Los trabajadores de la subcontrata Bartic Clan denuncian a Nissan por la sustitución ilegal de trabajadores en medio de la huelga por el cierre de la planta de la multinacional en la Zona Franca. El despacho de abogados Col·lctiu Ronda, representante de los huelguistas en su conflicto con la empresa, ha reclamado a la Inspección de trabajo que se presente a las instalaciones de Nissan en Barcelona en medio de acusaciones de carencia de diálogo e intentos de división de los trabajadores por parte de la compañía japonesa.
Esta denuncia se produce en el contexto del inicio de la parada indefinida de la actividad por parte de ocho de las subcontratas de las tres plantas catalanas que Nissan cerrará a finales de año. La huelga, que tenía que haber comenzado el día 19 de abril pero que los trabajadores decidieron suspender por la aparente voluntad negociadora de Nissan y las subcontratadas, se ha retomado, según los comités, en vista de la falta de diálogo ofrecida por las empresas. Los trabajadores exigen a la multinacional un asiento en la mesa de negociación con el gobierno central y los sindicatos para encontrar un inversor que se quede con las fábricas y así, afirman, salvar el máximo número de puestos de trabajo posible.
Según los representantes de los trabajadores de las ocho empresas, el seguimiento de la huelga ha sido masivo, con especial incidencia a la planta de la Zona franca, donde la movilización de los huelguistas, que se han concentrado a los accesos a la fábrica, ha dificultado la actividad, según ha informado Col·lectiu Ronda. Desde Nissan afirman que la parada "no ha llegado a afectar las líneas de producción", hecho que los comités de huelga atribuyen, precisamente, a las sustituciones ilegales que ahora han denunciado a la Inspección de trabajo.