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Una transacción histórica: los Boston Celtics pasan a nuevas manos a cambio de 6.100 millones

Se trata de una de las franquicias más conocidas del deporte americano en todo el planeta, además de ser el equipo que más veces ha quedado campeón de la NBA

El equipo actual de Boston Celtics | EP
El equipo actual de Boston Celtics | EP
28 de Marzo de 2025

Hace una semana supimos que una de las entidades deportivas más conocidas del mundo había cambiado de propietario y, al mismo tiempo, había marcado un récord en el ámbito de las transacciones de clubes deportivos. Se trata de los míticos Celtics de Boston, un equipo de baloncesto profesional que ha pasado de pertenecer a la familia Grousbeck a convertirse en propiedad de un pool de inversores liderado por el emprendedor Bill Chisholm. Hablamos de récord, y es que la transacción se ha valorado ni más ni menos que en 6.100 millones de dólares, superando la que era hasta ahora y desde 2023 la cifra más alta en este tipo de operaciones en el deporte americano, cuando los Washington Commanders (NFL, fútbol americano) fueron adquiridos por 6.050 millones. Quizás el nombre de esta franquicia no suene mucho, pero son los antiguos Washington Redskins, que en 2020 optaron por modificar la denominación por cuestiones de corrección política. Si miramos hacia Europa, hasta ahora el cambio de manos más sonado fue el que se produjo en 2022 cuando Roman Abramovich se desprendió del Chelsea FC en beneficio de un consorcio de inversores americanos liderado por Todd Boehly, a cambio de una inversión total de 4.250 millones de libras esterlinas (que en ese momento eran casi 5.000 millones de euros). Esta inversión comprendía la simple transacción de 2.500 millones, más una inversión comprometida en el club de 1.750 millones. 

 

En el caso de los Boston Celtics, Wyc Grousbeck (1961) era el propietario desde que en 2002 adquirió la franquicia por 360 millones de dólares, lo que ahora parece una cifra menor. En otras palabras, la relación entre el precio de venta y el de compra implica una revalorización anual superior al 13% compuesto. Parece que han hecho un buen negocio, salvo que por el camino hayan tenido que aplicar inversiones millonarias, circunstancia que no parece haber sucedido. Antes de ser propietario del club, Grousbeck había ejercido como socio en una firma de venture capital y recientemente había tenido alguna disputa con su padre (Irving Grousbeck, también accionista) por el elevado costo de la plantilla profesional del equipo, una apuesta personal del hijo para conseguir quedar campeón de la NBA. 

La transacción se ha valorado ni más ni menos que en 6.100 millones de dólares, superando la que era hasta ahora y desde 2023 la cifra más alta en este tipo de operaciones en el deporte americano, cuando los Washington Commanders fueron adquiridos por 6.050 millones

Para valorar la transacción, hay que tener en cuenta que la facturación de los Boston Celtics en la temporada 2023/24 fue de 493 millones de dólares (un 40% menos que el Barça), con un EBITDA de unos 30 millones, lo que lleva el multiplicador de la compra hasta una cifra vertiginosa de más de 200 veces (dicho de otra manera, para recuperar la inversión hecha vía beneficio operativo se necesitarían más de 200 años). Debemos suponer que los compradores tienen un plan para incrementar el valor de la entidad y hacerla más rentable. Pero, ¿quiénes son estos compradores? La cara visible es, como avanzábamos, Bill Chisholm, un economista de Nueva Inglaterra que tiene alrededor de 55 años, que se ha hecho rico con la industria informática y que siempre ha volado por debajo de los radares, de manera que ni los mismos americanos lo conocían antes de esta operación. Su gran salto se produjo en 2002, cuando abandonó la pequeña firma de capital riesgo que dirigía para incorporarse a las filas del multimillonario Romesh Wadhwani, una fortuna forjada en Silicon Valley, que le ofreció entrar como socio en una empresa informática nueva de trinca. La firma se llamaba Symphony Technology Group (más conocida como STG) y se dedicó a comprar y mejorar compañías de software de tamaño medio para potenciarlas y volverlas a vender. Uno de los éxitos más destacados fue Information Resources (actualmente Circana), que adquirieron por menos de 120 millones de dólares y ocho años después, en 2011, vendieron por unos 1.000 millones. 

 

Otro de los inversores que forman parte del consorcio de Chisholm es Robert Hale Jr, propietario de Granite Telecommunications, una compañía que fundó solo medio año después de sufrir la quiebra de su anterior negocio. Hoy en día Granite factura 1.800 millones de dólares y da empleo a 2.300 personas. La fortuna de Hale está valorada en 5.800 millones de dólares y acumula donaciones para la investigación del cáncer de 350 millones. En el grupo también está Bruce A. Beal Jr, presidente y socio de Related Companies, una firma inmobiliaria que gestiona activos por valor de 60.000 millones de dólares. Pero Beal ya tenía un pie puesto en el mundo del deporte profesional antes de su entrada en los Celtics, porque es vicepresidente de los Miami Dolphins de fútbol americano, un club que tiene como accionistas minoritarios a personajes célebres vinculados a Florida, como Gloria Estefan (y su marido, Emilio), Marc Anthony o las hermanas Serena y Venus Williams. 

Bill Russell, leyenda de los Celtics con más anillos de la historia de la NBA | EP
Bill Russell, leyenda de los Celtics con más anillos de la historia de la NBA | EP

Un nombre que sí que resonará a los lectores entre los nuevos propietarios de los Celtics es el fondo de inversión Sixth Street, que ha desembolsado 1.000 millones de dólares en la franquicia, lo que les ha dado acceso a un 16% del capital. Decimos que este nombre no resultará nuevo, porque es precisamente el fondo que adquirió una parte de los derechos de televisión del Barça y que previamente había hecho negocios con el Real Madrid. 

Todo el mundo ha oído hablar alguna vez de los Boston Celtics, pero eso no debe resultar un obstáculo para hacer un breve recordatorio de su gloriosa historia. La edad de oro del club es, sin duda, la que se extendió entre 1957 y 1969, con una racha gloriosa que les permitió ganar once títulos (ocho de seguidos) de la NBA. Aquellos tiempos fueron los del mítico entrenador Arnold "Red" Auerbach y de jugadores como Bill Russell o K.C. Jones. Más tarde, durante la década de transición de los setenta, lograron dos veces el campeonato, hasta enlazar con la segunda época dorada, los años ochenta, donde ganaron tres veces la competición, pero, sobre todo, ofrecieron al mundo una lucha épica con los Lakers de Los Ángeles. Fue la era de Larry Bird, Kevin McHale o Robert Parish. Desde 1986 han sufrido una larga sequía solo rota con las victorias de 2008 y 2024. 

La edad de oro de los Boston Celtics es, sin duda, la que se extendió entre 1957 y 1969

Esta historia les ha llevado a ser una de las franquicias más conocidas del deporte americano en todo el planeta, además de ser el equipo que más veces ha quedado campeón de la NBA, con un total de 18 títulos. Justo detrás de ellos están los californianos de los Lakers, con sede en Los Ángeles y 17 títulos ganados.