Después de más de dos años de batallas legales, Orange y MasMóvil han cerrado su fusión y han empezado a operar como una sola entidad. Las dos compañías lo han anunciado en un comunicado conjunto, donde no han anunciado todavía el nombre oficial de la sociedad. Sí que han detallado que la joint venture se ha estrenado con 37 millones de clientes entre banda ancha y telefonía móvil y que se ha convertido en la compañía líder al sector. El objetivo de esta nueva sociedad es "generar sinergias de más de 490 millones anuales" a partir del cuarto año del cierre de la operación.
Por otro lado, ambas empresas también han confirmado a Jean François Fallacher, consejero delegado de Orange en Francia, como presidente no ejecutivo de la firma y Meinrad Spenger, consejero delegado de MasMóvil, en el cargo homónimo de la nueva sociedad. En el comunicado han destacado que esta fusión se trata de un "paso adelante muy positivo" para las telecomunicaciones. "Los accionistas de Orange y MásMóvil poseen cada uno una participación del 50% de la joint venture con los mismos derechos de gobernanza en la entidad combinada", han señalado. Queda pendiente de conocer el nombre comercial y la ubicación de la sede corporativa, que se anunciarán los próximos días. Aun así, Europa Press ha avanzado que la idea es trasladar el negocio al edificio de Orange en el parque empresarial La Finca, situado en Pozuelo de Alarcón.
Una alianza después de dos años de conflictos legales
La constitución de esta nueva entidad llega después de más de dos años de luchas contra las regulaciones. Antes de la fusión, Orange era la segunda operadora más grande en el Estado, mientras que MásMóvil ocupaba el cuarto lugar. Durante el último mes, primero la Comisión Europea y después el Consejo de Ministros del gobierno español han resuelto favorablemente a la alianza, de forma que ya no hay ningún impedimento para que las dos compañías operen juntas. Eso sí, el organismo europeo matizó que la operadora rival Digi tenía que recibir parte del negocio como compensación, con el objetivo de no crear un conflicto de competencia. MásMóvil cedió un total de 60 megahercios (MHz) de espacio radioeléctrico en diferentes bandas de frecuencia por 120 millones de euros, mientras que Orange concedió a la operadora rumana la opción de celebrar en el futuro un "acuerdo de servicio de itinerancia nacional".
La operadora rumana Digi ha sido compensada por parte de Orange y MásMóvil con el objetivo de evitar un caso de competencia desleal
Pese a todo, el impacto en el mercado es evidente. El resultado inmediato más relevante es que Movistar ha perdido el dominio del sector. La cuota de la nueva sociedad subirá hasta el 41,62% en el sector de líneas de banda ancha, muy por encima del 33,83% que ocupa Telefónica, según los últimos datos presentados por la CNMC a finales de 2023. Este cambio de paradigma también se producirá en el mercado de la telefonía móvil, donde la cuota de Orange y MásMóvil suma el 42,76% de la cuota por el 27,02% de Movistar.