Las prendas de ropa de Naulover no pretenden ser como las de las grandes marcas de ropa textil que a todos nos venden a la cabeza. La suya es ropa de punto que, afirman, los servirá para diferentes temporadas. "Es ropa por la mujer actual, una mujer que desde que se quita por la mañana hasta que va a dormir va de bòlit, trabaja, estudia, cuida los hijos y siempre tiene que estar guapa, desde que se levanta hasta que va a dormir", explica Carme Noguera, su consejera delegada. sabe del negocio. Puerta desde los 18 años pisando talleres, oficinas, almacenes... y desde mucho antes, pues ha crecido entre tejidos e hilos de muchos colores. Noguera es la pequeña de cuatro hermanas, hijas de José Noguera Muñoz que el 1957 convirtió en empresa el negocio de costura de sus padres.
"El 1957 mis padres se proponen hacer una empresa textil porque ya los abuelos y bisabuelos se dedicaban a la moda, eran sastres, modistos, etc. Mi madre hacía jerseys y mi padre los comercializaba y pensaron a ponerse serio y empezar una empresa. Ella sabía tejer con las máquinas, fichan a una señora que es la modista del pueblo y así empieza la empresa", sintetiza Noguera. Parece sencillo pero desde aquel momento la empresa se ha mantenido, creciendo despacio a un ritmo de un 5-10% anual y hoy en día factura 18 millones de euros. Tres generaciones después de aquella gesta de los incipientes sesenta, Naulover se ha consolidado como una firma de moda que da ocupación a unos 130 trabajadores directos (el 95% de los cuales son fijas) y a unos 500 trabajadores indirectos en los talleres externos de la zona, donde se subcontrata parte de la mano de obra.
Además de ser emprendida familiar es empresa del territorio. Catalana y de San Juan de Mediona, para más inri. "Desde siempre que empezó allá, puesto que la gente migrava hacia Barcelona a buscar trabajo, y deciden ponerlo allá porque tenían mucha mano de obra", explica. Es, por lo tanto, una firma muy arraigada a la población. "Ahora hay trabajadores otras poblaciones vecinas pero la mayoría son de la población e inclús hay los hijos de quienes trabajaban antes", explica su máxima directiva y a la vez diseñadora, un doble trabajo que desarrolla desde 2005.
Naulover factura 18 millones de euros y ocupa 130 trabajadores y otros 500 de manera indirecta
Alejados de la deslocalización –"no queremos perder la calidad ni la identidad. Nuestro producto está hecho en unas máquinas diferentes, en unos hilos diferentes y con una forma de trabajar diferente, se ve diferente", Noguera explica que si ahora vas a pasear por las tiendas de la Diagonal, "no sabrás en qué tienda estás viendo el producto, pero cuando voces un producto nuestro, sí que lo sabes diferenciar".
Carme Noguera trabaja cada día en esta fábrica y sólo los miércoles "baja en Barcelona" para tratar temas administrativos y de gestión a las oficinas de la compañía, a la calle Muntaner de la capital catalana, donde también se exhiben los modelos de la temporada en su sala de exposiciones. "Todo lo hacemos en Mediona, compramos el hilo, lo traemos a teñir, cada año estudiamos los colores de tendencia de la temporada y estiércol dos colecciones, una de verano y una de invierno. El proceso de distribución se hace también desde Mediona, en Barcelona sólo tenemos el showroom y las oficinas". Realiza unos 1.000 prototipos por temporada de los que sólo formarán parte de la colección unos 300 seleccionados.
El desencant de Nadal
Estos días se encara la campaña de Nadal, pero nada es como antes. "Antes era muy importante y las rebajas también, pero ahora todo se ha difuminado porque todo el año estamos con descuentos y mucha gente compra las cosas directamente después de Reyes porque sabe que la ropa está siempre rebajada. Antes sí que era un porcentaje muy importante pero ahora ha cambiado mucho", asegura.
Noguera: "Si ahora vas a pasear por las tiendas de la Diagonal, no sabrás en qué tienda estás viendo el producto"
No obstante el desencant de Nadal, esperan las ventas en su tienda propia, la eshop, los outlets que tienen en Viladecans e Igualada, las 400 tiendas multe marca en que tienen presencia y los córners del Corte Inglés en que también se pueden encontrar sus modelos. También al mercado exterior, que a estas alturas supone el 25% de las ventas y aspiran que sea próximamente la mitad de su negocio. "Si miras solamente el canal multe marca, estamos al 50% en exportación, pero si miras todos los canales en conjunto, voces que se va al 25% y sí, querríamos aumentar las ventas en grandes almacenes extranjeros porque también sea el 50%". De hecho, en noviembre han desembarcado en Los Angeles para impulsar un plan de expansión en Costa Oeste de los Estados Unidos para buscar aproximarse en las compradoras de Texas y Arizona, "un perfil de consumidora acuerdo con la marca", señala la compañía.
Y a pesar de que algunas piezas las tienen que adaptar para sus mercados, como es el caso de Dubai, donde acaban de abrir su segunda tienda, los precios son los mismos. "Un vestido puede costar entre 100 y 250 euros, por no es el mismo público que las grandes cadenas porque el nuestro es un precio más elevado, pero es un producto que en realidad al final te sale bien por aquello que decimos que lo troco salo caro. Pagas más al principio pero tienes un pantaló que dura mucho tiempo. Los otros productos son más económicos pero al segundo día ya se han estropeado", compara su consejera delegada. En la actualidad, la firma de moda está presente en países como Italia, Bélgica, Portugal, Francia, Alemania, Holanda, Luxemburgo, Andorra, Emiratos Árabes, Estados Unidos, la China, México y Chile.
Moda y, además, renovables
Además de la moda, que es su negocio, Noguera apostó por las energías renovables, creando la Sociedad Rocaener S.L., cuando hace unos años se concedieron las subvenciones masivas para poner en marcha plantas propias. "No es por auto alcanzarnos porque siempre la vendes más cara del que la compras. Lo hicimos por el medio ambiente y por las subvenciones que había hace unos años. Lo mantendremos durante 25 años, después puedes volver a invertir o dejarlo estar", apunta.