La visión artificial, computer vision, es una tecnología que pertenece a la rama del machine learning que consiste en enseñar a los ordenadores a ver y entender el contenido de las imágenes. Aporta a los computadores una comprensión visual del mundo. Amazon utiliza visión artificial para realizar inspecciones visuales de calidad de miles de productos cada día, y así no tiene que poner a personas que dedicarían más tiempo a esta tarea. La visión artificial también forma parte de los procesos de la industria 4.0, con robots que calculan la medida exacta de un material o las cantidades exactas de un producto. Los coches autónomos de Tesla también necesitan esta tecnología para entender la distancia entre los objetos y construir una ruta. Y más allá de la logística, la industria y la automoción, hay un buen abanico de sectores y empresas que están consiguiendo, con esta tecnología, optimizar procesos, perfeccionar resultados y escalar soluciones.
Es el caso de DyCare, una startup catalana especializada en rehabilitación física que acaba de lanzar una solución disruptiva en el mercado basada en visión artificial. Sólamente usando una cámara del paciente, es capaz de analizar hasta 74 puntos del cuerpo para proporcionar feedback en tiempo real. DyCare ha añadido esta tecnología a su plataforma ReHub, desde donde ofrecía soluciones digitales para hacer terapias de rehabilitación física a distancia, sin supervisión profesional en directo. Rehub es capaz de monitorar el movimiento del paciente y aportar un biofeedback al momento, para facilitar la correcta ejecución de los ejercicios. Además, está a la nube, y esto permite que el profesional pueda acceder a los datos prácticamente de manera instantánea.
La startup nació en 2017 de la mano de Silvia Raga y Ricardo Jauregui como una solución de rehabilitación física que utilizaba sensores de movimiento, y más adelante también de fuerza, Linx. Está orientada a aportar al personal sanitario herramientas para obtener datos precisos y así perfeccionar el seguimiento del paciente. El producto ha tenido y tiene mucho éxito, pero, según Raga, con Linx se dieron cuenta que "el mercado requería más soluciones que dieran más autonomía a los pacientes y que pudieran incrementar la productividad de los centros de rehabilitación sin sacrificar la calidad del tratamiento".
La tecnología de ReHub cuenta con algoritmos de inteligencia artificial y avanzados sensores que permiten medir movimiento y fuerza simultáneamente, y garantizan una mejor monitorización del paciente. Y a estas funcionalidades, DyCare le ha sumado la tecnología de visión artificial, que permite analizar el rango, la velocidad y la repetición del movimiento. Se puede hacer, además, desde cualquier dispositivo que tenga una cámara, hecho que facilita todavía más la escalabilidad de su aplicación.
Linx y ReHub, ¿quién lidera el tratamiento?
Linx y ReHub han nacido para cambiar y mejorar el servicio de las rehabilitaciones a través de la tecnología, pero desde perspectivas diferentes. "Linx es un maletín que el profesional de rehabilitación o fisioterapia tiene encima de su mesa y sirve en el momento en el que el paciente está con él haciendo la rehabilitación", explica Raga. ReHub, en cambio, está orientado directamente al paciente: "permite que pueda hacer programas de rehabilitación muy precisos desde casa".
En ambos casos, pero, el negocio está orientado al B2B, de empresa a empresa. Pero uno en formato producto, Linx, y el otro como licencia, ReHub.
Son, además, el partner tecnológico de DKV y conjugan el binomio perfecto entre corporación y startup. Por un lado, tienen su plataforma digital de rehabilitación instalada en más de 400 centros colaboradores de DKV y, además, han integrado Rehub a la aplicación Quiero cuidarte de DKV, desde donde dan un servicio de telerehabilitación 100% integral a todos los usuarios de DKV. "Cualquier asegurado puede recibir una valoración y un plan terapéutico de rehabilitación de forma totalmente online", explica Raga.
A finales de febrero, la startup anunció el cierre de una ronda de inversión de 1,3 millones de euros, según Raiga, "orientada a impulsar la consolidación e internacionalización de ReHub". La startup está presente a España, hace poco ha entrado en el mercado italiano y tiene previsto aterrizar en el Reino Unido a lo largo del 2022, ejercicio en el que prevén lograr una facturación de un millón y medio; con "Rehub como la estrella de la casa", representando el 80% de la facturación.