• Empresa
  • Mònica Roca, la empresaria que quería ser astronauta

Mònica Roca, la empresaria que quería ser astronauta

¿Ha llegado el momento de ventilar y abrir cajones?

Mònica Roca es la presidenta de la Cámara de comercio de Barcelona. | Ángel Bravo
Mònica Roca es la presidenta de la Cámara de comercio de Barcelona. | Ángel Bravo
Toni Rodríguez | VIA Empresa
Presidente de Intermedia
Barcelona
02 de Julio de 2021

"La diferencia entre la crisis actual y las anteriores es que esta ha obligado a cerrar a muchas empresas que eran perfectamente viables", subraya la presidenta de la Cambra Oficial de Comerç, Indústria i Navegació de Barcelona, Mònica Roca. "Cerraron por motivos de salud pública, pero eran negocios productivos que tenemos el deber de ayudar". Para hacerlo, la más que centenaria Cambra de Barcelona cuenta con un plan de acción titulado Catalunya 2030-2040, un equipo técnico formado por 130 trabajadores de la casa y la ayuda externa de la asociación Eines de País y la actividad constante de 13 comisiones del pleno, que analizan y proponen soluciones para superar las carencias pasadas, actuales y futuras de la economía catalana.

 

El plan estratégico fue presentado en octubre de 2019; Eines de País es la plataforma soberanista que organizó y ganó por sorpresa las últimas elecciones a la Cambra y las comisiones reúnen todos los miembros del pleno, que están obligatoriamente adscritos. Con estos instrumentos, con el convencimiento de que "no saldremos de esta si no es con conocimiento, responsabilidad social, salarios dignos, creatividad, innovación y formación, que son la base del modelo inclusivo que pretendemos", y una considerable fuerza de voluntad, la presidenta se ha propuesto reavivar una institución que ya estaba en horas bajas antes de la pandemia, de igual manera como lo hacen otras entidades históricas de la sociedad civil catalana, que a veces parece que colaboren y otras muchas parece que compitan por el liderazgo institucional.

Desconocida en la esfera pública hasta no hace mucho, Roca explica que sus prioridades son la creación de un nuevo modelo económico basado en el conocimiento y la tecnología, capaz de situar a Catalunya al frente de la cuarta revolución industrial, ayudar a las pymes a hacer frente a la crisis de la pandemia y aprobar finalmente la Llei de Cambres, que todavía no sale adelante debido a cierta oposición de unas patronales -Pimec y Foment del Treball- tradicionalmente recelosas del papel de las Cambres, con quienes dice que no quiere competir por la representación del empresariado. "Nosotros representamos al mundo de las empresas, no solo el de los empresarios", asegura.

 

Un currículum estelar

Sea como sea, parece que no le falta coherencia. De pequeña, ya quería ser astronauta; de joven, se licenció como ingeniera de telecomunicaciones; como profesional, trabajó 10 años en la Agencia Espacial Europea; como empresaria, fundó IsardCAt, una firma dedicada a procesar datos enviados a la Tierra por los satélites de observación, que da trabajo a una treintena de personas a Barcelona, Guildford (Reino Unido) y Varsovia (Polonia); y ahora, entre otras cosas y una vez convertida en la primera mujer que preside la Cambra después de 32 hombres y más de 135 años de historia, trabaja desde la cumbre del "parlamento empresarial de Catalunya" en la construcción de una industria emergente, la del new space, en las posibilidades de la cual cree profundamente.

Roca ha participado en la redacción del plan estratégico hasta 2040, la creación del Centre Blockchain de Catalunya, la puesta en marcha de las Consultes Cambra y la creación de algunas iniciativas transversales

Aficionada al montañismo y acostumbrada a hacer cumbres, fue investida presidenta el mes de marzo de 2021, en virtud de un acuerdo previo que establecía un reparto de los cuatro años de mandato entre los dos primeros de la lista ganadora en junio de 2019, encabezada por Joan Canadell y por ella misma. El relevo, pues, tenía que ser en el mes de junio, dos años después de las elecciones, pero Canadell quiso presentarse a diputado del Parlament como candidato de Junts per Catalunya y Mònica Roca se tuvo que someter a una votación del pleno en la que ganó al candidato alternativo, José María Torres, por 32 votos.

El pleno de la Cambra está integrado por 60 miembros, 40 de los cuales son elegidos por votación directa de cada uno de los epígrafes, otros seis de designación directa a propuesta de Foment del Treball y Pimec y los 14 restantes -las famosas "sillas de oro"-, son reservadas (de momento) para las empresas de mayor aportación económica voluntaria a la tesorería de la Cambra. Esto significa que muy probablemente, un 80% del voto procedente de los miembros elegidos por sufragio -32 votos de 40- fueron para la candidatura de Eines de País. Primero en 2019, con la elección de Canadell ante Enric Crous, Carles Tusquets y Ramon Macià, y este año, con la elección de Mònica Roca contra Torres, que en 2019 había formado parte de la lista de Crous.

Iniciativas y actividades

Desde que entró en el comité ejecutivo, la actual presidenta ha participado activamente en la redacción del mencionado plan estratégico hasta 2040, en la creación del Centrny Blockchain de Cataluña, en la puesta en marcha de las Consultes Cambra y en la creación de algunas iniciativas transversales como por ejemplo el Hub Industrial de Movilidad Sostenible o el Hub Cambra Digital. No hay que decir que también ha sido una de las impulsoras de la comisión del espacio de la Cambra de Comerç y que, feminista convencida, también ha invertido horas y esfuerzo en una de las comisiones más destacadas de la corporación: el Observatori Dona, Empresa i Economia (ODEE).

Actualmente, la presidenta, lejos de perderse en elucubraciones teóricas o discursos abstractos, enfoca directamente cada uno de los proyectos en los que ve comprometida a la entidad, entre los que destaca el Catalonia New Space, impulsado desde el Departament de Polítiques Digitals de la Generalitat y que, en palabras de la presidenta, "traerá miles de puestos de trabajo de calidad, vinculados al conocimiento, que nos hará crecer y afrontar la próxima crisis con más solidez". Un primer hito logrado por el programa fue en el mes de marzo, con el lanzamiento del primero nanosatélite catalán desde Baikonur (Kazajistán), a cargo de la catalana Sateliot, primera operadora de telecomunicaciones que proporciona conectividad del internet de las cosas a nivel mundial, bajo protocolo 5G. Explica Roca que en este impulso de la economía del espacio "hemos sido muy activos, diseñando junto con la Generalitat un plan estratégico capaz de crear 1.800 puestos de trabajo de alto valor añadido, a sabiendas de cuáles son los perfiles profesionales que nos faltan para poderlos formar y orientar directamente al mundo industrial".

La presidenta de la Cambra de Barcelona aboga por una digitalización de las empresas "que vaya más allá de la página web y el comercio electrónico", y que ponga definitivamente las pilas al país

Otros proyectos destacables son la creación del barómetro Cambra, que monitoriza los indicadores de la recuperación económica; la creación de un hub de movilidad sostenible, con 30 empresas y 50 proyectos piloto, ocho de los cuales ya han logrado apoyo europeo; la fundación de un observatorio de seguridad; la potenciación de la Unió de Polígons Industrials de Catalunya, que hay que reciclar y adaptar a las nuevas necesidades industriales y logísticas del país; la creación de un centro de blockchain para poner la tecnología al alcance de todo el mundo; la campaña Aixeca el teu Negoci, que ya ha atendido más de 30.000 peticiones y ha ayudado directamente a más de 9.000 empresas; el Hub Cambra Digital; el departamento de proyectos europeos para hacer llegar los fondos Next Generation a las pequeñas y medianas empresas; el Consolat de Mar, que recupera la antigua vocación medieval de resolver conflictos mediante la mediación sin necesidad de acudir a los siempre saturados tribunales de justicia; la apertura de la Casa Llotja de Mar al público, para hacer conocer las raíces históricas de la institución, en un sector tan castigado como es el cultural; la institución de un síndico empresarial, vinculado al Síndic de Greuges, por el amparo de las empresas ante las administraciones; la participación en Turisme de Barcelona (cofundada por la Cambra y el Ayuntamiento en 1993) para impulsar otros turismos de mayor valor añadido, como por ejemplo el deportivo, el cultural, el científico o el médico…

Mònica Roca habla con entusiasmo y realismo de sus proyectos, abogando por una transferencia imprescindible de conocimientos de las universidades a las empresas "todavía muy lejos de ser satisfactoria", y por una digitalización de las empresas "que vaya más allá de la página web y el comercio electrónico", y ponga definitivamente las pilas a un país que hay que descentralizar y descongestionar, repartiendo cargas y beneficios de manera más eficiente. Por ejemplo, haciendo de Barcelona la puerta de entrada de un turismo transformador y renovador de estructuras, no apoyado en políticas de precariedad laboral sino en iniciativas de valor, útiles de cara a incrementar el nivel de vida de los ciudadanos.

El papel de cada uno, el papel de todos juntos

"Todo esto no lo podemos hacer solos, evidentemente", acaba. "Las administraciones tienen que hacer política, nosotros tenemos que hacer empresa, las patronales tienen que velar por los intereses de los empresarios, los sindicatos por los de los trabajadores y los lobbies también tienen que hacer su trabajo. Pero todos juntos estamos obligados a colaborar y reclamar un sistema de financiación justa, al margen de las convicciones políticas que defienda cada uno. Recordamos que 16.000 millones de euros al año darían para hacer muchas cosas". "El déficit fiscal nos afecta a todos, sea cual sea nuestra posición ideológica. Nosotros tenemos un estudio hecho en 2012, mucho antes de la llegada de Eines de País al comité ejecutivo de la Cambra, que explica muy claramente cómo sería nuestra economía en caso de independencia de Catalunya. Pero el estudio se quedó guardado en un cajón, hasta que nosotros lo encontramos, le sacamos el polvo y lo hicimos público. No digo que tenga que ser un texto de consenso, pero quizás sería bueno tenerlo como base de una reflexión y posterior programa de acción conjunta".

¿Parece, pues, que haya llegado el momento de ventilar y abrir cajones?

Antes, eso se llamaba "levantar alfombras".