Rodalies reduce al 50% su oferta siguiendo los parámetros marcados por las autoridades. Según informan en un comunicado, de forma coordinada con el titular del servicio, se reajusta el servicio ferroviario a la demanda existente, que se ha reducido prácticamente un 95%, lo cual permite que se mantenga, como máximo, un nivel de ocupación que represente un tercio de la capacidad máxima. De este modo se respeta el propósito de mantener distancias entre los viajeros recomendadas por las autoridades sanitarias.
Desde el pasado miércoles 26, las líneas R7, RG1 y RT1 no prestan servicio. En la línea R7 la estació de Universitat Autònoma de Barcelona está cerrada y el resto están servidas por la R4. La RG1 comparte recorrido con trenes de la R11 y la R1 y, finalmente, los viajeros de la línea RT1 disponen de servicios de las líneas R14, R15 y R16 para desplazarse entre Tarragona, Vilaseca y Reus. Hay que recordar que los trenes de la línea R11 inician o finalizan su recorrido en la estación de Portbou y los de la R3 en Puigcerdà.
Estas medidas han sido adoptadas en el marco del estado de alarma decretado por el Consejo de Ministros con motivo del epidemia de coronavirus, que obliga a una situación excepcional de movilidad y a la aplicación de medidas sanitarias. Renfe desaconseja viajar excepto que sea por razones inaplazables o de extrema necesidad.