El verano del 2012 la emprendida líder en videojuegos casuales multiplataforma, King, abrió un estudio en Barcelona. La apuesta de los creadores del fenómeno Candy Crush Saga para dirigirlo fue Manel Sort (Tàrrega, 1978). Empezó solo, y después de una gran campaña rápidamente tenía 2.000 aspirantes.
"La primera semana concertamos 80 entrevistas", explica a VIAempresa . De estassalió un primer equipo donde "todos eran recruiters. El boca-oreja y la red de contactos ha sido nuestro mejor proceso de selección ".
Actualmente ya cuenta con un equipo de 250 personas que contribuyen a posicionar Barcelona dentro del mapa de la industria de los videojuegos. Sort tiene claro que es sencillo reclutar talento en la capital catalana. "Si le ofreces a alguien de Singapur que venga a Barcelona, no se lo piensa", sentencia.
Delegación de referencia
Después de dos años, la delegación de Barcelona se ha convertido en un referente dentro de la empresa, siendo la única ciudad, junto con Londres, que cuenta con dos centros. De esta delegación ha nacido la última apuesta de King, el Bubble Witch Saga 2.
Sort ha liderado la secuela de este exitós juego, "adaptándolo a la plataforma móvil y mejorando la jugabilidad y la estética", asegura. Otros juegos de éxito como Papel Pear o Diamond Digger, también cuentan con el sello de la factoría en Barcelona.
Jugador experimentado
Sort, máster en Ciencias con especialización de programación de juegos online a la Universidad de Westminster, es un auténtico experto del sector, con 15 años de experiencia. Ya en 1999 fue programador a Dinamic Multimedia, trabajando en una de las sagas más míticas por los amantes del deporte rey: el PC Fútbol.
Entre 2000 y 2005 trabajó en el Reino Unido a Codemasters , Asylum Entertainment y a Team17 , ejerciendo tareas de liderazgo en la programación de varios juegos para múltiples plataformas como Play Station, Nintendo 64 o Xbox.
Al volver a Barcelona consiguió remontar el negocio a Microjocs , que fue comprada por Digital Chocolate. Ya bajo el paraguas de esta empresa, Sort empezó a desarrollar juegos para Iphone y, posteriormente, se orientó hacia los Social Games.
Éxitos como el Millionaire City o el Galaxy Life fueron un buen toque de atención para los responsables de King, que el 2012 le dieron las claves de su nueva casa a la capital catalana. Sort considera su estilo de liderazgo "democrático, que es el que funciona con equipos de mucho talento". Y añade sin dudar, "me importa mucho la gente, llegar al trabajo y ver que la gente está feliz. Por eso hace falta bienestar, un liderazgo de calidad a todos los niveles y resultados ".
Viaje sin final
Este amante de la programación intenta encontrar tiempo por otras pasiones como el submarinismo, el dibujo o viajar . Precisamente el viaje de King no parece tener fecha para acabar. "Tenemos un modelo que puede ser por toda la vida. Hasta que la gente no secanse, Candy Crush no tendrá un final", argumenta orgulloso. Todos aquellos que se peleen con el nivel 421 o 440, pueden cogérselo con calma.