Seat ha superado en el primer semestre del año con unas ventas de 7.400 millones de euros, lo que representa un incremento de un 37,8%. En clave de beneficios, la firma automovilística registra unas ganancias de 371 millones de euros, principalmente por la mejora del negocio en Cupra y una mayor eficiencia a la hora de gestionar la producción y suministros. "El trabajo duro nos ha llevado más lejos de lo que podíamos imaginar", apunta Wayne Griffiths.
En este sentido, el presidente de la compañía asegura que "nos encontramos en un proceso de transformación y con potencial de crecimiento". De cara al futuro, Griffiths apunta cómo el objetivo debe ser "alcanzar un beneficio operativo más sólido y convertirnos en una empresa más sostenible". Superada la fase más crítica de la falta de suministros, Seat confirma 261.400 entregas de vehículos.
Los resultados semestrales llegan pocos días después de que se haya anunciado una inversión de 300 millones de euros en Martorell para la construcción de una planta de ensamblaje de celdas de baterías. Tal y como expresa Wayne Griffiths, este proyecto supondrá la creación de unos 500 puestos de trabajo, de los que gran parte serán directos. La futura instalación tendrá una superficie total de 64.000 metros cuadrados y está previsto que entre en funcionamiento en 2025. “Nos encontramos en un momento clave para nuestra industria, y por esta razón estamos destinando grandes recursos para lograr una movilidad sostenible”, describe Griffiths. En este sentido, el ejecutivo asegura que el objetivo final es "convertir a España en un hub de movilidad eléctrica en Europa". La planta realizará un trabajo complementario a la acción del grupo Volkswagen en la gigafactoría de Sagunto.