Caixabank ha ganado 1.266 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, un 28,4% menos que en el mismo periodo del año pasado, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La reducción se debe de a los costes del impacto del ERE pactado con los sindicatos en el segundo trimestre, que prevé la salida de más de 2.000 trabajadores, y que ha costado al grupo 978 millones de euros (685 millones limpios) en gastos extraordinarios.
La reducción de la plantilla, que forma parte del plan estratégico de la entidad, le permitirá un ahorro de 200 millones el año. De hecho, excluyendo el coste del ERE, el resultado de Caixabank por el tercer trimestre sería de un beneficio de 1.951 millones de euros, un 10,4% más que en el mismo periodo de 2018.
Al cerrar el mes de septiembre, el grupo Caixabank contaba con 35.669 trabajadores, una reducción de 1.841 personas respecto a junio. Tenía 4.733 oficinas, 183 menos que el trimestre anterior y 370 menos que en el mismo momento del año 2018. Por otro lado, Caixabank ya cuenta con 416 oficinas Store, en linea con el objetivo de llegar a las 600 en junio de 2020.
Los ingresos core, los derivados de la actividad principal de Caixabank, representan el 94% del total y consiguen durante el tercer trimestre su resultado más alto, hasta los 6.201 millones de euros. La entidad lo atribuye "a la buena evolución de la actividad comercial".
El margen de intereses acumulado hasta septiembre llega a los 3.720 millones de euros, un 1,3% más que el año pasado, por el aumento del volumen de crédito y los menores costes de financiación retail e institucional. Las comisiones limpias suman 1.904 millones de euros, un 1,7% menos. En esta partida, las comisiones bancarias, los valores y otros se sitúan en los 1.099 millones de euros, una variación interanual del -1,1%.