Un barrio mediterráneo, martes a las 18 horas. Lluvia en la ciudad y poca gente paseando, menos todavía de lo habitual en esta fase 0. Tienda pequeña, de moda, exhibe un cartel en el escaparate, visible a medias porque la persiana no está abierta del todo: "Rebajas. Liquidación por cierre". Es un ejemplo, como podía ser otro, de los que fácilmente se irá encontrando el consumidor, porque la prohibición en el comercio minorista de generar colas en el interior de los locales que ha hecho el gobierno del Estado -anunciada en el BOE de este sábado 10 de mayo- es poco clara. La disposición adicional 2a anuncia que "los establecimientos no podrán anunciar ni llevar a cabo acciones comerciales que puedan dar lugar a aglomeraciones de público, tanto dentro del establecimiento comercial como en sus alrededores". La medida sólo aplica al comercio offline, puesto que esta restricción "no afectará las ventas en rebaja ni tampoco ventas en oferta o promoción que se realizan a través de la página web", añade la norma estatal. La primera reacción del comercio ha sido negativa: rebajas prohibidas? Con una comunicación tan poco clara, ha hecho falta la petición de los empresarios del textil Acotex porque el ministerio de Reyes Maroto lo aclare: son las aglomeraciones las que se prohíban. Un hecho que, en pleno contexto de distancia de seguridad impuesta, tal vez era más que evidente.
Despacio, este miércoles se ha reinterpretado la norma. Desde Pimec han querido mandar un mensaje de tranquilidad pero también una queja al Gobierno central. En un comunicado apuntan que prohibir las rebajas, ofertas y promociones requeriría una modificación de la Ley de Ordenación del Comercio Minorista; y este hecho, no se ha producido". Pero, como matiza el mismo escrito, el presidente de PIMEComerç, Àlex Goñi, considera que "la redacción de la norma no es clara y ha quedado patente que lleva a confusión por parte del sector", por eso Goñi pide al Ministerio de Sanidad que derogue la Disposición Adicional Segunda.
Desde Comertia explican que, ante la situación, martes habían hecho la consulta jurídica para interpretar la norma y confirmar que ciertamente no hay restricción en las rebajas en las tiendas físicas, "pues esto comportaría hacer una modificación de la ley de ordenación del comercio minorista".
Hablan los comerciantes
En esta confusión (perenne, por todo lo que está pasando con el coronavirus) el gerente de Sant Cugat Comerç, Jesús Carballo, ha celebrado la aclaración del Ministerio de Industria y que finalmente las rebajas estén permitidas. "Lo que tienes que impedir es que no se produzcan aglomeraciones en las tiendas, que podría pasar un sábado por la tarde si se reactiva el consumo", explica. Aún así, destaca que si en el comercio de proximidad se tienen que regular las aglomeraciones y el aforo de los establecimientos, será una buena noticia, puesto que significará que habrá consumo.
Sea como sea, la posibilidad inicial de prohibir las rebajas está muy mal vista desde Sant Cugat Comerç, puesto que podía ser un golpe muy duro de llevar para el sector comercial. El cierre obligado durante el confinamiento ya ha puesto en una situación de riesgo el tejido comercial de proximidad y, el hecho de no poder hacer rebajas para, al menos, vender parte del stock acumulado, era un peligro añadido para su supervivencia.
Además, desde Sant Cugat Comerç consideraban un agravio que se permitiera las rebajas y las promociones por internet y no en las tiendas físicas. "Otra vez nos situaba en desventaja", lamenta Carballo.
Xavier Berneda: "El objetivo no es vender sino recuperar la confianza"
Educar en el online
Una peor posición de salida es la que tendrá el comercio físico, porque cómo ha recordado este martes Xavier Berneda, propietario de Munich, "tenemos que educar la gente en online sobre la responsabilidad de la compra". Berneda ha hecho estas declaraciones durante el encuentro digital Ens en sortirem organizada por Pimec. "No me perdonan el alquiler, sino que nos lo posponen. Y ahora nos dicen que no hay rebajas, tenemos el almacén lleno de producto y no lo podemos sacar para amortizar la inversión", ha espetado Berneda, quien también ha explicado que su firma de calzado deportivo ha abierto un total de 5 tiendas con cita previa: "Tienes que ser súper cuidadoso y aún así estamos facturando muy poco. El objetivo no es vender sino recuperar la confianza". Según ha explicado el empresario, "se tiene que construir una relación con el cliente, no sólo obsesionarnos en vender, pero ahora no toca sólo vender, porque la gente no está sólo para comprar. Tenemos que aguantar como sea, el online sube pero tampoco es la gran solución", ha explicado en la reunión telemática con otros empresarios.
También se han pronunciado los grandes comerciantes, puesto que la medida afecta a todo el mundo. Tal como recoge EP, la Asociación Nacional de Grandes Superficies (Anged), que engloba a empresas como El Corte Inglés, Media Markt o Ikea, entre otras, ha señalado que esta medida generará "más incertidumbre" en el sector. Desde Anged reiteran que la prioridad de la gran distribución es garantizar la "seguridad" de las tiendas y el "poder abrir", puesto que recuerdan que la apertura de los comercios en España va más lenta que en el resto de Europa, puesto que en Francia ya han empezado a abrir todos las tiendas y en Italia está prevista el 18 de mayo.
Con todo, en este contexto las empresas tecnológicas se están avanzando. Por ejemplo, Glovo anuncia que arranca una iniciativa de apoyo al pequeño comercio barcelonés con el objetivo de conseguir una mayor visibilidad dentro de la app y así impulsar sus negocios durante la desescalada. La plataforma dedicará en exclusiva una burbuja dentro de su app bajo el nombre "Los de tu Barrio" en la que los usuarios únicamente se encontrarán los comercios locales de su zona como restaurantes, bares de toda la vida o panaderías de proximidad.