10
de Mayo
de
2017
Act.
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2017
"En el futuro la gente no cocinará", le dijo el padre en 1998. Y el futuro ha llegado, tal y cómo asegura Quirze Salomó, socio fundador de Nostrum y propietario de una cuarta parte de la compañía en la actualidad. "De aquí a 25 años será difícil comprar comer para preparar", augura el empresario, que ya barrena cuál será el siguiente país donde Nostrum subirá la persiana.
El grupo de Manresa, que prevé llegar a los 35 millones de euros de facturación este año, se encuentra en pleno auge internacional y proyecta poner un pie en mercados como Alemania, Bélgica u Holanda. En todos estos países abrirá las puertas a través de masterfranquícies cómo ya ha hecho en Francia.
Con unas ventas de 26 millones de euros en 2016 y después de abrir las primeras tiendas en suelo francés, Nostrum proyecta ahora la conquista de nuevos mercados al Viejo Continente, donde saca pecho para ser el "primero player autóctono por volumen de negocio en el futuro", tal y cómo detalla Salomó. "Los líderes mundiales de la comida para llevar son todos americanos –explica el empresario–; de MacDonald's a Starbucks, pasando por Pizza Hutt, los Estados Unidos concentran un 44% de las ventas mundiales del sector, que cuenta con una facturación agregada de 141.000 millones de dólares, mientras que Europa sólo representa el 13% de esta cifra".
Pero la aventura de Nostrum al Viejo Continente va más allá. La compañía pretende unificar la carta en todos los países europeos donde tenga presencia. "Queremos que a Düsseldorf los clientes puedan encontrar platos catalanes, y que en cada uno de nuestros restaurantes se puedan encontrar recetas representativas del continente", explica Salomó. Con todo, la gran cocina de Nostrum seguirá estando en Manresa, donde el grupo elabora íntegramente los platos que se comen en Cataluña, el resto de España y gran parte de Francia. De cara a la conquista de nuevos países, más alejados de la sede del Bages, Nostrum abrirá pequeñas suyos donde preparará parte de los platos que se servirán a las mesas de Alemania u Holanda. Con todo, pero, como mínimo un 80% de la carta saldrá de la cocina manresana.
En la decisión salomònica de convertir Nostrum en McDonald's europeo, el director general de Nostrum quiere descolgarse la etiqueta de marca dirigida a un público urbano y de oficina que consume platos de inspiración casera en jornadas laborales y abrir restaurantes de carretera al más puro estilo americano. Este nuevo concepto de locales, más dirigidos al consumo en tiempo de ocio, se suma a otras iniciativas recientes como la de los envíos a domicilio.
El secreto del precio
Además de las recetas de toda la vida, lejos de las sofisticaciones, Nostrum es conocido por sus precios, con platos que cuestan sólo un euro. Según Salomó, uno de los secretos porque esto sea posible es tensar la logística al máximo, de la cocina a la mesa, cosa que disminuye un 1% las pérdidas al comer. "Los locales no hacen pedidos, sino que reciben los productos a partir de los platos que han vendido". De este modo, y en base de una fuerte inversión en softwares que detectan cuáles son las recetas que más bien funcionan en cada local, Nostrum se asegura que el margen de error sea más bajo.
Por otro lado, el secreto de los precios bajos pasa para limitar a la mínima expresión el número de intermediarios. Nostrum mantiene acuerdos con varios proveedores del Bages que lo surten de los productos que necesita. Esto, sumado al gran volumen de materia delgada que encarga, permite a la empresa de Salomó poder tener un control más grande de los precios que paga a cada proveedor. Una versión comarcal del que ya hacen las grandes multinacionales como Inditex o Mercadona.
El 25% de la compañía pertenece a Quirze Salomó, que abre la puerta a salir de la empresa. "A medida que Nostrum vaya creciente, mi capital se irá diluyendo –explica el directivo–; tengo otros negocios, por lo tanto no descarto vender mis acciones cuando esto pase". A su mercado local, Nostrum ha tenido un gran crecimiento gracias a la fórmula de la franquicia. El año 2015 se convirtió en la empresa que más contratos de franquicia firmó en España. La compañía, que debutó a la bolsa el 2014, facturó 26 millones de euros en el ejercicio 2016.
El grupo de Manresa, que prevé llegar a los 35 millones de euros de facturación este año, se encuentra en pleno auge internacional y proyecta poner un pie en mercados como Alemania, Bélgica u Holanda. En todos estos países abrirá las puertas a través de masterfranquícies cómo ya ha hecho en Francia.
Con unas ventas de 26 millones de euros en 2016 y después de abrir las primeras tiendas en suelo francés, Nostrum proyecta ahora la conquista de nuevos mercados al Viejo Continente, donde saca pecho para ser el "primero player autóctono por volumen de negocio en el futuro", tal y cómo detalla Salomó. "Los líderes mundiales de la comida para llevar son todos americanos –explica el empresario–; de MacDonald's a Starbucks, pasando por Pizza Hutt, los Estados Unidos concentran un 44% de las ventas mundiales del sector, que cuenta con una facturación agregada de 141.000 millones de dólares, mientras que Europa sólo representa el 13% de esta cifra".
Pero la aventura de Nostrum al Viejo Continente va más allá. La compañía pretende unificar la carta en todos los países europeos donde tenga presencia. "Queremos que a Düsseldorf los clientes puedan encontrar platos catalanes, y que en cada uno de nuestros restaurantes se puedan encontrar recetas representativas del continente", explica Salomó. Con todo, la gran cocina de Nostrum seguirá estando en Manresa, donde el grupo elabora íntegramente los platos que se comen en Cataluña, el resto de España y gran parte de Francia. De cara a la conquista de nuevos países, más alejados de la sede del Bages, Nostrum abrirá pequeñas suyos donde preparará parte de los platos que se servirán a las mesas de Alemania u Holanda. Con todo, pero, como mínimo un 80% de la carta saldrá de la cocina manresana.
En la decisión salomònica de convertir Nostrum en McDonald's europeo, el director general de Nostrum quiere descolgarse la etiqueta de marca dirigida a un público urbano y de oficina que consume platos de inspiración casera en jornadas laborales y abrir restaurantes de carretera al más puro estilo americano. Este nuevo concepto de locales, más dirigidos al consumo en tiempo de ocio, se suma a otras iniciativas recientes como la de los envíos a domicilio.
El secreto del precio
Además de las recetas de toda la vida, lejos de las sofisticaciones, Nostrum es conocido por sus precios, con platos que cuestan sólo un euro. Según Salomó, uno de los secretos porque esto sea posible es tensar la logística al máximo, de la cocina a la mesa, cosa que disminuye un 1% las pérdidas al comer. "Los locales no hacen pedidos, sino que reciben los productos a partir de los platos que han vendido". De este modo, y en base de una fuerte inversión en softwares que detectan cuáles son las recetas que más bien funcionan en cada local, Nostrum se asegura que el margen de error sea más bajo.
Por otro lado, el secreto de los precios bajos pasa para limitar a la mínima expresión el número de intermediarios. Nostrum mantiene acuerdos con varios proveedores del Bages que lo surten de los productos que necesita. Esto, sumado al gran volumen de materia delgada que encarga, permite a la empresa de Salomó poder tener un control más grande de los precios que paga a cada proveedor. Una versión comarcal del que ya hacen las grandes multinacionales como Inditex o Mercadona.
El 25% de la compañía pertenece a Quirze Salomó, que abre la puerta a salir de la empresa. "A medida que Nostrum vaya creciente, mi capital se irá diluyendo –explica el directivo–; tengo otros negocios, por lo tanto no descarto vender mis acciones cuando esto pase". A su mercado local, Nostrum ha tenido un gran crecimiento gracias a la fórmula de la franquicia. El año 2015 se convirtió en la empresa que más contratos de franquicia firmó en España. La compañía, que debutó a la bolsa el 2014, facturó 26 millones de euros en el ejercicio 2016.