Una muestra de las aguas del río Segre que viajó a las Filipinas fue el inicio de una relación muy estrechada entre la empresa San Miguel y la ciudad de Lleida, que este lunes celebra su 60è aniversario. La capital del Segrià se convirtió en el lugar donde la multinacional cervesera creó su primera fábrica en el Estado español. La aventura de los empresarios Miguel Vidal y Enrique Suárez, desplazándose al país asiático para entrevistarse con Andrés Soriano, propietario de San Miguel Filipinas, dibujó el embrión de la actual compañía.
Desde sus inicios, la planta de San Miguel en Lleida se ha centrado en la innovación. La actividad en I+D+y ha propiciado que en la fábrica leridana se hayan producido las cervezas de la gama 0,0% y la primera ecológica del Estado. Con una plantilla de 180 trabajadores y con una producción de 600 millones de botellas al año, uno de los hechos diferenciales de la sede se encuentra en la innovación en el pacakging de los productos. De hecho, en Lleida cuentan con cuatro líneas de envasado multiformat.
La empresa de Lleida
Más allá de las novedades productivas y la apuesta por la innovación, San Miguel tiene un vínculo especial con la ciudad de Lleida. El director de la fábrica, Manuel Heredia, lo define con un ejemplo. "San Miguel no se entiende sin Lleida y Lleida no se entiende sin San Miguel". Así, apela al hecho que "resulta difícil encontrar un leridano que no trabaje o haya trabajado con nosotros". Esta asimilación de la empresa y la ciudad ya se forjó a la década de los 60, cuando San Miguel era la empresa agroalimentaria de Lleida y situó sus instalaciones en unos terrenos donde no había nadie. Hoy, ha ubicado el Polígono Industrial Lo Segre.
Dejando de banda el carácter local inherente a la firma, Heredia destaca los valores vinculados a la planta leridana en sus 60 años de vida. "Nuestra estrategia se ha basado en la innovación y a estar en vanguardia del sector. Esto ha favorecido el componente internacional, que forma parte de nuestro ADN, puesto que somos el primer centro exportador de Mahou San Miguel en España".
La de Lleida es la primera fábrica que se creó en España y se ha convertido en un centro de referencia en innovación
Más de una veintena de productos nacidos en el Segrià
La reducción del consumo de agua, la renovación del proceso de elaboración de la cerveza y adaptarse a las necesidades del mercado con nuevos envases y formatos son algunas de las líneas de trabajo que se desarrollan en Lleida. Estas, junto con las inversiones para mejorar el comportamiento ambiental y la calidad de la bebida, han conseguido que desde la capital del Segrià se hayan presentado más de 25 productos en la última década.
La vocación internacional lo ha impulsado a exportar desde Lleida además de 20 países, especialmente en el Reino Unido. Desde la empresa, se comenta que han intentado combinar la tradición, con materias primeras de proximidad, con los procesos de automatización en el momento de producir, el que garantiza la calidad de la cerveza y la eficiencia medioambiental.
Manuel Heredia señala la identificación que San Miguel continúa teniendo con la sociedad leridana. La compañía patrocina acontecimientos tan arraigados en la ciudad como el Encuentro del Caracol celebrado este fin de semana, además de colaborar con la Federación de Hostelería en un programa de becas de formación para promover la ocupación a la ciudad. "Esta vinculación tan estrechada nos da un plus de responsabilidad".
San Miguel patrocina acontecimientos tan arraigados en la ciudad como el Encuentro del Caracol
La fábrica se fundó el 1957 con una inversión de un millón de pesetas. Seis décadas después, el centro de Lleida produce dos millones de hectolitros de cerveza, dispone de un almacén con una capacidad de 6.500 metros cuadrados y una superficie de 165.000. El mismo espíritu innovador y aventurero que empujó dos empresarios a marchar hacia las Filipinas se mantiene hoy en un mercado competitivo, en el cual el consumidor puede escoger entre 800 referencias de cerveza.