La fusión entre Skitude, la red de apps de esquí, y la tecnológica Skioo, que ofrece el acceso a estaciones de esquí con una sola tarjeta sin tener que hacer colas, tendrá como objetivo para la próxima temporada la optimización de los canales de venta por las más de 150 estaciones de esquí con las que opera en todo el mundo.
"La experiencia, la tecnología y el equipo internacional que aportan ambas compañías sueño las claves de este salto cualitativo", tal como se apunta en un comunicado emitido por la compañía, que también ha confirmado que "la operación está valorada en 8M de euros".
Skitude experimentará, pues, una mejora en cuanto a las funciones de la red social. Principalmente, el uso de sistemas de puesto-pago que facilitarán la experiencia del usuario a la nieve agilizando su acceso a pistas y que ayudará a las estaciones de esquí a posicionar sus productos a la plataforma en linea.
"Estamos trabajando porque los esquiadores puedan, por ejemplo, comprar un forfet de esquí de forma anticipada y cargarlo la tarjeta RFID, o validar previamente con tarjeta de crédito", explica el CEO de Skitude Marc Bigas. "Estos principios de convenience y puesto-pago ya son conocidos por servicios muy populares como Uber", destaca.
En este sentido, afirma que su plataforma digital conjunta aportará una nueva dimensión a la industria del esquí con un viaje digital más cómodo y divertido ", tal como explica, en este caso, el presidente de Skitude, Yngve Tvedt.
De este modo, Tvedt asegura que Skitude está participando en la "digitalización del sector" y coincide con Marc Bigas al afirmar que esta experiencia ofrecerá "más comodidad al esquiador" así como "soluciones potentes para los canales de venta móvil y servicios de marketing" que ayudarán a las estaciones a estar mejor conectadas con las necesidades de sus potenciales clientes.
Interacción antes, durando y después
La fusión entre las dos empresas, además, buscará la manera de combatir el estancamiento de los usuarios en la industria: uno de los retos de la industria del esquí. "Nos embarcamos en un viaje para resolver retos mediante la tecnología", asegura el CEO de la empresa y añade que la experiencia acumulada estos años tanto por Skitude cómo por Skioo será "una información valiosa para las estaciones de esquí".
Hay que recordar que Skitude siempre ha apostado por una interacción de los usuarios "antes, durando y después de su visita" el que, tal como avala Bigas, "fortalece la competitividad de la industria y permite que siga avanzando".
Una comunidad de más de 1,3 millones de esquiadores
En la actualidad, la comunidad de Skitude está formada por más de 1,3 millones de esquiadores que han utilizado alguna de las aplicaciones gratuitas compatibles con la plataforma Skitude, la mayoría de ellas aplicaciones oficiales de estaciones de esquí.
Se trata de una comunidad muy activa. Gracias al Tracker GPS, con el cual pueden registrar las suyas descensos, ya han registrado actividad en más de 1.200 estaciones en 45 países de todo el mundo y han podido participar en más de 250 retos que los ha permitido ganar días de esquí, material como esquíes, botas o cámaras de acción, y descuentos exclusivos.
Se consolida el proyecto
La operación de 8M de euros, supone la consolidación de un proyecto internacional de 50 personas, con oficinas principales en Girona, Lausanne y Oslo, y seguir investigando para encontrar soluciones dinámicas y mejorar la experiencia del consumidor a las estaciones.
El accionariado de la compañía sigue liderado por los socios emprendedores Marc Bigas y David Huerva, participado por los socios inversores que ya contaba, The Crowd Angel (TCA) y Business Angels Girona (bagi), y con la fusión se incorporan tres fondos noruegos: el fondo gubernamental Investinor, el family office Canica y el venture builder Norselab que cuenta con el campeón olímpico de esquí alpino Aksel Lund Svindal. En la operación, Bbooster, uno de los primeros inversores de Skitude, ha realizado un exit total, y bagi y TCA un parcial.