Europa se "pone las pilas" para luchar contra la morosidad. Las empresas tardan cada vez más en pagar las facturas a sus proveedores e incluso superan los 70 días de media, cuando el plazo máximo debería ser de 60 días. Un reglamento muy aplaudido por los autónomos y las pequeñas y medianas empresas, pero que puede llevar quebraderos de cabeza a muchas organizaciones.
De hecho, quien lleva años reclamando más medidas es la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (PMcM), una confederación de asociaciones patronales que agrupa a cerca de un millón de empresas en todo el Estado. En esta ocasión será la Comisión Europea quien ultime un reglamento para obligar a las empresas a pagar las facturas no más tarde de 30 días, con el objetivo de combatir la morosidad.
Según ha avanzado la PMcM, se trata de una normativa que sustituirá a la Directiva 2011/7/UE sobre la Lucha contra la Morosidad, un instrumento que la presidenta del ejecutivo comunitario, Ursula Von der Leyen, prometió actualizar en su discurso sobre el Estado de la Unión de 2022. Con el nuevo reglamento, la Comisión Europea también quiere fomentar la liquidez de las empresas. El hecho de que sea un reglamento y no una directiva provocará que su aplicación sea inmediata a los Estados miembros una vez que se apruebe.
La administración pública y la hostelería son los que pagan con mayor retraso, mientras que las micro y pequeñas empresas son las más puntuales
Para la PMcM, la morosidad es un "problema sistémico" para la economía de la Unión Europea que afecta de forma "desproporcionadamente grave" a las pymes. La entidad que lidera Antoni Cañete, también presidente de Pimec, asegura que los impagos "obstaculizan la competitividad y aumentan la incertidumbre" y por este motivo ha celebrado la propuesta. "Poder contar con los pagos a tiempo permite a las empresas cumplir con los compromisos que tienen las pymes con sus clientes y trabajadores", destacan desde la organización. Por último, Europa lleva años dando "toques de atención" a España, Portugal, Italia, Eslovaquia y Grecia para que cumplan la ley.
Como curiosidad, en España la administración sería el sector con mayor retraso medio de pago, seguido de la hostelería. Las más puntuales son las micro y pequeñas empresas. Estas últimas suelen tener un período de demora de 12,01 días, mientras que las medias tienen 12,99 días y las grandes con 15,35.
Entre las causas más comunes que se produzcan estas demoras, según el Análisis del comportamiento de pago empresarial, publicado por Informa D&B, prevalecen los problemas financieros, como han asegurado el 39% de los encuestados, mientras que el 33% cree que el causante más grande son los problemas administrativos y el 15% lo atribuyen a demoras intencionadas.