2.500 metros cuadrados de salas blancas subterráneas y bunkerizadas, con acceso controlado a través de una reclusa y cámaras, a prueba de inundaciones y con energía garantizada las 24 horas gracias a dos subestaciones. Así son las instalaciones de Oxigen Data Center en Sant Cugat, que albergan la infraestructura de servidores para almacenar datos de empresas e instituciones. Un centro de datos de inversión 100% catalana, uno de los pocos del país, que apuesta por una gestión local en un sector donde las grandes multinacionales y los proyectos extranjeros dominan.
Detrás del proyecto está Benjamín Rovira, fundador y CEO de Oxigen Data Center. A mediados de los años 90, ya trabajaba en el sector de los centros de datos, cuando todavía no se hablaba mucho de ello. En 2019 decidió iniciar una nueva aventura: "Siempre había hecho centros de datos para otros y decidí diseñar el mío propio". Para hacerlo, se asoció con la familia inversora catalana Salicrú. "Queríamos hacer un centro de datos de territorio", enfatiza.
Inversión de 15 millones de euros
Había dos opciones: construir un centro de datos desde cero o aprovechar algún espacio ya existente. Encontraron el antiguo centro de datos de CaixaBank en Sant Cugat, que llevaba tiempo sin usarse: "Este terreno ya contaba con dos subestaciones eléctricas, cosa que no pasa en ningún otro centro de datos en Cataluña. Necesitamos mucha seguridad, también en el suministro de energía."
Con una inversión inicial de 15 millones de euros y dos años de obras, crearon un centro de datos de tercera generación. "Es un entorno seguro y sostenible para que los datos de cualquier empresa estén almacenados en casa", resume Rovira. Además de los 2,500 metros cuadrados de salas blancas para almacenar los datos, también cuentan con más de 5,000 metros cuadrados de oficinas y salas técnicas para el mantenimiento, control y prevención durante las 24 horas del día, los 365 días del año.
No es el único centro de Oxigen, ya que adquirieron el espacio de Mediacloud, el centro de datos que Mediapro tenía en Barcelona. Desde allí también gestionan las salas técnicas de fútbol de Mediapro.
Benjamín Rovira: "La nube no existe, no es nada"
Además de asesoramiento y auditorías tecnológicas, Oxigen Data Center ofrece principalmente dos servicios: un espacio para que empresas y administraciones guarden su propio equipamiento y servidor, e infraestructura propia para que los clientes puedan almacenar sus datos en la nube.
"Tenemos dos salas diáfanas, preparadas para tener 400 rack's, que son armarios de 2 metros que alojan infraestructuras tecnológicas. Les llamamos espacio blanco o de producción y están permanentemente climatizadas con energía asegurada y seguridad", explica Rovira, que agrega: "La nube no existe, no es nada, los datos acaban en un lugar como el nuestro, en un servidor en un metro cuadrado."
Soberanía de los datos
"Nuestra gran diferencia es que estamos muy cerca de los clientes", resume el CEO de Oxigen Data Center, que defiende los centros de datos locales. "Microsoft, Google o Amazon tienen multitud de centros de datos por todo el mundo, pero su localización no está dentro de una región definida y no necesariamente está cerca del cliente. Tú no sabes dónde están tus datos, acaban en un armario en cualquier parte del mundo", revela.
En cambio, Oxigen Data Center apuesta por la proximidad: "Si nos pones tus datos, sabes que están cerca y puedes llamar a alguien para hacer cualquier gestión. Hay empresas que no saben dónde tienen los datos y, cuando intentan contactar con los gestores, hablan con centros de llamadas de cualquier lugar. Con nosotros, tienen control sobre sus datos". También es un ejercicio de soberanía de los datos.
¿Por qué una empresa necesita un centro de datos?
Aunque actualmente Oxigen Data Center solo tiene ocupado menos del 10% del espacio disponible, ya alberga datos de compañías nacionales e internacionales, así como de administraciones públicas. Sectores como el sanitario, farmacéutico, educativo o industrial apuestan por ellos. Y el gran espacio con el que cuentan también les permitirá garantizar el futuro con la inteligencia artificial, donde los datos serán aún más necesarios y numerosos. "Y nosotros tenemos metros cuadrados y seguridad", enfatiza Rovira.
Benjamín Rovira también quiere romper el mensaje de que los centros de datos tienen un gran impacto ambiental por el elevado consumo energético que tienen. El CEO explica que las miles de empresas que hay en el país tienen pequeñas salas con servidores poco eficientes, en las que no se ha invertido y tienen un consumo energético elevado. En cambio, ellos apuestan por la última generación, también con paneles solares propios y energía proveniente de fuentes renovables. Da un ejemplo: "Cuando ves mucha gente en un autobús, también estás viendo a mucha gente que ha dejado el coche. Nosotros somos como un autobús, porque las empresas dejan de tener salas técnicas que no son sostenibles y nos las traen a nosotros."
"Nuestro mensaje es que estas personas se dediquen a su negocio y dejen que nosotros les acompañemos en asegurar y proteger todos sus datos", indica.
Los ciberataques: el mal inevitable
Otra gran tarea de centros como Oxigen es garantizar la seguridad de los datos de todos los clientes. Pero Benjamín Rovira es claro y contundente: "Nadie puede asegurarte que no tendrás un ciberataque, es inviable. Los máximos expertos ya dicen que la ciberseguridad no es para estar pendiente de si te atacarán, sino para estar pendiente de cómo te recuperarás."
Lo primero para estar preparado es "mucha inversión": "Nosotros ya hemos invertido 15 millones de euros, tanto en infraestructura física como digital." Y lo que es importante es "tener protocolos para cuando te atacan": "Nosotros recibimos muchos ataques diarios, básicamente somos conscientes y tenemos las herramientas para detectarlos y los procedimientos para pararlos. Y si pasa alguno, tenemos las herramientas para recuperar los datos de manera inmediata." Una estructura que no tienen las salas técnicas de las empresas.
Los datos, el nuevo petróleo
Los datos son el petróleo del siglo XXI. Una frase que, por repetida, no deja de ser cierta. Cualquier empresa, cualquier negocio, los necesita para su actividad. Y es en este contexto donde los centros de datos juegan un papel cada vez más importante. Rovira defiende los centros locales para garantizar esa proximidad.
"Antes recibíamos la información a través de fax. Hoy, si cae WhatsApp tres minutos, el mundo entra en cólera. Todo es inmediato; todos hemos generado esta inmediatez. Y la inmediatez está ligada a los datos, que son imprescindibles en el ámbito digital", reflexiona el CEO de Oxigen, concluyendo: "Todo pasa por el mundo digital, que implica unos datos y un servidor. Se han convertido en el corazón de las compañías. Cualquier empresa necesita los datos para aprender, trabajar y tomar decisiones. Si los datos se paran, no se puede trabajar."
Con una facturación de unos 6 millones de euros en 2024 y la previsión de superar los 10 millones en 2025, Oxigen Data Center se erige como la alternativa local y catalana en un negocio en auge que los grandes fondos de inversión extranjeros están tomando para sí.