30
de Junio
de
2015
Act.
30
de Junio
de
2015
"Si no somos capaces de utilizar la tecnología para satisfacer las necesidades del cliente, estamos perdidos". Lo advierte Lluís Roses, profesor de Eada Business School y coordinador del estudio Nivel digital directivo realizado por esta escuela de negocios, RocaSalvatella y Penteo. Este martes han presentado los resultados de una encuesta dondehan participado más de 600 directivos catalanes de empresas de varias medidas y sectores. La principal conclusión es que la percepción del dominio de las tecnologías que tienen los directivos es más alta que la realidad; y que su orientación ajo cliente en estos términos es actualmente deficiente.
Una cuestión estratégica
"Quién lidera la estrategia digital?", se pregunta retóricamente Lluís Roses. La respuesta sigue siendo los departamentos operativos como el de marketing o TIC, y no los estratégicos. "Seguimos con una estrategia de bajo arriba y no de arriba abajo, como tendría que ser. Esto demuestra que somos en una fase muy inicial y queda muy recorrido para hacer", asegura el profesor de Eada. Roses apunta a la necesidad de invertir esta realidad tal como demuestra el hecho que "muchas empresas que han centrado toda su estrategia digital en el cliente están rompiendo el mercado".
Gerard Vélez, mànager de RocaSalvatella y especialista en competencias digitales, añade que "una de las claves de las empresas más disruptives es la orientación al cliente. No hay ningún directivo que no diga que se orienta al cliente, pero no siempre es verdad". El responsable de RocaSalvatella advierte que "la digitalización empresarial viene muy marcada por la digitalización de los consumidores. Quizás en algunos sectores todavía no se ve tan necesaria porque no ha salido un competidor tan disruptiu". Ahora bien, deja claro que "lse emprendidas tienen que entender que tienen que poner el foco en el cliente, y hacerlo de verdad, no sólo decirlo".
Resistirse a esta digitalización, alertan los autores del estudio, puede comportar la sentencia definitiva para cualquier compañía. "Ya hay estudios que aseguran que el 40% de las empresas del Forbes 500 en 10 años no existirán", recuerda Judith Ferrau, directora de Marketing y Comunicación de Penteo.
Conocimiento correcto, pero sin aplicación
Los datos del estudio muestran que los directivos catalanes tienen un buen nivel de conocimiento digital. Ahora bien, esta percepción a menudo es más elevada de la real. Roses lo define como "creo que sé mucho porque no sé el que desconozco". Además, añade, "saben pero no aplican. El que aplican lo hacen cerca de su zona de confort, pero no a la organización. Esto hace que la ventaja competitiva quede a mucho más largo plazo".
En cuanto a otros aspectos recogidos en el estudio, como la gestión de la información o su investigación, son aptitudes que se dominan pero con matices. "Todavía no son capaces de saber si la información que obtienen en la investigación digital es relevante o no", dice Rosas. Además, constata que "hay un buen uso de los canales digitales, pero sin estrategia de marca. Los directivosestán porque setiene que ser, pero no tienen ningún propósito".
Por otro lado, a pesar de que cada vez se trabaja más en red, "hay problemas a la hora de plantear aspectos como las redes sociales corporativas", asegura el profesor de Eada. A su parecer, "los directivos todavía no saben como traducir el liderazgo en términos digitales".
Los retos de la digitalización
Al fin y al cabo, constata, "a pesar de conocer el tema digital, tienen miedo de utilizarlo". Por eso indica el reto de aplicar las habilidades al entorno y a la organización. Y en un ámbito más corporativo, "de aplicar la tecnología como ventaja competitiva, hay que hacerlo desde arriba formando e incentivando los directivos en el campo digital y permitiéndolos equivocarse".
Gerard Vélez insiste en este sentido que "el comité de dirección tiene que ser consciente que las cosas están cambiante". A pesar de constatar que muchas empresas sehan dado cuenta yquieren poner remedio, "el problema que tienen es que son organizaciones lentas donde aplicar cambios no es sencillo". Y es que además de la misma tecnología, hay otra variable clave: las personas. "Quizás el equipo fue contratado hace años cuando las necesidades eran otras. Por lo tanto, o cambiamos todas las personas o las formamos porque sean capaces de hacer el giro a la compañía", afirma el dirigente de RocaSalvatella.
Una cuestión estratégica
"Quién lidera la estrategia digital?", se pregunta retóricamente Lluís Roses. La respuesta sigue siendo los departamentos operativos como el de marketing o TIC, y no los estratégicos. "Seguimos con una estrategia de bajo arriba y no de arriba abajo, como tendría que ser. Esto demuestra que somos en una fase muy inicial y queda muy recorrido para hacer", asegura el profesor de Eada. Roses apunta a la necesidad de invertir esta realidad tal como demuestra el hecho que "muchas empresas que han centrado toda su estrategia digital en el cliente están rompiendo el mercado".
Gerard Vélez, mànager de RocaSalvatella y especialista en competencias digitales, añade que "una de las claves de las empresas más disruptives es la orientación al cliente. No hay ningún directivo que no diga que se orienta al cliente, pero no siempre es verdad". El responsable de RocaSalvatella advierte que "la digitalización empresarial viene muy marcada por la digitalización de los consumidores. Quizás en algunos sectores todavía no se ve tan necesaria porque no ha salido un competidor tan disruptiu". Ahora bien, deja claro que "lse emprendidas tienen que entender que tienen que poner el foco en el cliente, y hacerlo de verdad, no sólo decirlo".
Resistirse a esta digitalización, alertan los autores del estudio, puede comportar la sentencia definitiva para cualquier compañía. "Ya hay estudios que aseguran que el 40% de las empresas del Forbes 500 en 10 años no existirán", recuerda Judith Ferrau, directora de Marketing y Comunicación de Penteo.
Conocimiento correcto, pero sin aplicación
Los datos del estudio muestran que los directivos catalanes tienen un buen nivel de conocimiento digital. Ahora bien, esta percepción a menudo es más elevada de la real. Roses lo define como "creo que sé mucho porque no sé el que desconozco". Además, añade, "saben pero no aplican. El que aplican lo hacen cerca de su zona de confort, pero no a la organización. Esto hace que la ventaja competitiva quede a mucho más largo plazo".
 |
| El nivel digital directivo varía en función de los ámbitos. EADA |
En cuanto a otros aspectos recogidos en el estudio, como la gestión de la información o su investigación, son aptitudes que se dominan pero con matices. "Todavía no son capaces de saber si la información que obtienen en la investigación digital es relevante o no", dice Rosas. Además, constata que "hay un buen uso de los canales digitales, pero sin estrategia de marca. Los directivosestán porque setiene que ser, pero no tienen ningún propósito".
Por otro lado, a pesar de que cada vez se trabaja más en red, "hay problemas a la hora de plantear aspectos como las redes sociales corporativas", asegura el profesor de Eada. A su parecer, "los directivos todavía no saben como traducir el liderazgo en términos digitales".
Los retos de la digitalización
Al fin y al cabo, constata, "a pesar de conocer el tema digital, tienen miedo de utilizarlo". Por eso indica el reto de aplicar las habilidades al entorno y a la organización. Y en un ámbito más corporativo, "de aplicar la tecnología como ventaja competitiva, hay que hacerlo desde arriba formando e incentivando los directivos en el campo digital y permitiéndolos equivocarse".
Gerard Vélez insiste en este sentido que "el comité de dirección tiene que ser consciente que las cosas están cambiante". A pesar de constatar que muchas empresas sehan dado cuenta yquieren poner remedio, "el problema que tienen es que son organizaciones lentas donde aplicar cambios no es sencillo". Y es que además de la misma tecnología, hay otra variable clave: las personas. "Quizás el equipo fue contratado hace años cuando las necesidades eran otras. Por lo tanto, o cambiamos todas las personas o las formamos porque sean capaces de hacer el giro a la compañía", afirma el dirigente de RocaSalvatella.