El inicio de la cadena de supermercados Plusfresc se remonta al 1929, cuando su línea de negocio se basaba en el transporte de paquetes entre Zaragoza, Lleida y Barcelona. Pronto, pero, su propietario, en Rafael Pujol Sala, ganó un pequeño premio de lotería que le permitió comprar una droguería –situada ante su negocio- que comercializaba productos químicos y alimentación. "La nueva tienda, que la dirigía junto con su mujer, se decía Momotombo, nombre de una marca de café –que venían entonces al establecimiento- y que recibía el nombre de un volcán de la zona de Nicaragua", explica el nieto del propietario y actual director de responsabilidad social corporativa (RSC) de Plusfresc, Rafel Oncins.
Desde entonces, Plusfresc ha evolucionado excepcionalmente; el modelo de negocio se ha ido reorientando para comercializar aquellos productos que más encajan al nicho de mercado donde están presentes, han pasado de ser dos trabajadores a contar con una plantilla de 1.105 empleados en todo Cataluña, a facturar 142,663 millones de euros -un incremento del 6,4% respeto el 2015-, a gestionar 72 establecimientos a todo el territorio catalán y con un capital social 100% propio y leridano. Además, la novedad de este año es que han abierto una nueva tienda en Tarragona que ha generado 24 lugares de trabajo y ha sido posible gracias a una inversión de 1,7 millones de euros, según explica la compañía.
El origen de los supermercados
El 1938 cae una bomba en la única tienda que tenían. La Guerra Civil, pues, supuso la crema de todo el establecimiento. No es hasta un año más tarde que compran un nuevo local en la Plaza de la Sal de Lleida –que actualmente todavía está en funcionamiento-. Desde que acaba la guerra hasta el 1968 "el negocio estaba estancado porque el mercado estaba totalmente intervenido por el Estado", subraya Oncins. Durante estos años las tiendas han ido cambiando de nombre porque concordaran con las líneas de negocio que trabajaban. Por un lado, la Droguería Pujol, donde venían productos químicos, de limpieza y pinturas. Y por el otro, el Superette Pujol, que fue el primer establecimiento en formado supermercado que lanzaron.
Endeudarse para crecer
Este mismo año también abrieron dos nuevas tiendas en Lleida. Para poder hacerlo, pero, Pujol tuvo que endeudarse. Debido a este endeudamiento y por el impago de algunos clientes "se produjo una crisis financiera a la empresa", lamenta Oncins. El 1969, su tiet, en Rafael Pujol Solanas, que vivía y trabajaba a Alemania, decide volver para ayudar a la delicada situación por la cual pasaba la empresa. Añadido a la crisis financiera se sumó la muerte de la abuela de Oncins, momento en que se decidió separar el negocio por familias. Por un lado la droguería se la quedó en Rafael Pujol Sala, que eran los establecimientos que entonces daban dinero.
Y por la otra, la alimentación que se lo quedan los hijos del propietario. A raíz de estos acontecimientos, el 1970 se crea Supermercados Pujol Sociedad Anónima (Supsa) dirigida entre tres accionistas, Antoni Oncins y su mujer Carme Pujol – pares de en Rafel Oncins- y su tiet, Pujol Solanas. La inauguración de Supsa supuso "el establecimiento de los fundamentos de la empresa actual; supermercados propios, franquicias y una gestión avanzada", aclara Oncins.
Hacer frente a las crisis
Hasta la década de los 60 la familia Pujol contaba con tres tiendas en Lleida, pero no los daban demasiado dinero. Fue el momento en qué realizaron un estudio de mercado para detectar qué eran los modelos comerciales que más triunfaban en Europa y el modelo Discount era ud. Se trataba de tipologías de supermercados muy básicos, con aspecto de almacén y que permitirían vender muchos productos con menos margen, y por lo tanto, se ganaba más beneficio. "Nuestras tiendas se pasaron al sistema Plus Discount, después de la crisis del petróleo el 1973 –cuando los precios subieron mucho- y fue todo un éxito", señala Oncins. También adoptaron el modelo franquicias "que nos permitía con muy poco capital inicial, pronto obtener beneficios", sentencia. Y, además, "fue el modelo que nos permitió salir fuera de la provincia de Lleida", explica el director de RSC a VÍA Emprendida.
A los años 80, pero, la entrada de Carrefour al mercado los hace replantear nuevamente la estrategia comercial porque sus ventas caen un 10%. Ante la bajada vuelven apostar por el modelo de tiendas iniciales y a introducir productos nuevos como la verdura, variedad de carnes y más adelante el pescado y los productos frescos. "Con capital propio y muy poco endeudamiento remontamos", señala Oncins.
El valor añadido de los establecimientos
El director de responsabilidad social corporativa explica que los supermercados Plusfresc "se diferencian del resto por la calidad y el surtido de los productos frescos, de proximidad y por el trato personal con el cliente". Uno de los aspectos diferenciadores "es que sabemos convivir con otros modelos de mercado, como Mercadona, con quién somos competidores pero cómo que los clientes nos ven que tenemos una oferta diferenciada podemos estar relativamente cerca", subraya.
En pocas palabras, "intentamos hacer un fair play", señala. Buen Precio, en cambio, es la competencia más directa que tienen, porque por precios y diversidad de productos son muy parecidos a Plusfresc. Por otro lado, la tipología de cliente que compra a los establecimientos también es un elemento que los diferencia del resto. Suelen ser consumidores más grandes de 40 años. "La gente joven, generalmente no nos viene a comprar, tenemos que mirar como los podemos atraer", comenta Oncins.
El nacimiento de la marca Plusfresc
Todos estos principios con los cuales basan la estrategia de negocio son también los que el 1991 los permiten lanzar la marca Plusfresc y continuar avanzando dentro del mercado. Cuatro años más tarde empiezan a expandirse además pueblos de la provincia de Lleida y también llegan a Barcelona, donde actualmente, cuentan con cuatro tiendas. El mismo año realizan una inversión tecnológica con la cual instalaron escáners en los establecimientos que los permitían conocer mucha información sobre el que se vendía y con qué cantidad.
También se creó el departamento informático y la primera web de compra, plusfresh.com, que a pesar de ser una gran novedad en aquel momento "la venta por Internet todavía no es rentable", lamenta Oncins. Sin embargo, desde que se ha puesto en marcha el nuevo web "cada año doblamos el número de usuarios". Otro elemento innovador que se introdujo la última década de los años 90 es la Tarjeta Plusi considerada la primera tarjeta del mercado catalán de fidelización de clientes. Con su lanzamiento el 1998 "ganamos en los Estados Unidos el premio Global Electronic Marketing Award por el mejor programa de marketing electrónico presentado por una empresa no americana", detalla sonriendo el director de RSC.
Plusfresc, comprometido con la sociedad y el entorno
Plusfresc se distancia del resto de supermercados por el compromiso que tiene con sus clientes, la sociedad en general y el entorno. Es por este motivo que el 2007 crean formalmente el departamento de responsabilidad social empresarial (RSE) "todo y siempre haber llevado a cabo acciones en esta materia", aclara Oncins. Por ejemplo, el 1994 lanzamos una de las primeras campañas, la del 0,7% Ordenadores para las escuelas, que consistía en que los puntos de compra que acumulaban los clientes se destinaban en las escuelas de Lleida y provincia para poder comprar materiales como ordenadores, impresoras y escáners.
"Realizamos estas acciones porque forman parte de los valores y de la cultura de la empresa, porque nos hace tener una conexión empática con los clientes, porque refuerza su fidelización y porque nos hace más fuertes de cara a la competencia", expone Oncins en VÍA Emprendida.
Actualmente, colaboran con unas 19 entidades como Jericó, Raíces Santo Ignasi y Banco de los Alimentos. Las acciones en materia de responsabilidad social se concretan en la donación de alimentos a colectivos con menos recursos, a respetar el medio ambiente mediante la incentivación de la reutilización de las bolsas, de cajas, la recogida de aceite de cocina, etc. Además, en sus establecimientos utilizan electrodomésticos y equipamientos eficientes y de bajo consumo. También realizan patrocinios culturales y deportivos como fue el caso del Lleida Baloncesto Plus Plujol y, finalmente, llevan a cabo campañas solidarias como la recogida de donativos para emergencias humanitarias y la venta de artículos solidarios a Unicef o lotería Cree Roja, entre otros.
Supermercados Plusfresc, después de 87 años de negocio, continúa apostando para ser una empresa leridana arraigada a la ciudad, con voluntad de continuar siendo líder en alimentación de Lleida y satisfecha para tener un equipo humano altamente comprometido.
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| Momotombo, el nombre que recibía el primer establecimiento Plusfresc. Cedida |
Desde entonces, Plusfresc ha evolucionado excepcionalmente; el modelo de negocio se ha ido reorientando para comercializar aquellos productos que más encajan al nicho de mercado donde están presentes, han pasado de ser dos trabajadores a contar con una plantilla de 1.105 empleados en todo Cataluña, a facturar 142,663 millones de euros -un incremento del 6,4% respeto el 2015-, a gestionar 72 establecimientos a todo el territorio catalán y con un capital social 100% propio y leridano. Además, la novedad de este año es que han abierto una nueva tienda en Tarragona que ha generado 24 lugares de trabajo y ha sido posible gracias a una inversión de 1,7 millones de euros, según explica la compañía.
El origen de los supermercados
El 1938 cae una bomba en la única tienda que tenían. La Guerra Civil, pues, supuso la crema de todo el establecimiento. No es hasta un año más tarde que compran un nuevo local en la Plaza de la Sal de Lleida –que actualmente todavía está en funcionamiento-. Desde que acaba la guerra hasta el 1968 "el negocio estaba estancado porque el mercado estaba totalmente intervenido por el Estado", subraya Oncins. Durante estos años las tiendas han ido cambiando de nombre porque concordaran con las líneas de negocio que trabajaban. Por un lado, la Droguería Pujol, donde venían productos químicos, de limpieza y pinturas. Y por el otro, el Superette Pujol, que fue el primer establecimiento en formado supermercado que lanzaron.
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| Primera tienda Plusfresc de Lleida en la Plaza de la Sal. Cedida |
Endeudarse para crecer
Este mismo año también abrieron dos nuevas tiendas en Lleida. Para poder hacerlo, pero, Pujol tuvo que endeudarse. Debido a este endeudamiento y por el impago de algunos clientes "se produjo una crisis financiera a la empresa", lamenta Oncins. El 1969, su tiet, en Rafael Pujol Solanas, que vivía y trabajaba a Alemania, decide volver para ayudar a la delicada situación por la cual pasaba la empresa. Añadido a la crisis financiera se sumó la muerte de la abuela de Oncins, momento en que se decidió separar el negocio por familias. Por un lado la droguería se la quedó en Rafael Pujol Sala, que eran los establecimientos que entonces daban dinero.
Y por la otra, la alimentación que se lo quedan los hijos del propietario. A raíz de estos acontecimientos, el 1970 se crea Supermercados Pujol Sociedad Anónima (Supsa) dirigida entre tres accionistas, Antoni Oncins y su mujer Carme Pujol – pares de en Rafel Oncins- y su tiet, Pujol Solanas. La inauguración de Supsa supuso "el establecimiento de los fundamentos de la empresa actual; supermercados propios, franquicias y una gestión avanzada", aclara Oncins.
Hacer frente a las crisis
Hasta la década de los 60 la familia Pujol contaba con tres tiendas en Lleida, pero no los daban demasiado dinero. Fue el momento en qué realizaron un estudio de mercado para detectar qué eran los modelos comerciales que más triunfaban en Europa y el modelo Discount era ud. Se trataba de tipologías de supermercados muy básicos, con aspecto de almacén y que permitirían vender muchos productos con menos margen, y por lo tanto, se ganaba más beneficio. "Nuestras tiendas se pasaron al sistema Plus Discount, después de la crisis del petróleo el 1973 –cuando los precios subieron mucho- y fue todo un éxito", señala Oncins. También adoptaron el modelo franquicias "que nos permitía con muy poco capital inicial, pronto obtener beneficios", sentencia. Y, además, "fue el modelo que nos permitió salir fuera de la provincia de Lleida", explica el director de RSC a VÍA Emprendida.
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| Interior de un supermercado de modelo discount. Cedida |
A los años 80, pero, la entrada de Carrefour al mercado los hace replantear nuevamente la estrategia comercial porque sus ventas caen un 10%. Ante la bajada vuelven apostar por el modelo de tiendas iniciales y a introducir productos nuevos como la verdura, variedad de carnes y más adelante el pescado y los productos frescos. "Con capital propio y muy poco endeudamiento remontamos", señala Oncins.
El valor añadido de los establecimientos
El director de responsabilidad social corporativa explica que los supermercados Plusfresc "se diferencian del resto por la calidad y el surtido de los productos frescos, de proximidad y por el trato personal con el cliente". Uno de los aspectos diferenciadores "es que sabemos convivir con otros modelos de mercado, como Mercadona, con quién somos competidores pero cómo que los clientes nos ven que tenemos una oferta diferenciada podemos estar relativamente cerca", subraya.
En pocas palabras, "intentamos hacer un fair play", señala. Buen Precio, en cambio, es la competencia más directa que tienen, porque por precios y diversidad de productos son muy parecidos a Plusfresc. Por otro lado, la tipología de cliente que compra a los establecimientos también es un elemento que los diferencia del resto. Suelen ser consumidores más grandes de 40 años. "La gente joven, generalmente no nos viene a comprar, tenemos que mirar como los podemos atraer", comenta Oncins.
El nacimiento de la marca Plusfresc
Todos estos principios con los cuales basan la estrategia de negocio son también los que el 1991 los permiten lanzar la marca Plusfresc y continuar avanzando dentro del mercado. Cuatro años más tarde empiezan a expandirse además pueblos de la provincia de Lleida y también llegan a Barcelona, donde actualmente, cuentan con cuatro tiendas. El mismo año realizan una inversión tecnológica con la cual instalaron escáners en los establecimientos que los permitían conocer mucha información sobre el que se vendía y con qué cantidad.
También se creó el departamento informático y la primera web de compra, plusfresh.com, que a pesar de ser una gran novedad en aquel momento "la venta por Internet todavía no es rentable", lamenta Oncins. Sin embargo, desde que se ha puesto en marcha el nuevo web "cada año doblamos el número de usuarios". Otro elemento innovador que se introdujo la última década de los años 90 es la Tarjeta Plusi considerada la primera tarjeta del mercado catalán de fidelización de clientes. Con su lanzamiento el 1998 "ganamos en los Estados Unidos el premio Global Electronic Marketing Award por el mejor programa de marketing electrónico presentado por una empresa no americana", detalla sonriendo el director de RSC.
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| La tarjeta Plusi es la primera tarjeta de fidelización de clientes. Cedida |
Plusfresc, comprometido con la sociedad y el entorno
Plusfresc se distancia del resto de supermercados por el compromiso que tiene con sus clientes, la sociedad en general y el entorno. Es por este motivo que el 2007 crean formalmente el departamento de responsabilidad social empresarial (RSE) "todo y siempre haber llevado a cabo acciones en esta materia", aclara Oncins. Por ejemplo, el 1994 lanzamos una de las primeras campañas, la del 0,7% Ordenadores para las escuelas, que consistía en que los puntos de compra que acumulaban los clientes se destinaban en las escuelas de Lleida y provincia para poder comprar materiales como ordenadores, impresoras y escáners.
"Realizamos estas acciones porque forman parte de los valores y de la cultura de la empresa, porque nos hace tener una conexión empática con los clientes, porque refuerza su fidelización y porque nos hace más fuertes de cara a la competencia", expone Oncins en VÍA Emprendida.
Actualmente, colaboran con unas 19 entidades como Jericó, Raíces Santo Ignasi y Banco de los Alimentos. Las acciones en materia de responsabilidad social se concretan en la donación de alimentos a colectivos con menos recursos, a respetar el medio ambiente mediante la incentivación de la reutilización de las bolsas, de cajas, la recogida de aceite de cocina, etc. Además, en sus establecimientos utilizan electrodomésticos y equipamientos eficientes y de bajo consumo. También realizan patrocinios culturales y deportivos como fue el caso del Lleida Baloncesto Plus Plujol y, finalmente, llevan a cabo campañas solidarias como la recogida de donativos para emergencias humanitarias y la venta de artículos solidarios a Unicef o lotería Cree Roja, entre otros.
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| Fachada de uno de los supermercados a la ciudad de Lleida. Cedida |
Supermercados Plusfresc, después de 87 años de negocio, continúa apostando para ser una empresa leridana arraigada a la ciudad, con voluntad de continuar siendo líder en alimentación de Lleida y satisfecha para tener un equipo humano altamente comprometido.
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