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Seat exige eliminar los aranceles al Cupra Tavascan y alerta de riesgos en la producción

La empresa de automoción catalana defiende que su coche es español y no chino y advierte que mantener los aranceles los expondría a "multas inasumibles"

El modelo de coche Cupra Tavascan expuesto en el stand del Salón Internacional del Automóvil | ACN
El modelo de coche Cupra Tavascan expuesto en el stand del Salón Internacional del Automóvil | ACN
Redacción VIA Empresa
Barcelona
30 de Diciembre de 2025
Act. 30 de Diciembre de 2025

Seat continúa luchando por eximir a su Cupra Tavascan de los aranceles europeos a China. El presidente de la compañía, Wayne Griffiths, ha asegurado en una entrevista a El Periódico que está “trabajando” con la Comisión Europea y el gobierno español para evitar esta tasa del 20,7% para su modelo 100% eléctrico. El motivo es que el vehículo se fabrica en Hefei, en China, aunque Griffiths matiza que este “no es un coche chino, eléctrico y barato”, sino que es “un coche español y europeo, diseñado sobre la base de la plataforma tecnológica de Volkswagen, construido en una fábrica en China propiedad del grupo alemán, como fabricante europeo”.

 

En este sentido, el dirigente ha insistido que no es “justo” que al Tavascan se le aplique una medida que pretende contrarrestar la competencia china, que la Unión Europea (UE) considera desleal. “La españolidad del Cupra Tavascan está fuera de duda y no debería pagar el arancel impuesto a China”, ha remarcado Griffiths, que ha añadido que si las instituciones hacen caso omiso de sus advertencias, la producción de Martorell podría estar en riesgo.

Todo esto, según Griffiths, podría llevar a "interrumpir" la fabricación prevista de 530.000 vehículos con motor de combustión interna en Martorell, el equivalente a 90.000 anuales

No es la primera vez que el presidente de la compañía catalana se pronuncia respecto al SUV de Cupra. En una publicación el mes de octubre en LinkedIn, Griffiths explicó que "una reducción de volúmenes del Cupra Tavascan pondría en peligro la capacidad de Seat de cumplir con los objetivos europeos de reducción de CO₂", ya que tendría que hacer frente a "multas inasumibles".

 

Todo esto, según Griffiths, podría llevar a "interrumpir" la fabricación prevista de 530.000 vehículos con motor de combustión interna en Martorell, el equivalente a 90.000 anuales. En general, Seat ha sido una de las empresas de automoción que más ha participado en las discusiones con las instituciones españolas y europeas respecto al vehículo eléctrico. De hecho, Griffiths dimitió de su cargo de presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) el pasado mes de junio.