El economista y empresario Miquel Valls i Maseda (Barcelona, 28 de septiembre de 1943) ha fallecido este domingo por la mañana en Barcelona a los 75 años tras ser diagnosticado hace tan sólo 15 días de un cáncer de pulmón y de higado. Tras más de 17 años en el cargo, Valls dejó la presidencia de la Cambra de Comerç, Indústria i Navegació de Barcelona el pasado 17 de junio, tras la victoria de Joan Canadell y la candidatura Eines de País.
Valls también ha sido el máximo representante del Consell General de Cambres de Catalunya desde 2002 hasta 2019, desde donde impulsó la competitividad de las empresas y su apertura a los mercados internacionales. Hace poco más de 48 horas, Canadell le relevaba también como presidente del Consell General de Cambres de Catalunya en un acto en la Llotja de Mar al que Valls ya no asistió.
En el último brindis que hizo como presidente de la Cambra de Barcelona, Valls reconoció que los dos momentos más difíciles que había vivido al frente de la institución fueron cuando le llamó el entonces presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro, para explicarle que el recurso cameral quedaba eliminado por ley y cuando el juzgado de primera instancia declaró que la Casa Llotja de Mar era propiedad del Estado.
El empresario accedió a la presidencia de la Cambra con un programa que reivindicaba un aumento de las inversiones en infraestructuras catalanas y gestión público-privada y descentralizada del Aeropuerto de Barcelona que vivió su gran hito en 2007 con el famoso acto de IESE, y también hizo un especial hincapié en el déficit de inversiones públicas en Catalunya por parte del Estado. Ambos fueron grandes motivos de su lucha empresarial.
"La Cambra no ha estado nunca sometida a ningún interés, ni en Madrid, ni en la Generalitat ni en el Ajuntament de Barcelona. Nuestro prestigio es que hemos sido independientes de la política... Lo único que hemos hecho es pelearnos con Madrid y hemos tenido grandes disputas con el ministerio de Fomento por las inversiones presupuestadas por el Estado ", aseguró durante su última intervención pública.
Valls: "La Cambra no ha estado nunca sometida a ningún interés, ni en Madrid, ni en la Generalitat ni en el Ajuntament de Barcelona. Nuestro prestigio es que hemos sido independientes de la política"
Valls recibió la Creu de Sant Jordi de la Generalitat el 11 de abril de 2017 "por su participación en las instituciones empresariales catalanas, que ha contribuido a reforzar y potenciar, poniéndolas al servicio del desarrollo económico y de la proyección exterior de Catalunya". Y esto incluye no solo su trayectoria al frente de la Cambra y el Consell General de Cambres sino también su liderazgo en el grupo empresarial familiar Valls y en el Grupo Fichet.
Era licenciado en Ciencias Económicas por la Universitat de Barcelona (UB), master en Gestión Gerencial por la Escuela de Alta Dirección y Administración (Eada) y diplomado en Dirección de Empresas por Iese, entre 1970 y 1984 fue directivo del grupo empresarial familiar Valls, del sector metalúrgico, y posteriormente pasó a ser presidente ejecutivo de Comercial DVP, también del mismo sector.
A partir de 1996, Valls entró a formar parte del pleno de la Cambra de Comerç de Barcelona y fue presidente de Grupo Fichet (ahora Gunnebo España), cargo que desempeñaba cuando accedió a la presidencia de la Cambra en junio de 2002, en sustitución de Antoni Negre, momento en el que también se convirtió en presidente del Consell de Cambres de Catalunya.
También fue vicepresidente de Fira de Barcelona, de la Cámara de España y de la Asociación de Cámaras de Comercio del Mediterráneo (Ascame). En fue elegido, en representación de España, como vicepresidente de Eurochambres, organización creada en 1958 que agrupa a las cámaras de comercio e industrias europeas. Cargo en el que fue reelegido en 2013.
Valls tuvo una gran implicación en grandes empresas e instituciones catalanas, ya que fue miembro del consejo asesor de Abertis y de la patronal Foment del Treball; del consejo de administración de Gas Natural Fenosa, de VidaCaixa y de Grupo Emerger, y del comité ejecutivo del Consorcio de la Zona Franca de Barcelona. Además, también era miembro del Consejo de Administración de la Corporació Catalana de Comunicació y patrón de la Fundació Conservatori del Liceu.
Las reacciones del mundo empresarial rindiendo tributo a su trayectoria no se han hecho esperar.