Meliá Hoteles International ha obtenido un beneficio atribuido de 96,8 millones de euros entre enero y septiembre, un 23,7% menos que durante el mismo periodo del año pasado. Este descenso, según ha comunicado la propia compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se ha producido debido a la crisis turística que se ha vivido en República Dominicana.
El país ha sufrido "una campaña de desinformación amplificada por los medios sensacionalistas de Norteamérica, que ha impactado especialmente en el segmento de grupos", ha dicho el vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer. A esto se ha añadido un empeoramiento de las cifras que ha registrado en las Islas Canarias, donde se ha notado la recuperación del turismo en Turquía y el norte de África.
En cambio, en el tercer trimestre ha habido destinos como Milán, Londres, París, las ciudades españolas y los destinos mediterráneos nacionales, han mantenido una buena tendencia. Escarrer también ha dicho que "tanto ante las coyunturas geopolíticas como ante una crisis como la quiebra de Thomas Cook" la empresa ha demostrado que el negocio diversificado tiene ventajas.
Baja el precio medio
El precio medio por habitación disponible, RevPAR, se ha reducido un 1% hasta llegar a los 71,1 euros. La bajada ha sido especialmente acusada en República Dominicana (-32%) y Cuba (-9,8%). Los principales aumentos se han producido en Asia (7,4%), Oriente Medio (2%) y el Estado español (0,8%). La cifra de negocio ha sido de 1.388,1 millones de euros, un 1,8% menos que durante los tres primeros trimestres de 2018.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) sin plusvalías ha sido de 373 millones de euros, un 3,7% por debajo del registrado hace un año. La deuda, por su parte, ha sido al cierre de septiembre de 655,7 millones de euros, un 48,2 millones más que el 31 de diciembre del ejercicio pasado. El total de deuda es de 2.096,2 millones de euros.