sólo un iPhone... Es una manera de hacer. Antes el mundo era sólido, después se dijo que era líquido...
La sociedad líquida de Zygmunt Bauman.
O el Be water my friend de Bruce Lee. Tenemos que ir un paso más allá, el mundo es gaseoso porque incluso el volumen puede cambiar. Las tecnologías son exponenciales y por lo tanto, tienen aceleración. Todos tenemos que ser digitales.
Y por qué no lo somos?
Lo más importante de la transformación digital no es la palabra digital sino transformación. No podemos ser ágiles como empresa si no dotamos nuestros trabajadores de flexibilidad laboral. No somos digitales si no nos adaptamos a los cambios de forma rápida. No somos digitales si no dejamos que los trabajadores tengan iniciativa. No somos digitales si no sabemos hacia donde va la empresa. No somos digitales si no aprendemos de forma constante.
Y por qué no lo aprendemos?
Es un mindset. Reprogramar una mentalidad. Vivimos en un mundo VUCA que es una palabra militar norteamericana que implica volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad. Pero, necesitamos visión, comprensión, claridad y agilidad. Somos SAPO (sencillo, absoluto, preciso y ordenado) viviendo en un mundo VUCA. Seres analógicos en un mundo digital. Las empresas se lo tienen que creer y definir una estrategia para saber qué quiere decir digital para ellos y adaptarlo a los trabajadores.
El objetivo es reprogramar el mindset.
Incluso podemos medir el grado de emprendeduría de una empresa. Emprender en Coca-Cola no es lo mismo que emprender en Mango. Identificamos un grupo dentro de la empresa que es el agente de cambio que acostumbra a ser aproximadamente un 1% de una plantilla de 2.000 trabajadores. Se necesitan los evangelistas del cambio. Les hacemos una formación intensiva, les seguimos durante 100 días y les marcamos objetivos hasta que son unas auténticas máquinas de cambio. Es la estrategia de la mancha de aceite.
"En una empresa se necesitan evangelistas del cambio"
La empresa cambia los trabajadores o los trabajadores cambian la empresa?
Cambiar la empresa de arriba abajo no funciona. Necesitamos gente enamorada del cambio y que venda el cambio al resto. Arriba sólo hay SAPOs que tienen que ser candidatos al contagio. Estoy a favor del liderazgo compartido, pero nunca me casaré con ningún tipo de liderazgo. El liderazgo es una multiplicación de cómo eres, a quien lideras y cuál es la situación. El café para todos en liderazgo es la fórmula perfecta del desastre. También hay situaciones críticas donde se tiene que ser jerárquico. Por qué el Girona gana al Madrid o al Atlético? Por actitud. Cuando nos juntamos, hay un incremento, una energía... Pero después hay conflictos y el rendimiento baja. A la pareja le pasa lo mismo con el enamoramiento y la crisis. Nos tenemos que poner de acuerdo y establecer un marco de colaboración durante el choque de placas tectónicas.
Una crisis no se tiene que reprimir sino gestionar.
Las crisis son necesarias y el líder tiene que ayudar dentro del proceso de normalización. Si se sale con éxito, el alto rendimiento se disparará. Es la etapa de performing. En la fase de crash se le dice storming y se tiene que saber liderar. En cada etapa el líder tiene que actuar diferente. Un líder tiene que tener una cintura brutal, hoy defendemos y mañana atacamos. O te anticipas o irás a contrapie.
Por qué la película Ocean's Twelve es un ejemplo de liderazgo?
En Ocean's, Brad Pitt y GeorgeClooney hacen procesos de selección para crear un equipo de alto rendimiento. El foco es la persona y es muy difícil que lo hagan mal porque sobre todo es un tema de actitud.
Victor Küppers defiende que la actitud multiplica a la hora de ser feliz.
Victor y yo somos buenos amigos. Mi fórmula es: habilidades innatas y habilidades adquiridas. Todo esto dividido por el tiempo. Estamos en un mundo VUCA. Todo esto lo pones dentro de un paréntesis y se eleva por una potencia que es la actitud. Esto hace que la curva sea exponencial.
Según Google, el interés por la transformación digital ha aumentado un 2000% en cuatro años.
La transformación digital es como el sexo en la adolescencia. Todo el mundo habla, mucha gente no sabe lo que es y pocos lo han hecho. Poner tecnología en las empresas no es transformación digital. Odio la palabra informatizar porque no quiere decir nada. Hoy, la tecnología es mucho más barata y mucho más rápida. Yo hice la carrera de informática con una asignatura que se decía redes de ordenadores y no tengo la palabra internet en ningún apunte. Entré en el Deutsche Bank y no había el email como lo conocemos hoy en día.
"No puedes retener el talento, pero sí que te lo puedes cargar"
Hace unos meses conocí también a Sophia ...
Compito con ella. Lo veo muy mal [Ríe]... Nos lo tenemos que tomar con calma. Ahora hay un boom de inteligencia artificial y deeplearning. Lo noto por las prácticas de los alumnos. Un trabajo como el de recursos humanos no es del todo mecanizable porque un robot no puede hacer el 100% del proceso de selección. El futuro no es Terminator, sino Minority Report.
También has hecho diferentes informes sobre el ecosistema emprendedor de Barcelona. Qué tenemos?
Barcelona tiene uno de los mejores ecosistemas emprendedores del mundo y lo tiene muy fácil para atraer talento. Esto es como una rueda, las empresas apuestan, captan talento y es una ciudad con una oferta gastronómica, cultural, climática, estratégica... Todo ello hace que la gente quiera venir a vivir aquí y entonces es cuando las empresas ponen sus sedes y se atrae el talento. No puedes retener el talento, pero sí que te lo puedes cargar. La pyme catalana de la tecnología tiene un problema muy grande y es que pierde el talento porque no puede competir en salarios con Facebook.